domingo, 24 de octubre de 2010

Acontecer Diario


Carmen Lila Romero / Luis Alberto García

Sucesos y Sucedidos

SÍNTESIS PERIODÍSTICA ®

www.cartamesoamericana.com / www.ikbalam.org

Domingo 24 de octubre de 2010

AYUDEMOS A NUESTROS HERMANOS MEXICANOS EN DESGRACIA

SUPLEMENTO “ENFOQUE” DE REFORMA

Colaborador Invitado / Inés, Valentina y el fuero militar

La iniciativa de reforma al fuero militar es insuficiente para cumplir los compromisos de México en materia de derechos humanos

Colaborador Invitado

(24 octubre 2010).- Juan Carlos Gutiérrez y Silvano Cantú

Inés Fernández Ortega y Valentina Rosendo Cantú, dos mujeres indígenas meph'aa oriundas del estado de Guerrero, fueron agredidas sexualmente por elementos del Ejército en 2002. El pasado 1o. de octubre, la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) notificó las sentencias al Centro de Derechos Humanos de la Montaña "Tlachinollan", organización no gubernamental que representa a las víctimas, en las que determinó la responsabilidad del Estado mexicano por haber vulnerado a las señoras Fernández y Rosendo diversos derechos consagrados en la Convención Americana de Derechos Humanos.

Estas sentencias se suman a las emitidas a finales de 2009 sobre los casos Campo Algodonero (asesinatos de Claudia Ivette González, Laura Berenice Ramos Monárrez y Esmeralda Herrera Monreal en el contexto de la impunidad y el feminicidio de mujeres en Ciudad Juárez) y Rosendo Radilla Pacheco (desaparición forzada en el estado de Guerrero en el marco de la denominada Guerra Sucia). Ambas resoluciones están en espera de cumplimiento cabal por parte del Estado mexicano.

Son numerosas las obligaciones que se derivan para el Estado de las sentencias de las señoras Fernández y Rosendo, pero vale la pena subrayar la relativa al derecho a la verdad.

Toda persona tiene, individual o colectivamente, el derecho a un conocimiento seguro y cierto sobre lo acontecido. Por tanto, su garantía implica la obligación para el Estado en su conjunto de conducir investigaciones tendientes a determinar efectivamente las causas de la violencia y el contexto que llevaron a que dichas violaciones sucedieran; establecer la responsabilidad de los autores o encubridores; proponer una política de reparaciones integrales a las víctimas directas e indirectas e implementar medidas de no repetición.

Valentina e Inés reafirmaron esta idea al manifestar que después de más de ocho años de búsqueda de justicia, finalmente la Corte IDH les ha dado la razón, estableciendo como un hecho incontrovertible que fueron violadas sexualmente y torturadas:

"Por fin se reconoció que siempre dijimos la verdad", dijo Valentina.

"No sabemos mentir, para nosotras y nuestras familias lo más importante ahorita es que nos dejen vivir en paz, con tranquilidad", señaló Inés Fernández.

De igual modo, dada la titularidad universal del derecho a la verdad, y el hecho de que la impunidad y el olvido lastiman la vida democrática de toda la sociedad, el Estado al ser sentenciado debe adoptar medidas que incluyen el funcionamiento independiente y eficaz del Poder Judicial.

Evidentemente, y así lo señala la Corte IDH, estos requisitos no se producen bajo el actual sistema de justicia militar. Así como lo había hecho en la sentencia del caso Radilla, en estas sentencias conminó a reformar el Código de Justicia Militar y a establecer recursos de impugnación efectivos para impedir que esta jurisdicción se aplique extensivamente a casos en los que hay civiles involucrados.

Pero no bastará con una reforma que excluya del fuero militar algunos delitos, como lo propone la iniciativa de reforma al Código de Justicia Militar presentada el 18 de octubre pasado al Senado por el gobierno federal, la cual señala que la Procuraduría Militar declinará la competencia sobre violaciones tan graves como la desaparición forzada, la tortura o la violación sexual. La Corte es clara al asentar que "la jurisdicción militar no cumple con los requisitos de imparcialidad, independencia y competencia para conocer violaciones a los derechos humanos y el sometimiento del caso a la misma viola la garantía de juez natural".

Por ello, para satisfacer los compromisos internacionales del Estado mexicano en materia de derechos humanos es menester que los legisladores se pronuncien en sentido contrario a la iniciativa enviada por el Ejecutivo y asuman integralmente las sentencias de la Corte, estableciendo que la jurisdicción militar no debe ser aplicada extensivamente, bajo ninguna circunstancia, a delito alguno que constituya violación de los derechos humanos.

Juan Carlos Gutiérrez es director general de la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, A.C.

Silvano Cantú es director de incidencia e investigación de la misma comisión.

Sentencia de la CIDH

El Estado es directamente responsable de haber violado el derecho a una vida libre de violencia; a no ser torturada; a la integridad personal de los familiares de Ias víctimas; a la protección de la dignidad y la vida privada; a las garantías judiciales y a la protección judicial.

La (in)utilidad de las giras

Reportaje Diplomacia o despilfarro. Felipe Calderón viaja más que su antecesor, Vicente Fox; sin embargo, especialistas aseguran que no ha logrado mejorar la imagen de México en el mundo ni evitar los cuestionamientos a su política exterior

Martha Martínez

(24 octubre 2010).- En casi cuatro años de gobierno, el presidente Felipe Calderón ha realizado 49 giras al extranjero con un costo promedio de un millón 524 mil pesos cada una. La utilidad de dichos viajes, sin embargo, es cuestionada por especialistas y legisladores, quienes se quejan de que el gobierno federal no ofrece información completa sobre los resultados de estos viajes.

Entre enero de 2007 y mayo de 2010 el titular del Ejecutivo realizó 45 viajes a 35 países para asistir a los foros multilaterales más importantes del mundo, recibir dos premios internacionales y sostener 224 reuniones, 48 cenas, 47 almuerzos y 15 desayunos con jefes de Estado, reyes, funcionarios de gobierno, empresarios, intelectuales y representantes de organizaciones civiles, según un informe disponible en el portal electrónico de la Presidencia de la República. A esos viajes hay que sumar cuatro hechos en fecha posterior a la elaboración de dicho documento, entre los que figura la asistencia del Presidente a la inauguración del campeonato mundial de futbol en Sudáfrica.

El costo total de estas giras -a las que asistió con comitivas de alrededor de 10 personas- fue superior a los 74 millones 685 mil pesos, y los rubros en los que más gastó fueron transporte aéreo, hospedaje y alimentación (84 por ciento de los recursos erogados).

De la información difundida por la Presidencia, se puede concluir que el número y la duración de cada gira ha ido en aumento.

En 2007 Calderón salió del país en ocho ocasiones y se ausentó 38 días; el costo promedio por día de estancia en el extranjero fue de 381 mil 761 pesos.

Para 2009, el número de salidas aumentó a 17 y la duración a 57 días; el desembolso diario fue de 404 mil 736 pesos.

Durante los primeros ocho meses de 2010, los viajes suman 10 -en cuatro de los cuales no hay aún información sobre sus costos-, los días fuera del país suman 31 y el gasto por día 547 mil 825 pesos.

Calderón ya rebasó a su antecesor Vicente Fox en cuanto a la frecuencia de sus viajes internacionales y, aunque suma menos días fuera del país, su gasto es mayor en términos reales.

Entre enero de 2001 y mayo de 2004, Vicente Fox se ausentó en 32 ocasiones, permaneció 185 días fuera del país y erogó más de 53 millones de pesos.

Entre enero de 2007 y mayo de 2010, Felipe Calderón llevó a cabo 49 viajes, se ausentó 174 días y gastó recursos superiores a los 74 millones de pesos, es decir 39 por ciento más que su antecesor.

¿Mejor política exterior?

Aunque al arranque de su gobierno Felipe Calderón se propuso públicamente mejorar la política exterior de México y hacer giras más provechosas para el país, la Secretaría de Relaciones Exteriores sigue enfrentando críticas por estos periplos internacionales.

En su comparecencia ante la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados, el 13 de octubre pasado, la canciller Patricia Espinosa fue cuestionada en tres ocasiones sobre los resultados tangibles de las giras presidenciales.

"¿Cómo se traduce la participación de nuestro país en el Grupo de los 20 para ampliar las oportunidades de desarrollo en México?", preguntó el diputado del PAN Arturo García Portillo.

"Nos informan que el licenciado Calderón Hinojosa viajó en cuatro ocasiones a Estados Unidos; sin embargo, los resultados no son tangibles", criticó el diputado del PRI Francisco Herrera Jiménez.

"El ejercicio de la política exterior no se resume a realizar innumerables viajes y a organizar conferencias bajo la lógica de promover la imagen de México y participar activamente en la reconfiguración del sistema internacional. Sin duda se trata de objetivos válidos, el problema es cuando se cae en la frivolidad de pensar que esas actividades, en su mayoría de carácter protocolario y logístico, por sí solas traen beneficios para el país", reprochó el diputado de Convergencia Jaime Álvarez Cisneros.

En respuesta, la canciller aseguró que la participación en foros multilaterales y la interlocución con representantes de otros países "proyecta a México como una democracia plural, como un país de instituciones, fuerte, abierto al mundo y dispuesto a asumir sus responsabilidades en el ámbito global".

Diplomáticos y legisladores ponen en duda la afirmación de la canciller.

Es pura simulación: Muñoz Ledo

Para el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados, Porfirio Muñoz Ledo, las giras presidenciales son una maniobra para disimular que México carece de una política exterior.

"Son 49 giras al extranjero en 42 meses de gobierno, más de una por mes, al rato van a ser dos por mes, esto es excesivo en cualquier sistema político... No se justifican porque México carece de política exterior, ¿con quién estamos aliados? Son para disimular nuestra política de patio trasero, ése es el fondo del problema, simplemente son maniobras de disimulo y de escape", sostiene.

El ex embajador de México ante la Unión Europea indica que los constantes viajes de Calderón son también una muestra del mal funcionamiento de su gobierno y de las deficiencias de su gabinete.

"Revela que no puede ser reemplazado por otros funcionarios porque tiene un gabinete staff, un gabinete de empleados, no un gabinete de políticos; no tiene a quién mandar", señala.

Y agrega: "los jefes de Estado, salvo en sistemas semipresidenciales, viajan para asuntos simbólicos y los jefes de gobierno para asuntos operativos y hay cancilleres de origen político... Los países en los que el jefe de Estado viaja mucho es porque tienen mentalidad escapista, porque se aburren o porque se les hace bolas el engrudo".

Recuerda que en Estados Unidos son tres los funcionarios que, prácticamente al mismo nivel del Presidente, conducen la política exterior: Barack Obama; el vicepresidente, Joseph Biden, y la secretaria de Estado, Hillary Clinton.

El diputado critica que a pesar de sus giras, el mandatario mexicano carece de "relieve internacional". Ejemplo de ello, dice, es que durante su estancia en Madrid, España, para participar en la Cumbre Unión Europea-América Latina, en mayo pasado, la prensa de ese país le preguntó si le molestaba el liderazgo del presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva.

Muñoz Ledo asegura que la estancia de Calderón en el extranjero tampoco ha contribuido a proyectar la imagen de México. "En el viaje que hizo a Davos dijo una serie de incoherencias, el triunfalismo clásico de este gobierno de que estamos ganando la guerra contra el narcotráfico y de que México se recuperó de la recesión, simplemente una colección de mentiras que no cree la gente de otros países, entonces no contribuye a lo que ellos llaman la imagen de México", señala.

No hay objetivos claros: Berruga

En opinión del ex representante de México ante la Organización de las Naciones Unidas, Enrique Berruga, a pesar de que Calderón está presente en los foros más importantes y se reúne con los principales actores económicos, sociales y políticos del mundo, México no mejora su posición con respecto a América Latina, su relación con Estados Unidos sigue siendo un misterio y, en aras de evitar conflictos con otros países, desaprovecha el potencial de los espacios multilaterales.

El diplomático reconoce que con América Latina existe una mejor relación; sin embargo, la posición del país no ha mejorado.

"Yo creo que ha habido un cambio de relación en cuanto a que no se han dado los roces que se llegaron a dar, sobre todo con Cuba y con Venezuela, pero de eso a que se haya registrado un mayor posicionamiento de México en la zona, o que México se este beneficiando hoy más de sus vínculos con América Latina no lo veo... Tenemos una situación como de un limbo en la que ya tenemos cierto entendimiento, 'tú no te metas en ciertas cosas y yo tampoco', pero no veo que se haya traducido en una cuestión mucho más sustantiva", asevera.

La misma situación, dice, existe con Estados Unidos. "No acabo de dilucidar cuál es la política hacia ese país y qué esperamos de él; en materia migratoria, por ejemplo, prácticamente hay un silencio para México, pero yo no veo qué estamos haciendo para modernizar la frontera, o reclamos muy claros en cuanto a qué sucede con toda esa droga que pasa por México y que va para allá, hay cosas que se tendrían que plantear con ellos muy específicas y otras tratar de sí tener un plan maestro, con visión más amplia de dos países que son vecinos y esa parte definitivamente no la he escuchado", asegura.

Respecto a la participación en foros multilaterales, el diplomático advierte que en el afán de evitar conflictos, el gobierno mexicano ha omitido realizar pronunciamientos sobre temas de interés mundial, lo cual limita los beneficios que estos espacios pueden tener para el país.

"La tendencia de este gobierno ha sido evitar al máximo posible cualquier conflicto, llámese Honduras, llámese Cuba, llámese Venezuela, llámese Irán y su proyecto nuclear, evitando incluso pronunciarse, 'mejor no digamos nada para que no se vayan a violentar del otro lado'... Entonces se va dejando de tomar posiciones porque es más o menos fácil evitar conflictos, pero la política internacional de lo que se trata es de tomar posiciones para ir orientando al mundo en la dirección de los valores y los intereses que cada país pareciera empujar", sostiene.

Falla la comunicación: Leal

Para el senador del PAN César Leal, la aseveración de que la política exterior mexicana carece de rumbo es gratuita; aunque reconoce que el gobierno de Calderón no ha sido eficaz en comunicar los logros obtenidos de su política.

El legislador señala que quienes concluyen que no hay rumbo en la diplomacia mexicana se basan en la idea equivocada de que la política exterior arroja resultados tangibles en el corto plazo.

"Se esperan repercusiones inmediatas, incidencia infraestructural y resultados políticos inmediatos y no se producen así, las reuniones crean un clima que incluso a veces no reportan nada, sobre todo en temas comerciales", sostiene.

"Yo diría que sí, la política exterior no tiene rumbo, pero la política internacional moderna no es de rumbo, es de anillos concéntricos que se van multiplicando. La comunidad internacional es multipolar, ahora de pronto resulta interesante hacer relaciones con la India", agrega.

Leal rechaza que México haya perdido su liderazgo y su papel decisivo. "La impresión general que saco de mis viajes es que México sigue siendo visto en el mundo como un líder de primera línea. Creo que el liderazgo no lo hemos perdido, sí hemos perdido el mando, pero porque en la relación internacional nadie manda", asegura.

El ex embajador de México en Grecia afirma que la percepción de que la política exterior no tiene resultados se debe, en gran medida, a que este gobierno no ha sido capaz de comunicar los objetivos y logros de sus acciones.

Informes incompletos

En efecto, los informes de la Secretaría de Relaciones Exteriores y de la Presidencia de la República proporcionan información sobre las fechas, los países de destino, los personas con los que el jefe del Ejecutivo sostiene reuniones y las impresiones que comparte con sus interlocutores; no obstante, omiten datos sobre los objetivos del viaje y de cada reunión, los acuerdos obtenidos y la manera en la que estos contribuyen a los intereses del país.

Sobre la visita a Estados Unidos, uno de los países más frecuentados por Calderón, el Tercer Informe de Labores de la Cancillería indica: "del 11 al 13 de enero de 2009 realizó una Visita de Trabajo a Estados Unidos, se reunió con el Presidente Electo Barack Obama y con el Presidente en funciones de ese país, George W. Bush".

Respecto a la asistencia de Calderón a la XVI Reunión de Líderes del Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico (Apec), del 13 al 14 de noviembre de 2009 en Singapur, el Cuarto Informe de la SRE señala: "el Presidente se reunió con el primer ministro de Japón, Yukio Hatoyama. Acordaron rechazar el proteccionismo comercial y coincidieron en impulsar las negociaciones de la Ronda de Doha. Dialogaron sobre el Acuerdo de Asociación Económica que ha fortalecido la relación comercial y de inversión. El Presidente manifestó su interés de que los productos agrícolas mexicanos tengan mayor participación en el mercado japonés".

Ése fue el viaje más caro hasta el momento: en dos días se erogaron 1.7 millones de pesos.

Son omisos: Moreno

La Cancillería y la Presidencia de la República también omiten entregar información detallada al Senado, a pesar de que es la instancia encargada de dar seguimiento a la política exterior, según señala la senadora priista María de los Ángeles Moreno.

La legisladora sostiene que si bien el Presidente envía información a los senadores antes y después de cada viaje, ésta es poco satisfactoria. Más aún, recuerda que en la última gira a Estados Unidos, en mayo pasado, se omitió enviar el informe correspondiente.

La senadora asegura que las comparecencias de la canciller tampoco han servido para obtener información detallada sobre la estancia del jefe del Ejecutivo en el extranjero.

"Obviamente el Presidente tiene que manifestar los propósitos y a qué espera llegar con el viaje realizado... Efectivamente parece más un formalismo que un deseo de informar y compartir la política exterior que finalmente corresponde analizar al Senado, pero igualmente pasa con el informe presidencial e incluso cuando van los secretarios a responder preguntas específicas, contestan lo que quieren y dejan en el aire lo que quieren, dados los formatos de preguntas y repuestas", afirma.

Viajes expeditos

A pesar de esta opacidad, los requisitos para autorizar las giras presidenciales al extranjero se han ido reduciendo. En agosto de 2008 se publicó en el Diario Oficial de la Federación una reforma al artículo 88 constitucional, la cual faculta al titular del Ejecutivo a ausentarse del país sin autorización de la Cámara de Senadores cuando sus viajes duren menos de siete días.

Porfirio Muñoz Ledo señala que ya tiene lista una propuesta de reforma para regresarle al Congreso la facultad de autorizar cada uno de los viajes al extranjero del mandatario, pues en su opinión, los legisladores también son responsables de que éstos sean excesivos y sin resultados.

Por lo pronto, el próximo 30 de octubre el presidente Felipe Calderón viajará a Corea del Sur para asistir a la V Cumbre del G-20. Hasta el momento no se han dado a conocer los objetivos concretos de su participación, los resultados que se esperan de ella y la manera en la que ésta contribuirá a las metas establecidas en el Plan Nacional de Desarrollo.

En noviembre se llevarán a cabo dos cumbres más en las que previsiblemente esté presente Calderón: la de Apec, en Japón, y la XX Cumbre Iberoamericana, en Argentina.

El Presidente seguirá acumulando millas.

México como sede

A la par de los viajes presidenciales, México ha sido sede de cumbres y foros internacionales.

2007

Abril 9 al 10. Campeche, Campeche.

· Cumbre Extraordinaria de Mandatarios para el Fortalecimiento del Plan Puebla Panamá.

2008

Abril 15 al 16. Cancún, Quintana Roo.

· Foro Económico Mundial.

Junio 28. Villahermosa, Tabasco.

· X Cumbre del Mecanismo de Diálogo y Concertación de Tuxtla.

Agosto 3 al 8. Ciudad de México.

· XVII Conferencia Internacional de Sida.

2009

Agosto 9 al 10. Guadalajara, Jalisco.

· Cumbre de Líderes de América del Norte.

2010

Febrero 21 al 23. Riviera Maya.

· Cumbre de la Unidad de América Latina y el Caribe.

21 de febrero de 2010. Cancún, Quintana Roo.

· Cumbre México-Comunidad del Caribe.

Mayo 20 al 21. Tapachula, Chiapas.

· XV Conferencia Regional sobre Migración.

Junio 11 al 13. Campeche, Campeche.

· Reunión Interdisciplinaria México-Estados Unidos.

Agosto 23 al 27. León, Guanajuato.

· Conferencia Mundial de la Juventud.

Próximos eventos:

Nov. 29 a dic. 10. Cancún, Quintana Roo.

· XVI Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.

2012

· Cumbre del G20.

Calderón, anfitrión

Visitas de jefes de Estado a México en lo que va del sexenio.

Nombre

Cargo

País

visitas

Elías Antonio Saca

Presidente

El Salvador

6

Óscar Arias Sánchez

Presidente

Costa Rica

6

José Manuel Zelaya

Presidente

Honduras

6

Álvaro Uribe

Presidente

Colombia

6

Álvaro Colom

Presidente

Guatemala

5

Óscar Berger Perdomo

Presidente

Guatemala

3

Martín Torrijos

Presidente

Panamá

3

Daniel Ortega

Presidente

Nicaragua

3

Fernando Lugo Méndez

Presidente

Paraguay

2

Michelle Bachelet

Presidente

Chile

2

Said Musa

Primer Ministro

Belice

2

Luiz Inácio Lula da Silva

Presidente

Brasil

2

Leonel Fernández Reyna

Presidente

República Dominicana

2

Rafael Correa

Presidente

Ecuador

2

Patrick Manning

Primer Ministro

Trinidad y Tobago

3

Ricardo Martinelli

Presidente

Panamá

2

Dean Oliver Barrow

Primer Ministro

Belice

2

Bruce Golding

Primer Ministro

Jamaica

2

Stephen Harper

Primer Ministro

Canadá

2

Barack Obama

Presidente

Estados Unidos

1

Georgi Parvanov

Presidente

República de Bulgaria

1

Nicolas Sarkozy

Presidente

Francia

1

Susilo Bambang

Presidente

Indonesia

1

Enrique Bolaños Geyer

Presidente

Nicaragua

1

Edward N. Lowassa

Primer Ministro

Tanzania

1

George W. Bush

Presidente

Estados Unidos

1

José Luis Rodríguez Zapatero

Presidente

España

1

Néstor Kirchner

Presidente

Argentina

1

Ölaf Ragnar Grímsson

Presidente

República de Islandia

1

Ralp Gonsalvez

Primer Ministro

San Vicente y las Granadinas

1

Pratibha Devisingh

Presidenta

India

1

Angela Merkel

Canciller Federal

Alemania

1

Recep Tayyip Erdogan

Primer Ministro

Turquía

1

David Thompson

Primer Ministro

Barbados

1

Winston Baldwin Spencer

Primer Ministro

Antigua y Barbuda

1

Roosevelt Skerrit

Primer Ministro

Dominica

1

Cristina Fernández

Presidenta

Argentina

1

Hubert Alexander Ingraham

Primer Ministro

Bahamas

1

Evo Morales

Presidente

Bolivia

1

Sebastián Piñera

Presidente

Chile

1

Raúl Castro

Presidente

Cuba

1

Mauricio Funes

Presidente

El Salvador

1

Bharrat Jagdeo

Presidente

Guyana

1

René Preval

Presidente

Haití

1

Jens Stoltenberg

Primer Ministro

Noruega

1

Lee Myung-bak,

Presidente

Corea

1

Jeque Nasser Al-Mohammed

Primer Ministro

Kuwait

1

Juan Manuel Santos

Presidente

Colombia

1




Enfoque consultó a la Secretaría de Relaciones Exteriores sobre los resultados y beneficios de las giras presidenciales, pero hasta el cierre de esta edición la oficina de comunicación social no había enviado la información que ofreció aportar para este reportaje.




Más viajero que Fox

Reportaje Diplomacia o despilfarro

(24 octubre 2010).- El presidente Felipe Calderón ya rebasó a su antecesor, Vicente Fox, en cuanto a la frecuencia y costo de sus viajes internacionales, según un comparativo de los primeros tres años y medio de cada uno.

Vicente Fox

Fuera de México

2001

83 días

2002

41 días

2003

47 días

2004*

14 días

Erogación total por concepto de giras: 53,613,967

Total de días fuera: 185

Costo promedio por día en el extranjero

2001

$249,117

2002

$268,796

2003

$367,265

2004*

$332,508

Erogación total desglosada por conceptos de gasto

2001

2002

2003

2004*

Hospedaje y alimentación

6,074,832

3,985,076

4,673,756

1,444,736

Transporte terrestre

3,142,560

1,742,025

2,383,329

1,072,122

Diversos**

9,035,584

4,336,064

8,286,905

1,419,219

Transporte aéreo

2,423,778

957,473

1,917,470

719,038

Total

20,676,754

11,020,638

17,261,460

4,655,115

Número total de giras

2001

15

2002

7

2003

7

2004*

3

*Cifras al mes de mayo.

**Incluye renta de salones para usos oficiales, ofrendas florales, compra de papelería, gastos de fax, renta de saniports, renta de equipo de apoyo y adquisición de material para seguridad.

Nota: las cifras se presentan en términos reales.

Felipe Calderón

Fuera de México

2007

38 días

2008

48 días

2009

57 días

2010*

31 días

Erogación total por concepto de giras (hasta junio del 2010): 74,685,022

Total de días fuera: 174

Costo promedio por día en el extranjero

2007

$381,761

2008

$510,586

2009

$404,736

2010*

$547,825**

Erogación total desglosada por conceptos de gasto

2007

2008

2009

2010*

Hospedaje y alimentación

4,748,154

5,832,515

5,432,413

2,651,836

Transporte terrestre

1,853,352

3,345,327

2,884,137

1,864,561

Diversos***

405,911

695,046

568,376

453,426

Transporte aéreo

7,499,521

14,635,240

14,185,053

7,630,153

Total

14,506,938

24,508,129

23,069,979

12,599,976

Número total de giras

2007

8

2008

14

2009

17

2010*

10

*Cifras al mes de mayo.

**La cifra fue dividida entre 23 días; los ocho días restantes corresponden a cuatro giras realizadas entre el 10 de junio y el 7 de agosto cuyos costos no se encuentran disponibles.

***Incluye renta de salones para usos oficiales, ofrendas florales, compra de papelería, gastos de fax, renta de saniports, renta de equipo de apoyo y adquisición de material para seguridad.

Nota: las cifras se presentan en términos reales.

Los viajes de Calderón

2007

ENERO

Gira 1

10. Nicaragua. Transmisión del mando presidencial.

Gira 2

16. El Salvador. XV Aniversario de la Firma de los Acuerdos de Paz.

Gira 3

24. Bermudas. Visita de trabajo.

25. Alemania. Gira de trabajo.

25-27. Suiza. Foro Económico Mundial de Davos.

28-29. Gran Bretaña e Irlanda. Visita de trabajo.

29 -30. España. Visita de trabajo.

MARZO

Gira 4

2-3. Guyana. XIX Cumbre del Grupo de Río.

JUNIO

Gira 5

2-5. Italia. Visita de trabajo a la República Italiana y la Santa Sede.

5-6. Bélgica. Visita de trabajo.

6. Francia. Visita de trabajo.

6-7. Alemania. Visita de trabajo y participación en la Cumbre del G8/G5.

8-9. Dinamarca. Visita de trabajo.

Gira 6

29-30. Belice. IX Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno del Mecanismo de Diálogo y Concertación de Tuxtla.

AGOSTO

Gira 7

18-23. Canadá. Cumbre de Líderes de América del Norte y visita oficial.

SEPTIEMBRE

Gira 8

5-7. Nueva Zelanda. Visita oficial.

7-9. Australia. Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico.

10-11. India. Visita de Estado.

2008

ENERO

Gira 9

13-14. Guatemala. Ceremonia de Transmisión del mando presidencial.

FEBRERO

Gira 10

10-14. Estados Unidos. Gira de trabajo.

MARZO

Gira 11

4-5. El Salvador. Gira por Centroamérica.

5-6. Panamá. Visita oficial.

6-7. Rep. Dominicana. Cumbre de los Jefes de Estado y de Gobierno del Grupo de Río.

ABRIL

Gira 12

21-22. Estados Unidos. Cumbre de Líderes de América de Norte.

MAYO

Gira 13

15-17. Perú. V Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de América Latina y El Caribe-Unión Europea.

Gira 14

28. Honduras. Cumbre Cambio Climático y Medio Ambiente, Centroamérica y el Caribe.

JUNIO

Gira 15

10-15. España. Visita de Estado.

JULIO

Gira 16

6-9. Japón. Participación del Diálogo Ampliado del G8.

9-12. China. Gira de trabajo por Asia.

AGOSTO

Gira 17

1. Colombia. Cumbre Regional Ampliada sobre el Problema Mundial de las Drogas, Seguridad y Cooperación del Caribe.

SEPTIEMBRE

Gira 18

23-25. Estados Unidos. LXIII Asamblea General de la ONU.

OCTUBRE

Gira 19

29-31. El Salvador. XVIII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno.

NOVIEMBRE

Gira 20

14-15. Estados Unidos. Cumbre de Líderes del G-20.

Gira 21

20-22. Chile. Visita de Estado.

22-23. Perú. Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico.

23-25. Argentina. Visita de Estado.

DICIEMBRE

Gira 22

15-17. Brasil. XXXVI Reunión del Consejo del Mercosur y Cumbre de América Latina y Caribe sobre Integración y Desarrollo.

2009

ENERO

Gira 23

11-13. Estados Unidos. Visita de trabajo.

Gira 24

16. Panamá. Jornada Presidencial de Colombia, Guatemala, México y Panamá contra la Delincuencia Organizada.

ENERO-FEBRERO

Gira 25

Ene. 27-Feb. 1 Suiza. Foro Económico Mundial.

MARZO-ABRIL

Gira 26

Mar. 28-Abr. 3 Gran Bretaña e Irlanda del Norte. Cumbre del G-20 y visita de Estado.

ABRIL

Gira 27

17-19. Trinidad y Tobago. V Cumbre de las Américas.

MAYO-JUNIO

Gira 28

29-31. Colombia. IV Congreso Internacional sobre Víctimas del Terrorismo.

May. 31-Jun. 1 El Salvador. Visita de trabajo.

JUNIO

Gira 29

29. Nicaragua. XXXIV Reunión Ordinaria de Jefes de Estado y de Gobierno del Sistema de Integración Centroamericana y Reunión Extraordinaria de Jefes de Estado y de Gobierno del Grupo de Río.

Gira 30

Jun. 30-Jul. 1. Panamá. Transmisión del mando presidencial.

JULIO

Gira 31

7-10. Italia. Cumbre de Líderes del G8-G5.

Gira 32

28-30. Costa Rica. XI Cumbre del Mecanismo de Diálogo y Concertación de Tuxtla y Visita de Estado.

AGOSTO

Gira 33

12-13. Colombia.

13-15. Uruguay.

15-17. Brasil. Visitas de Estado

SEPTIEMBRE

Gira 34

23-25. Estados Unidos. Cumbre de Estado y de Gobierno del Consejo de Seguridad de la ONU.

OCTUBRE

Gira 35

26-27. Guatemala. Visita de Estado.

Gira 36

30- 31. EU. Visita de trabajo.

Gira 37

14-15. Singapur. XVII Cumbre de Líderes del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico.

NOVIEMBRE-DICIEMBRE

Gira 38

Nov. 29-Dic. 1. Rep. Portuguesa. XIX Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno.

DICIEMBRE

Gira 39

15-19. Dinamarca. Conferencia de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático.

2010

ENERO-FEBRERO

Gira 40

27-31. Suiza. Foro Económico Mundial.

Ene. 31-Feb. 2 Japón. Visita oficial.

ABRIL

Gira 41

12-13. Estados Unidos. Cumbre sobre Seguridad Nuclear.

MAYO

Gira 42

1-4. Alemania. Visita de Estado y participación en la Reunión Ministerial sobre Cambio Climático.

Gira 43

7-8. Costa Rica. Transmisión del mando presidencial.

Gira 44

16-18. España. Visita de trabajo, Cumbre México-Unión Europea y Cumbre América Latina y El Caribe-Unión Europea.

18-20. Estados Unidos. Visita de Estado.

Gira 45

26. Estados Unidos. Visita de trabajo.

26-28. Canadá. Visita oficial.

JUNIO

Gira 46

10-11. Sudáfrica. Inauguración del campeonato Mundial de Futbol Sudáfrica 2010.

Gira 47

26-27. Canadá. Cumbre de Líderes del G-20.

JULIO

Gira 48

23-25. Uganda. Cumbre de la Unión Africana y participación en la Conferencia de Jefes de Estado sobre Cambio Climático.

AGOSTO

Gira 49

7. Colombia. Transmisión del mando presidencial.

Violencia: imagen mundial de México

Reportaje Diplomacia o despilfarro. El gobierno busca relanzar la imagen del país. Ajena a ese propósito, la prensa extranjera retrata a México como uno de los sitios más violentos del mundo

Andro Aguilar Navarrete

(24 octubre 2010).- El 15 de junio pasado, el presidente Felipe Calderón anunció que su gobierno iniciaría una campaña ambiciosa para relanzar la imagen de México en el mundo. La semana previa al anuncio había sido una de las más violentas en el sexenio, con 271 ejecuciones registradas en diversos estados.

Durante la apertura de un hotel en San José del Cabo, Baja California Sur, Calderón aseguró que el gobierno federal estaba contratando a las mejores agencias del orbe para promocionar al país como destino turístico, cuya importancia era incluso mayor que la construcción de carreteras.

"Estamos promoviendo un proyecto integral de publicidad, sí, pero principalmente de relaciones públicas, en la que estamos contratando a las mejores agencias del mundo para promover integralmente la imagen de México. Sí, para explicar los problemas que tenemos, pero también cómo los enfrentamos...", dijo.

No era la primera vez que el Presidente manifestaba su preocupación por la imagen de México en el mundo. En enero ya había conminado a embajadores y cónsules a hacer la misma promoción en sus respectivas misiones diplomáticas. Y en febrero se quejó de que haya mexicanos que vivan de "hablar mal" del país en el exterior.

Pese a la queja del Presidente, las noticias sobre México que han dado la vuelta al mundo siguen siendo fundamentalmente sangrientas: ejecuciones masivas, violaciones a los derechos humanos, decapitaciones, narcobloqueos, enfrentamientos entre policías y criminales, y cuando se habla "bien" es por el decomiso de un cargamento de droga o la detención de un gran capo.

En los tres últimos meses -después del anuncio presidencial y la supuesta contratación de las "mejores agencias" de publicidad- la prensa internacional siguió mostrando a México como una nación inmersa en una guerra.

Cerca del festejo del Bicentenario, México fue nota mundial, no por sus 200 años de vida independiente, sino por la masacre de 72 migrantes centroamericanos en Tamaulipas, la muerte de otro periodista en Ciudad Juárez, las ejecuciones cotidianas, los narcobloqueos y las desapariciones de personas.

La mirada europea

El 11 de agosto el diario francés Le Monde habló en su editorial de un México con narcoestados, socavado por los barones de la droga que tienen un poder e influencia política duplicados a partir del cambio de partido en la Presidencia mexicana.

"Una guerra sin cuartel, en la que no pasa un día sin un sangriento ajuste de cuentas y que carece de perspectiva global", fue como calificó el principal rotativo francés la cruzada de Calderón.

"Lo que realmente sucede es que estamos poniendo orden ahí dónde no lo había. Si ven polvo, es porque estamos limpiando la casa", respondió el Presidente en un artículo publicado en ese mismo diario el 16 de agosto.

Otros medios europeos compartieron el diagnóstico de Le Monde.

"México desangrándose", es el título que el diario británico The Independent dio a un reportaje escrito a raíz del hallazgo de 72 migrantes asesinados en Tamaulipas el 25 de agosto.

Para el autor, Guy Adams, la barbarie del multihomicidio es alarmante, incluso para los estándares de la delincuencia en México.

"La corrupción sigue siendo un gran problema. La violencia sugiere que la guerra es más feroz, por una mayor tajada de un mercado cada vez más lucrativo. En resumen, México y Estados Unidos están perdiendo la guerra contra las drogas", argumentaba el periodista.

El 31 de agosto, ese medio informó sobre la captura de Édgar Valdez Villarreal, La Barbie, y la calificó como una victoria del gobierno federal en la guerra contra narcotraficantes que amenazan la imagen del país ante la inversión y el turismo.

"La mayor parte de los éxitos de Calderón, sin embargo, ha sido eclipsada por el derramamiento de sangre, incluyendo la tortura y matanza de cautivos por parte de bandas rivales", matizaba la publicación.

Al semanario inglés The Economist le sorprendió la propuesta de Calderón de debatir la legalización de las drogas. "Pensar lo impensable" fue el título de una de sus notas del 12 de agosto.

En medio del cansancio de la guerra contra las drogas, dice el texto, Calderón llama a un debate sobre la legalización.

Dos meses después, el 14 de octubre, The Economist tituló "Bajo el Volcán" un reportaje que radiografió la situación de la violencia en México.

Calderón, a decir del diario, se juega su mandato en el resultado de una guerra que ha evidenciado la debilidad de las instituciones de justicia en el país.

"México está mejor provisto que las policías de Estados Unidos, Gran Bretaña, Italia y Francia. Pero está mal organizado y hay corrupción", indica.

El texto menciona la diversificación de los actos delincuenciales de los cárteles y destaca el secuestro de Diego Fernández de Cevallos.

Otro diario británico, The Guardian, realizó una investigación sobre el creciente gasto en seguridad por la violencia en México, que prevé una baja económica por el aumento en el costo de hacer negocios, sobre todo en estados de la frontera con Estados Unidos.

El 13 de octubre, ese diario describió el éxito en taquilla obtenido por el el filme El Infierno, sátira que retrata la guerra del Estado mexicano contra el narcotráfico. La película ya dio la vuelta al mundo y competirá por un Goya. Tal fue su éxito, que Calderón salió al paso en una entrevista radiofónica, el 6 de septiembre, y pidió tener más cuidado con el nombre y la imagen de México.

El reportero de The Guardian Rory Carrol publicó un reportaje el 16 de septiembre a partir del descubrimiento de que reos del penal número 2 de Gómez Palacio, Durango, salían por las noches a cometer asesinatos con la venia de la directora del centro, que derivaría en el secuestro de camarógrafos y reporteros.

"Una masacre en México tiende a tener una vida de noticias cortas. Los autores se desvanecen y el hecho es eclipsado por la atrocidad que viene... es un Estado colonizado por el crimen organizado", escribió el corresponsal de The Guardian.

En España no ha sido distinto. El reportero Pablo Ordaz de El País -que calificó el Bicentenario mexicano como "el más triste de América"- publicó el 10 de octubre un reportaje titulado "La muerte sale gratis en Juárez" y una semana después otro que se encabezó: "Tres hermanas de sangre", en el que comparó la violencia que se vive en Ciudad Juárez, Chihuahua; Caracas, Venezuela, y Medellín, Colombia.

De acuerdo con Ordaz, "Juárez es el compendio fatal de todas las calamidades que azotan a un país sumido en una lucha de todos contra todos... y donde alguien que es asesinado se convierte automáticamente en sospechoso".

La opinión norteamericana

El diario norteamericano The New York Times -uno de los más influyentes en Estados Unidos y que es referencia mundial- ha destacado en sus contenidos la tensión entre Estados Unidos y México por la violencia, y particularmente entre gobernadores fronterizos. Además, ha publicado diversas radiografías de la violencia en el actual sexenio.

Sus coberturas sobre México han seguido de cerca el caso de los turistas asesinados por presuntos sicarios del lado mexicano en el fronterizo Lago Falcon y el reportero Kevin Brass aborda en un reportaje la caída de la demanda de hasta 50 por ciento en las casas de retiro para estadounidenses en México desde 2007, atribuida a la violencia.

El 16 de octubre, ese diario publicó los testimonios de los escritores mexicanos Federico Campbell, Pedro Ángel Palou, Élmer Mendoza y Ricardo Elizondo Elizondo, en lo que tituló: "En México, escenas de la vida en una guerra contra las drogas".

Por su parte, The Washington Post publicó apenas el 17 de octubre un texto de Corcoran Katherine sobre el festival de cine de Morelia en el que escribe: "México parece desde lejos como Bagdad: con coches bomba, decapitaciones y políticos corruptos".

Sin embargo, la periodista señala que de cerca algunos sitios siguen siendo "mágicos y pintorescos".

El 8 de septiembre la secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton, declaró que los cárteles mexicanos se comportan más como una "narcoinsurgencia".

Aunque un día después el presidente Barack Obama corrigió a su secretaria de Estado asegurando que no puede compararse a México con la Colombia de principios de los noventa, The Washington Post avaló las críticas de Clinton en un editorial publicado el 13 de septiembre.

"Está en lo cierto en el sentido de que las bandas de traficantes de drogas han tomado el control en partes... al igual que la mayoría de los grupos insurgentes, los ejércitos mexicanos de la droga también tienen una fuente externa de financiación y armas", indicó el rotativo.

El gobierno mexicano también negó que se pueda hablar de "narcoinsurgencia", pero semanas después de la declaración de Hillary Clinton, especialistas y legisladores estadounidenses (principalmente republicanos) han insistido en emplear el término.

Los anuncios gubernamentales contrastan permanentemente con lo que se dice de México en el extranjero. Otro ejemplo:

El 7 de octubre Calderón presumió en el Primer Encuentro Tijuana Innovadora 2010 la disminución de delitos en aquella ciudad. Once días después, la revista The New Yorker publicó un reportaje que evidencia la sistemática tortura realizada por autoridades policiacas en esa ciudad, titulado "En el nombre de la ley". Al día siguiente fue anunciado el decomiso más grande de mariguana en la historia de Baja California.

Repercusión económica

El 14 de octubre, Patricia Francis, directora ejecutiva del Centro Internacional de Comercio, organismo perteneciente al sistema de Naciones Unidas, señaló que México requiere mejorar su imagen para ser más eficiente.

Un día después, empresarios y secretarios de Turismo de varios estados señalaron que, por la imagen negativa que tiene el país, buscan deslindarse de la marca "México" para evitar la asociación que existe de ésta con la violencia.

No obstante, para Gloria Guevara Manzo, secretaria de Turismo, la campaña promocional de México en el extranjero ha sido exitosa (Reforma, 17 de octubre).

Los empresarios del ramo, sin embargo, siguen sin ver los efectos de la "ambiciosa campaña" y de las "mejores agencias" que se supone relanzarían la imagen del país en el mundo.

Bicentenario y violencia

En septiembre, México fue volteado a ver por los festejos de los 200 años de su independencia, anunciados oficialmente como "los más espectaculares de su historia"; pero los medios extranjeros asociaron la fiesta con la violencia.

The New York Times

"En vísperas de su Bicentenario, muchos mexicanos confiesan que no están de humor para una fiesta y coinciden en que el país está en un profundo temor".

El País

"El Bicentenario más triste de América: la extrema violencia del narcotráfico y la debilidad institucional que azotan a México empañan los festejos de los 200 años de la independencia".

The Guardian

"La fiesta del Bicentenario será festejada con pocas ilusiones en el contexto de la sangrienta guerra de Calderón contra los cárteles de drogas".

Clarín

"México celebra su Bicentenario acosado por el terror del narco. El país no está para muchas fiestas en medio de una ola de muertos provocados por el crimen organizado".

Los Angeles Times

"El cumpleaños número 200, México espera olvidar la violencia celebrando con una gran fiesta su orgullosa historia".

The Independent

"La celebración del 15 de septiembre será una noche para recordar y olvidarse. México se ilumina en verde, blanco y rojo para un aniversario de matrimonio y tratar de hacer caso omiso de su tristeza".

Así lo dijo

"Yo jamás he escuchado a un brasileño hablar mal de Brasil. Y sí he escuchado a muchos mexicanos hablar mal de México en el mundo".

Felipe Calderón, 8 de enero del 2010. Reunión con el cuerpo diplomático.

Hipotecando el futuro

Ensayo México bicentenario. Circula el libro 'México 2010. Hipotecando el futuro' (Taurus, 2010), que reúne ocho ensayos en los que se analiza el México del año del Bicentenario y se ofrece una prospectiva sobre el futuro en áreas como la economía, la política, la sociedad y la cultura. Se reproduce este fragmento del prólogo, con autorización de la editora de la obra. Para que la opinión pública estadunidense y sus colosales fuerzas políticas acepten serenamente reanudar el diálogo con nosotros, los mexicanos tenemos que recuperar nuestra estabilidad emocional y dejar de autodenigrarnos. Si esa pequeña minoría entendiera el valor de su propia supervivencia, podría dirigir mejor a la vasta opinión popular, como en otros tiempos lo hicieron mexicanos heroicos, aunque en el corto plazo muchos de ellos acabaron fusilados

Jorge Alberto Lozoya

(24 octubre 2010).- Acabo de terminar de leer en Kuala Lumpur el libro que usted empieza a hojear. Por razones que nunca tuve muy claras, la inteligente editora del volumen, Érika Ruiz Sandoval, me pidió este texto para presentar los interesantes ensayos aquí impresos, escritos por autores de la generación de mis alumnos, hoy por mérito propio connotados maestros. En todo caso, la tarea me resultó muy satisfactoria.

Hace más de 40 años vengo diciendo que el futuro del mundo se definirá en Asia. Por lo tanto, radicar temporalmente en el Sudeste Asiático sirviendo a la política exterior de México gracias a la generosidad del presidente Felipe Calderón es un enorme privilegio. El profeta que vive el tiempo suficiente para ver sus buenos presagios realizados es muy afortunado.

Muchos mexicanos no saben siquiera dónde está Malasia. A una popular periodista le tuve que bosquejar un mapita en una servilleta de coctel para mostrarle que estoy ubicado en uno de los centros del nuevo mundo. Esto no es una exageración, el Estrecho de Malaca lo transitan diariamente tres veces más buques que los que cruzan por el Canal de Panamá, transportando casi la mitad del comercio mundial. Su protección contra el crimen organizado (piratería, terrorismo, tráfico de drogas, personas y armas) se lleva a cabo de manera exacta y puntual por las fuerzas de tierra, aire y mar de Malasia, Singapur e Indonesia, con la cooperación científico-tecnológica del Reino Unido, Australia y, naturalmente, la Séptima Flota de la Armada de Estados Unidos.

En el momento de su independencia, negociada pacíficamente con Inglaterra en 1957, Malasia tenía un ingreso per cápita similar al de Haití; hoy, la capacidad adquisitiva de los malasios supera a la de los mexicanos. Con 23 millones de habitantes, Malasia recibe anualmente 21 millones de turistas extranjeros que disfrutan de sus selvas -el orangután es el animal nacional (orang utan, hombre de la selva en lengua bahasa malaya)-, playas y arrecifes de coral, amén de conocer el gran patrimonio cultural de Malaca y Penang. En Kuala Lumpur -y durante una misma jornada-, el visitante puede ascender los más de ochenta pisos de las espectaculares Torres Petronas (la corporación estatal Petronas es el equivalente malasio de Pemex) y adentrase en las cuevas de Batú, el más sagrado templo hindi de la península (donde un millar de monitos propietarios del recinto natural hacen favor a los humanos de permitirles el acceso), para después terminar la tarde escuchando el sereno brotar de la fuente entre los mármoles del magnífico Museo Islámico.

Ante el enorme éxito que este país ha conquistado, es de comprender que los malasios dedicaran mil quinientos millones de dólares a la celebración del cincuentenario de su independencia nacional. Una mitad del monto provino del gobierno federal, mientras la otra fue proporcionada por el sector privado. En marzo del año conmemorativo, 2007, el ministro de Turismo me dijo que ambas partes ya habían amortizado su inversión para entonces.

El lema internacional del festejo fue Come share with us!. Si usted les tomaba la palabra y compraba su boleto, por ejemplo, en Londres, salía de la agencia de viajes con el pasaje, la reservación de hotel y, además, los boletos para sus entretenimientos favoritos: deportes, conciertos, folclore... De las regatas de lujo en Borneo y la Fórmula Uno automovilística hasta conciertos de ópera o de rock pospunk en Kuala Lumpur, todo estaba en la computadora de la agencia para que usted incluso seleccionara su butaca en los eventos.

Los invitados de honor de las celebraciones fueron los soldados británicos sobrevivientes de entre los que servían en Malasia en el momento de la independencia y, por ende, combatieron la subversión comunista apoyada desde Vietnam y China. Ahora ya ancianos, orgullosamente uniformados de gala marcharon junto con los gallardos jóvenes de ambos sexos de las Fuerzas Armadas de Malasia, en el Gran Desfile Conmemorativo ante S. M. el Rey Mizan Zainal Abidin.

La más entrevistada por los medios fue una modesta sargento inglesa entonces muy jovencita que, a lo largo de 1956, sirvió de chofer al jefe de la delegación malasia y Padre de la Patria, Abdul Rahman, durante el largo transcurso de las negociaciones en Londres. Vino acompañada hasta de sus bisnietos y, desde luego, participó en el desfile. Habida cuenta de que toda lectura es por definición subjetiva, advierto entonces que la mía estuvo impregnada de la atmósfera de optimismo y triunfo que campea por todos los ámbitos de Asia Pacífico.

Tras reflexionar sobre los textos de este interesante libro, concluyo que el principal problema de México es su élite, que no cabalga ni desmonta. Según enseñan los maestros marciales de Oriente, el perdedor tiene la culpa de todo lo que le pasa; en el mejor de los casos, su martirio es el castigo por los errores tácticos cometidos. Tiene razón el siempre brillante Jesús Silva-Herzog Márquez cuando se desespera y dice que los términos del debate político mexicano siguen siendo del siglo XIX. Mi padre, al que mucho admiré, me decía, cuando yo estudiaba en El Colegio de México y lo tanteaba con mis inmaduros conocimientos de ciencia política importada, que "si en nuestro país se te agotan los instrumentos analíticos, debes ir a buscar dónde están el dinero mal habido y los ranchos peor adquiridos". Medio siglo después de aquel sabio consejo, habría que incluir en la indagación las mansiones en Miami o en alguna otra latitud del Primer Mundo y las acciones en las grandes empresas, amén de las cuentas bancarias en los paraísos fiscales.

El "déficit de estabilidad" de México al que se refiere Silva-Herzog Márquez lo construyó la élite dominante de mi generación, precariamente educada en las fuentes neoliberales del economicismo estadunidense, hoy en plena implosión. A fin de cuentas, en México la destrucción del poder político y económico fue orquestada desde el mismo poder con una frivolidad espeluznante. Mientras tanto, los ricos hacían lo que siempre han hecho bien: dinero. Insisto en que fueron los políticos los que demolieron el poder en el que se movían. Cuando se les cayó el teatrito, los ricos -como es sano y natural- trataron de llenar el vacío, de ser posible para su beneficio.

Después de eso vino el desastre de la falta de previsión económica, cabalmente descrito en el texto de Gerardo Esquivel y Fausto Hernández Trillo. Los desatinos en el fomento de la productividad nacional y la inexcusable desigualdad en la distribución del ingreso propiciaron que el crimen organizado cundiera, a manera de fuente alternativa para el ingreso familiar. Por lo tanto, la nueva generación no podrá aproximarse a la reconstrucción del poder del Estado mexicano como si se tratara de Suiza o Francia.

Adicionalmente -esto es muy importante, aunque pocos mexicanos de la élite se den cuenta de ello- el escenario político mundial es un desastre. Todas las corrientes del pensamiento decimonónico, desde el socialismo y la democracia cristiana hasta el capitalismo, han perdido sus espacios de legitimidad popular. De Washington a Estocolmo o Berlín no hay para dónde voltear en busca de ayuda ideológica. Es perfectamente sabido que la caída del Muro de Berlín y el desplome de Wall Street son dos caras de la misma moneda.

En el mismo escenario, los mexicanos tenemos que entender que muchos de nuestros problemas provienen de no haber sabido salir bien librados de la Tercera Guerra Mundial, cínicamente calificada por algunos de Fría, y durante la cual nuestro precavido alineamiento nos favoreció. En suma: no sabemos de qué lado quedamos. Ahora, en el sanguinario inicio de la Cuarta, tenemos que precisar nuestras metas y proceder en consecuencia. Para como están las cosas en el mundo globalizado, no parece haber opción viable de neutralidad.

El ensayo de Silvia E. Giorguli Saucedo elegantemente señala su preocupación por el hecho de que por lo menos once millones de mexicanos se pusieron en marcha, orientando su brújula hacia el norte. Así lo había previsto mi llorado amigo Carlos Monsiváis, cuando ya en los años ochenta advertía que la nueva generación de estadunidenses estaba naciendo en México, y no se refería nada más a los pobres, pues los ricos están también emigrando hacia allá, aunque a eso eufemísticamente se le llame "fuga de cerebros".

Los datos son durísimos y lo van a seguir siendo si no afrontamos la realidad. El sueño dorado de mi generación fue que la mayoría de los mexicanos iba a poder tomar su coche o un avión e irse de vacaciones con toda la familia a Disneylandia o Vancouver, haciendo buen uso de tarjetas de crédito válidas en toda Norteamérica y que, además, sería recibida con un efusivo Welcome, amigos! Que no haya sucedido así es culpa de nuestra élite, no de los que se juegan el pellejo en el cruce ilegal.

Para que la opinión pública estadunidense y sus colosales fuerzas políticas acepten serenamente reanudar el diálogo con nosotros, los mexicanos tenemos que recuperar nuestra estabilidad emocional y dejar de autodenigrarnos. El camino hacia el fracaso ante el sentir popular de Estados Unidos empieza con el autoflagelo. Es una ruta sombría y congestionada: de ninguna manera debemos hacer marchar por ese horrible sendero a la nueva generación de mexicanos.

Es urgente evitar que la opinión pública de nuestro vecino del norte nos tipifique como un enemigo a derrotar. Los asiáticos que pasan tiempo en Estados Unidos o viajan frecuentemente a ese país comentan el temor y la hostilidad con la que muchos estadunidenses se expresan de México y de los mexicanos. Autores importantes como George Friedman, incluso predicen un choque frontal entre las dos naciones antes de que termine el siglo XXI. Ningún patrioterismo populista debe impedirnos trabajar sistemáticamente contra esta peligrosa tendencia a fin de revertirla lo más pronto posible.

Érika Ruiz Sandoval tiene toda la razón cuando afirma que el poderío de Estados Unidos está muy lejos de desaparecer, con todo y la supuesta multipolaridad emergente. Esto es absolutamente cierto y en el caso de México -donde deberíamos abocarnos al diseño de estrategias de supervivencia como la autora correctamente argumenta- el que le apueste al debilitamiento de Washington es un iluso irresponsable.

Recuperar el dominio de la ley es una forma eficaz de alimentar la dignidad nacional, como bien señala el erudito texto de Pedro Salazar Ugarte. México es una nación de grandes juristas, los tenemos que respetar y dejar trabajar para que nuestra conciencia colectiva recobre la firmeza que le concedería el estricto cumplimiento de la ley.

Es de esperar que los profesionales del Derecho sean lo suficientemente pragmáticos para cambiar las leyes cuando así convenga, sin argumentar no poder hacerlo porque están escritas en bronce. Es urgente eliminar aquello de que somos culpables hasta que demostremos lo contrario, así como acelerar la impartición de justicia, frecuentemente extraviada en un marasmo de ineficiencia y corrupción. Desde luego que en este reclamo universal no estamos solos. Las ciudadanías de Turquía, Brasil, Egipto o India, entre muchas otras, nos acompañan.

Me emocionó que Salazar Ugarte invoque a María Zambrano cuando esta formidable mujer afirmaba que las generaciones del presente tienen la obligación de imaginar e impulsar el futuro o, de lo contrario, la parálisis terminará por hundir a todos. La osificación del discurso político nacional tiene que ver con su falta de espontaneidad y carencia de vínculos orgánicos con la vida cotidiana de los habitantes. El gran pensador francés Michel Maffesoli me dijo alguna vez que los latinoamericanos tendemos a congelar nuestra evolución política, porque de jóvenes leemos fragmentos de textos europeos, los recortamos y luego los metemos en un cajón por años; allí los pedazos se mezclan y producen un revoltijo "surrealista" cuando de vez en vez intentamos consultarlos.

La evolución político-social de Europa tiene mucho que ver con las dolorosas experiencias de la Segunda Guerra Mundial y el espantoso fracaso del comunismo. Los costos sociales y el sufrimiento provocados por estas catástrofes fueron inmensos, pero así de grande ha sido el aprendizaje. Después de vivir en Moscú, me percaté de que la lectura latinoamericana del marxismo-leninismo frecuentemente proviene de libros de texto mal traducidos. Mucho más adelante, en la España de la transición democrática, aprendí que la gente quiere hechos concretos, no palabras rimbombantes como "idiosincrasia", "soberanía" y "patriotismo", que le huelen a rancio. Un gran dirigente de ese período me comentó entonces que una de las estrategias esenciales del nuevo régimen democrático consistía en que "para que los nuevos españolitos de a pie trabajen y voten con la cabeza, hay que dejarlos que, de la cintura para abajo, hagan lo que les venga en gana". Así, de golpe y porrazo, aquella España de la que se acostumbraba decir nos viene todo lo baturro y cerril, ahora nos adelanta años luz en conciencia y libertad social.

Al inicio de la década de los noventa, traté de convencer a nuestros preclaros líderes de que, en bien de la convivencia civilizada, dejaran en paz a los bares gay y autorizaran la apertura de sex shops. El coro de los tiesos voceros de diversas corrientes políticas me sugirió que dejara de insistir, dado que la "idiosincrasia mexicana era contraria a esas perversiones". Durante el mismo siglo pasado, en los álgidos debates que fueron preludio a la creación de la Academia Mexicana de Derechos Humanos, amigos idealistas defendían en bloque las "tradiciones" de nuestras comunidades indígenas, sin darse cuenta de que prácticas malsanas mantenían a las mujeres siempre preñadas y junto al metate, al tiempo que consideraban natural y justo matar a pedradas a los homosexuales.

Nuestra inhabilidad para organizar los intereses en transformación constante de la sociedad civil deriva de esta momificación de prejuicios abstractos, que habría que ver si funcionaron antes, pero ahora impiden la concentración de la energía social en temas puntuales de la vida real. En todo caso, ni en México ni en ninguna otra parte el hombre y la mujer del siglo XXI entregarán su lealtad incondicional a partido alguno. Eso lo saben los europeos, los estadunidenses, los australianos y los canadienses; los japoneses lo están aprendiendo rápidamente.

Las nuevas organizaciones políticas, flexibles y frágiles, tendrán que servir a personalidades concretas que el público identifique y reconozca durante lapsos relativamente cortos. No se trata de que los aspirantes al poder se aficionen al bandazo de partido en partido, sino de que los partidos sirvan a la sociedad a partir de la representatividad individual encarnada, durante una coyuntura específica, en algún personaje dispuesto a ejercer el poder haciendo buen uso de la administración pública y con apego a la legislación vigente. Hasta en China está a punto de desaparecer el militante con carnet que vota y va a las manifestaciones porque así se lo ordena el comité ejecutivo del Partido, con P mayúscula.

La creciente participación de las mujeres en las actividades públicas fortalecerá esta tendencia pragmática y le comunicará nuevos contenidos de género, intuitivos y emocionales. Se acabaron los capos muy machos y a perpetuidad; hay que estar listos para entender la feminización de la acción política. El varón que no perciba que esto está pasando es porque, atemorizado, no lo quiere ver.

Paralelamente es fundamental dejar de denigrar a los aspirantes políticos por tener personalidad atractiva y arrastre mediático. En todo el mundo se reproduce el fenómeno. En vez de enfurecerse porque los medios hacen política, y habida cuenta de que seguirán haciéndola, los grupos de interés tendrán que aprender a acercarse tanto a los medios como a los candidatos para informarlos, debatir y tratar de influir en su quehacer con metas exactas y compromisos de corto plazo. No está mal hacer política de corto plazo si se hace sistemáticamente y con método. El movimiento feminista de Estados Unidos inició este modo de militancia. Después de que sus milicianos fueran eliminados uno a uno por muerte prematura, las organizaciones afroamericanas siguieron el mismo camino, que también ha generado grandes éxitos al movimiento gay a partir del llamado de Michel Foucault a "desarrollar vuestra rareza legítima".

Mis rotundos fracasos en la administración cultural me hacen temer argumentar con el ingenio de Nicolás Alvarado, quien nos brinda aquí un atractivo texto. Puedo sin embargo decirle que, cuando propicié la realización de la primera película mexicana en lengua náhuatl, El Santo Luzbel de Miguel Sabido, el único apoyo efectivo que encontramos fue en Televisa y en don Emilio Azcárraga Milmo. Mientras tanto, por trasladar a los medios audiovisuales un idioma vivo que cotidianamente hablan siete millones de mexicanos, un alto funcionario público me acusó de atentar contra la unidad nacional; otro me culpó de favorecer la revuelta del subcomandante Marcos. Algún sindicato de la industria cinematográfica me hizo pagar sobresueldos porque, según la opinión de sus miembros, la cinta era en idioma extranjero. Me sigue entristeciendo que casi ningún talento indígena mexicano haya encontrado abiertos los caminos del apoyo sistemático a su creatividad artística.

Por otra parte hay que decir que, salvo en Estados Unidos, China e India, el cine está a medio morir. Es interesante que la industria cinematográfica de potencias financieras y tecnológicas como Alemania y Japón haya sucumbido. Hace apenas unas semanas, en Roma, durante una espléndida exposición de fotografía de los años sesenta, yo, y no así los jóvenes italianos que iban conmigo, identifiqué las imágenes de Silvana Pampanini y Roberto Rossellini. Cuando sorprendidísimos los europeos quisieron saber cómo un pobre mexicano se interesaba en las estrellas de un cine muerto y enterrado, no me atreví a introducirlos por los vericuetos del laberinto de la soledad.

Las tajantes afirmaciones de Hans Magnus Enzensberg, citadas por Alvarado, sobre el desinterés de las clases dominantes occidentales por la cultura y el arte son exactas. El analfabetismo funcional de las élites sociales de los países más ricos y poderosos del mundo ha sido cuidadosamente diseñado por los industriales del entretenimiento. Puedo afirmar que los valientes que por aquellas latitudes tratan de revivir las artes audiovisuales encuentran obstáculos que se antojan insalvables. Tal fue el caso de mi admirado amigo Daniel Toscan du Plantier quien, al frente del cine francés, logró al menos su supervivencia de mercado. En el horror de Hollywood, los esfuerzos creativos de Robert Redford son heroicos e incluso temerarios. (...)

(...) Con la desaparición de los regímenes socialistas pereció el Estado mecenas. Habida cuenta de que nadie disparó un solo tiro ni adentro ni afuera de Rusia para defender a la Unión Soviética, procede aceptar que ese período de la historia europea ha terminado. No creo que mucha gente vaya a celebrar el centenario de la Revolución bolchevique. Insisto en señalar a Europa porque todos sabemos que, en Estados Unidos, el gobierno nunca se ha dedicado a pagar películas, orquestas, compañías de ballet o museos; en su filosofía política, esa tarea corresponde a la iniciativa privada. Los mexicanos tratamos de imitarlos en los años noventa del siglo pasado, pero, después de que el tren de la economía se descarriló, es lógico que no se valga seguir pidiéndoles a los ricos para el arte y la cultura sin tener algo que ofrecerles a cambio.

Ahora corresponde a la nueva generación de artistas, intelectuales, políticos y empresarios decidir si el Estado mexicano del siglo XXI tendrá la viabilidad suficiente para cumplir la ardua misión de conducir y financiar las actividades culturales. Si deciden que así sea, más vale que garanticen el flujo regular de los amplios recursos presupuestarios que se necesitan para hacer bien la tarea; de lo contrario, abrirán un frente más al desencanto y la frustración de los creadores y sus públicos.

A lo largo de toda mi vida he oído aquello de que el pueblo mexicano es enigmático e incomprensible. De ahí que el empleo de la encuesta para explorar el sistema de valores de mis conciudadanos, relatado en el ensayo de Alejandro Moreno, me haya parecido sumamente interesante. El mapa de México en la cultura del mundo que lo ilustra me parece tomado de algún espacio del lunar Mar de la Fertilidad. Cuando en el mismo veo a Malasia ubicada junto a Etiopía y Zambia, me quedo atónito.

Entiendo que es importante preguntarle a toda la gente lo que quiere. No en balde han transcurrido casi cien años de publicidad conductista. Recuerdo aquella primera lección tecnocrática: pídeme lo que te doy y te daré lo que me pides. Me encantaría ver un ejercicio de este género estadístico realizado exclusivamente con la élite mexicana. Creo que si esa pequeña minoría entendiera el valor de su propia supervivencia, podría dirigir mejor a la vasta opinión popular, como en otros tiempos lo hicieron mexicanos heroicos, aunque en el corto plazo muchos de ellos acabaron fusilados.

Las nuevas ideas y valores que habrán de venir de Asia todavía no aparecen muy claramente en el escenario mundial. Lo evidente, como afirma el innovador analista singapurense Kishore Mahbubani, es que a los asiáticos no les gusta pensar como los occidentales dicen hacerlo. Los mexicanos deberíamos poner atención a este importante diagnóstico, especialmente si seguimos creyendo que somos un pueblo mestizo que habita un cruce de caminos universales. La Raza de Bronce tendría todos los elementos para entender lo que sienten los asiáticos. No en balde, cuando fue secretario de Educación Pública, José Vasconcelos suplicó a sus maestros de escuela que se familiarizaran con las enseñanzas del Buda. Me temo que no le hicieron caso.

Acabo de tener una experiencia memorable. Resulta que una corporación mexicana diseñó y está construyendo los vagones de los nuevos trenes de alta velocidad de Kuala Lumpur. La empresa malasia, contraparte de la nuestra, me invitó a presenciar el arribo simbólico de los vagones modelo, que llegaron acompañados de ingenieros y técnicos provenientes del estado de Hidalgo. Después de la ceremonia, nos fuimos todos al puerto a comer unos deliciosos mariscos. Allí, nuestro anfitrión, el gerente general, un ingenierote indiomalasio, contó que, la noche anterior, caminaba en la quietud de los enormes talleres de la fábrica cuando sintió que en los vagones recién llegados venía un espíritu. De inmediato fue a comprar una botella de tequila para después, respetuosamente, derramar unas gotas del aguardiente en los cuatro rincones de cada carro diciendo: "Los mexicanos vivos y muertos son bienvenidos a Malasia". Yo le di un fuerte abrazo, mientras los comensales de ambas nacionalidades aplaudían alegremente.

A cualquier mexicano que en Europa o Estados Unidos le han buscado las plumas no puede ni debe compartir el desdén con el que algunos occidentales se expresan de los pueblos asiáticos. Es absolutamente inexcusable que alguien de Oaxaca o de Durango considere a un chino misterioso. Misterioso es el aullido del coyote en el desierto o el silbar del viento en la sierra, no el ajetreado habitante de Beijing o Shanghai.

Hace muchos años, al empezar a decir estas cosas, el exótico era yo, como cuando fui el único estudiante extranjero en el programa de Historia china de la Universidad de Stanford. Ahora, durante el bienvenido resurgimiento del poderío asiático, entender mejor lo que en las maravillosas y ricas sociedades de Asia se siente y anhela podría significar la salvación de la economía mexicana. Claro, para ello nuestra élite dominante tendría que hacer el esfuerzo de modificar su sistema de valores. Ojalá lo haga.

Sentado al otro lado del océano Pacífico imagino a la mayoría de mis más de cien millones de paisanos como gente de bien que quiere vivir tranquila y, en la medida de lo posible, legar a sus hijos una señal de esperanza para que puedan navegar dignamente hacia su destino. El frondoso olmo de la Constitución de 1917 nos proporcionó un orden que bien que mal funcionó durante todo el difícil y peligroso siglo XX, por eso no hay que pedirle ahora que dé peras.

En los tiempos en que el difícil y violento consenso de las fuerzas revolucionarias se dio cita en Querétaro, no había en el planeta manipulación genética, contaminación ambiental, educación preescolar, narcotráfico, medios audiovisuales, seguridad social, Internet, fuentes alternativas de energía, pensiones, sida y un sinfín de realidades y demandas públicas que una nueva generación de mexicanos debe aprender a manejar y canalizar hacia el equitativo beneficio de la colectividad nacional. Abstengámonos, por tanto, de denigrar a la entrañable Revolución mexicana e, inspirados en ella, alentemos a los jóvenes para que se atrevan a pensar y actuar de manera eficaz, es decir, para que, por favor, sean diferentes a nosotros los viejos.

Kuala Lumpur, junio de 2010.

El autor es embajador de México en Malasia.

Conózcalo

Título: México 2010. Hipotecando el futuro.

Editorial: Taurus.

Fecha: México, 2010.

Autores: Nicolás Alvarado, Gerardo Esquivel, Silvia E. Giorguli Saucedo, Fausto Hernández Trillo, Alejandro Moreno, Érika Ruiz Sandoval, Pedro Salazar Ugarte y Jesús Silva-Herzog Márquez.

Prólogo: Jorge Alberto Lozoya.

Ley antimonopolios, pros y contras

Análisis Regulación y competencia. La reforma a la Ley de Competencia Económica, aprobada en la Cámara baja en el periodo pasado, puede ser un detonante de la actividad económica. Es urgente que los senadores concluyan el proceso legislativo. La competencia es tarea de todos: ciudadanos, empresas y el Estado en todas sus formas y niveles. A nivel gubernamental, involucra a un sinfín de dependencias y entidades, por ejemplo, la Cofemer, Profeco, CRE, Cofetel, Cofepris, IMPI y todas las secretarías que forman parte del gabinete económico

Alejandro Faya Rodríguez

(24 octubre 2010).- El 29 de abril pasado la Cámara de Diputados aprobó el proyecto de decreto por el que se reforman, adicionan y derogan varias disposiciones de la Ley Federal de Competencia Económica (Ley de Competencia), entre otros ordenamientos. El proyecto, que en lo general se ajusta a los términos de la iniciativa presentada por el titular del Ejecutivo, fue turnado al Senado de la República para su estudio y dictamen según lo marca el procedimiento constitucional. Hoy, casi seis meses después de que la Cámara aprobara el proyecto, debe examinarse el papel que jugará el Senado: primero, porque es momento que entre al tema, y segundo, porque deberá hacerlo con responsabilidad y profesionalismo.

Es pertinente destacar los principales puntos que deberían guiar este ejercicio, que ojalá suceda pronto.

Lo bueno

Indudablemente, el fortalecimiento de la Comisión Federal de Competencia (CFC) constituye el punto más positivo del proyecto. Hasta ahora el regulador enfrenta un doble problema: sus herramientas jurídicas y materiales de investigación son débiles y las multas que puede imponer, un auténtico ridículo internacional (al margen de que tienen que pasar por un mar de litigios y un procedimiento de cobro). Sobra decir el resultado: los incentivos para incumplir la ley y beneficiarse de ello mediante la extracción ilegal de rentas, son muy altos.

El proyecto establece la posibilidad de que la CFC realice visitas de verificación sorpresa y ordene medidas cautelares, facultades normales para cualquier órgano antimonopolios fuera de México. Aunque suene absurdo, en la actualidad la CFC tiene que avisar al investigado antes de realizar una inspección o verificación; por otro lado está imposibilitada para detener o mitigar el daño que una práctica anticompetitiva, en curso de investigación o litigio, traslada a la sociedad. Deben sin embargo revisarse los tiempos y formas de estas figuras para que su aplicación práctica sea una realidad.

El Proyecto plantea un importante aumento en las sanciones. En la actualidad, las multas máximas por la comisión de una práctica monopólica absoluta o relativa son de poco más de 86 y 51 millones de pesos, respectivamente. Ahora pasarían a un 10 por ciento y 8 por ciento de los ingresos del agente económico acumulables para efectos del Impuesto Sobre la Renta (aunque sólo derivados de fuentes de riqueza ubicadas en territorio nacional). La fórmula no es excesiva como ha sido planteado por algunas voces del sector privado; es inclusive moderada si revisamos la práctica internacional. Por ejemplo, la multa máxima que puede imponer la Unión Europea asciende al 10 por ciento de las ventas a nivel mundial; en Estados Unidos, a 100 millones de dólares, al doble de las ganancias ilícitas o al daño de las víctimas; en Brasil, al 30 por ciento de las ventas anuales; y en Canadá, al 20 por ciento de las ventas anuales. Es importante que la fórmula no ligue el porcentaje al "mercado relevante", como se ha planteado en diversas ocasiones, ya que reduciría substancialmente el monto de la sanción y complicaría de forma absurda su cálculo.

El proyecto plantea una desregulación positiva en lo que se refiere a la notificación y aprobación previa de concentraciones: incluye un procedimiento sumario así como diversos casos de excepción cuando la operación no presenta efectos adversos a la competencia y libre concurrencia. El régimen actual abarca un universo muy amplio de transacciones, lo que provoca un ineficiente desvío de recursos.

El proyecto contiene una serie de ajustes que reforzarían el debido proceso y equilibrarían la fuerza del Pleno. Aunque el Presidente es el representante de la institución, los Comisionados deben constituir una fuerza deliberativa y decisoria real. Entre otros, se crea la figura del "Comisionado Ponente" así como la "audiencia oral" frente al Pleno como derecho de cualquier investigado. Un paso importante es que el nombramiento del Secretario Ejecutivo (el responsable de iniciar y substanciar los procedimientos de investigación) recaería en el Pleno a propuesta de cualquiera de sus integrantes, además de que dicho funcionario nombraría y removería el personal a su cargo.

Finalmente, el proyecto otorga a la CFC mayores facultades con efectos hacia el interior de la administración pública. Por ejemplo, el regulador podría emitir lineamientos que las dependencias y entidades deberán de tomar en cuenta en el otorgamiento de concesiones, así como en los procedimientos de adquisiciones, arrendamientos, servicios y obras públicas.

Lo malo

El proyecto plantea un serio retroceso en lo que se refiere a la revisión jurisdiccional de las decisiones. Al inicio, las decisiones del Pleno de la CFC eran recurribles, luego del recurso de reconsideración, ante el Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa (el Tribunal Fiscal) y posteriormente ante el Poder Judicial. El paso ante el Tribunal Fiscal era, y lo es para otros casos, lento y burocrático, pero sobre todo inapropiado para un órgano antimonopolios. Sólo fracciona el proceso de revisión y lo hace más lento y burocrático.

Derivado de una jurisprudencia emitida por la Suprema Corte en 2008, que declaró la falta de competencia del Tribunal Fiscal para revisar las decisiones del Pleno de la CFC, las decisiones de dicho regulador son recurribles directamente ante las instancias judiciales federales. La evidencia muestra, a partir de esa fecha, una mejora sustancial en la administración de litigios por parte de la CFC pero, sobre todo, mayor calidad y celeridad de los procedimientos de revisión. El proyecto regresa al viejo sistema y establece explícitamente el juicio contencioso-administrativo como primera instancia de revisión fuera de la CFC.

Esta regla, que va en contra de las mejores prácticas internacionales, exacerba un añejo problema que aqueja a prácticamente todos los reguladores mexicanos: parálisis regulatoria vía tribunales. Un lugar de aportar soluciones que mejoren y expediten los procedimientos de revisión jurisdiccional (como lo podrían ser el establecimiento de límites al amparo, de un sistema de deferencia judicial o la creación de tribunales judiciales especializadas en derecho económico), el proyecto camina al revés.

Lo dudoso

Bajo la Ley de Competencia las prácticas monopólicas "relativas" (prácticas anticompetitivas diferentes a los acuerdos colusivos entre competidores directos) existen siempre y cuando el agente económico infractor tenga "poder sustancial de mercado". Bajo esta noción, para la autoridad ha sido difícil sancionar a ciertas empresas que, siendo jugadores importantes, no tienen la mayoría o cuasimayoría de la cuota en el mercado relevante. El proyecto introduce el concepto de "poder sustancial conjunto", es decir, el que se materializa cuando dos o más agentes ejercen dominancia conjunta en un mercado. La noción es interesante pero de dudosa viabilidad económica y operativa. Aunque la Exposición de Motivos explica que "en el contexto internacional existe la figura jurídica de poder sustancial conjunto", la realidad no es tal. En una fórmula rara que encuentra escaso respaldo en otros países. Sin duda la CFC tendrá que quebrarse la cabeza para definir los criterios respectivos.

El proyecto tipifica las prácticas monopólicas absolutas como delitos, es decir, se sancionaría con cárcel a las personas responsables. Se argumenta que esta medida traería consigo un efecto disuasivo importante, ya que los funcionarios de las empresas la pensarían dos veces antes de concretizar la conducta ilegal. Independientemente que no existe evidencia empírica al respecto, la medida debe presuponer un sistema administrativo que determine impecablemente la ilicitud administrativa pero, sobre todo, un sistema de justicia penal sólido que asigne la culpa penal. Pensar en sanciones penales sin más evaden de forma simplista los pasos previos que deben atenderse, así como la realidad del entorno institucional mexicano. Además, la carga de la prueba es muy distinta para cada régimen: mientras que resulta válido que el sistema de competencia se base en evidencia presuncional y circunstancial, lo mismo no aplica para la materia penal. Cabe señalar que el Código Penal Federal actualmente tipifica, aunque de forma muy difusa, conductas que son prácticas monopólicas y absolutas.

Finalmente, el artículo segundo transitorio dispone que en un plazo no mayor a seis meses el Pleno de la CFC debe emitir criterios técnicos en diez áreas. Aunque una de las críticas más fundadas es que la institución no ha generado una "jurisprudencia administrativa" ni ha hecho claros y explícitos sus criterios, no parecen necesarios todos los criterios, no existe claridad sobre otros y la tarea parece irrealizable en el tiempo previsto, a menos que la CFC ya esté trabajando en ello.

Lo que falta

El proyecto evade el tema de autonomía. Aunque la CFC goza de una independencia aceptable para la toma de sus resoluciones (a diferencia de otros reguladores como la Cofetel, Cofepris o Cofemer), no la tiene en otros ámbitos (por ejemplo, presupuestal o administrativamente), lo que le resta solidez y poder de interlocución. Es hora que la CFC deje de formar parte de la Secretaría de Economía y adquiera su propio estatus.

En general, la figura de "órgano desconcentrado" ha quedado superada por la realidad, cuando menos para el caso de las autoridades reguladoras "autónomas". Entre otras cosas, fomenta interferencia política, genera conflictos de interés, debilita el liderazgo transversal, reduce autonomía por la vía presupuestal y ata al Congreso de manos para legislar ciertos arreglos institucionales.

La respuesta no debe ser convertir a la CFC en "organismo descentralizado", figura concebida para entes públicos que no desempeñan de forma preponderante funciones de autoridad sino empresariales o de asistencia social. La mutación sólo impondría costos ociosos y desalentaría una sana y necesaria permeabilidad respecto de la administración pública. Una autonomía constitucional rayaría en lo absurdo: fraccionaría y aislaría la política administrativa y generaría un vacío en la rendición de cuentas.

Los legisladores no están atados a elegir una opción del obsoleto menú administrativo y pueden diseñar una nueva figura que se ajuste a las necesidades: por ejemplo, una entidad dentro de la administración pública centralizada, al mismo nivel que las Secretarías de Estado aunque con reglas diferenciadas, con mayor autonomía pertinente a la función regulatoria aunque sujeta a mecanismos razonables de vigilancia, tutela y rendición de cuentas. Solo así se lograría un equilibrio entre la fortaleza institucional requerida y la pertenencia armónica a un gobierno. Nada sería peor que esto último.

En este contexto, la intervención del Senado en los nombramientos sería útil como parte de un rediseño integral y siempre y cuando opere a futuro, para procurar una recomposición gradual e institucional del órgano en vez de una repartición política. Es necesario.

Idealmente, esta figura debería ser la misma para las diversas agencias reguladores, para no caer tampoco en una multiplicidad de creaciones "ad hoc". Aunque no guste por razones prácticas, es menester respaldar esta figura en la propia Constitución.

Por otra parte, de nada sirve aumentar atribuciones y herramientas jurídicas sin un incremento correlativo en recursos económicos y humanos. Nada en el proyecto asegura estos recursos. No se puede investigar o litigar frente a los grandes grupos de interés sin un equipo nutrido y bien remunerado de funcionarios de calidad. Justo por los días en que el Presidente presentó la iniciativa al Congreso, la CFC sufrió una disminución presupuestal y perdió una dirección general. Dadas las incongruencias es razonable presumir que, aún con las reformas, la CFC seguiría prácticamente igual en este rubro a menos que por la vía legislativa se tomen las medidas pertinentes.

Existen otros dos temas que me parece deberían considerarse. Primero, consolidar en los reguladores sectoriales las atribuciones de declaratoria de poder sustancial y emisión de regulación asimétrica. El actual sistema, además de ineficiente, duplica las oportunidades de litigio. Y segundo, permitir que los particulares recuperen daños por la vía civil una vez que la CFC haya determinado, mediante decisión firme, la existencia de una práctica monopólica. A diferencia de las sanciones penales este mecanismo (sin dejar de reconocer sus complicaciones) sí tendría un efecto disuasivo real sobre los agentes económicos.

Por último, es importante recordar que la competencia es tarea de todos: ciudadanos, empresas y el Estado en todas sus formas y niveles. A nivel de gobierno federal involucra a un sinfín de dependencias y entidades. La CFC debe tener las armas institucionales para liderar esa agenda.

Conclusiones

El proyecto de reforma es un pequeño paso en la dirección correcta. Hay sin embargo temas que deben revisarse y oportunidades de mejora que deben atenderse.

Pero no hay que perder piso: la reforma está lejos de ser la solución o la panacea. Parte de la demagogia -según se refleja en la Exposición de Motivos o en la voz de diversos actores- consiste en asegurar o tratar de vender la idea de que, de aprobarse, la reforma situaría a México en los mejores estándares internacionales en lo que se refiere a las condiciones de competencia. Falso en mayúscula. No es lo mismo una reforma a la Ley de Competencia que una reforma en materia de competencia.

La altísima distorsión, concentración y monopolización de sectores económicos en la economía mexicana no se corregirá mediante la persecución y penalización de prácticas monopólicas (lo que no deja de ser una actividad residual en el marco de una economía de mercado funcional), sino modificando las reglas del juego hechas a modo para los grupos de interés y eliminando los -económicamente irracionales e inmorales- privilegios y prebendas, la mala o excesiva regulación y un sinnúmero de barreras injustificadas a la entrada.

Sólo una reforma regulatoria verdadera (no una mal entendida desregulación) generará condiciones de competencia adecuadas, para lo cual habría que pisar muchos intereses creados. Es un esfuerzo serio que no se ha hecho o no se ha querido hacer en este país.

El autor es maestro en derecho por la Universidad de Oxford y consultor en derecho económico. afaya@afrconsulting.com.mx

'La sociedad quedó fuera de la transición'

Entrevista Transición inacabada. Sergio Aguayo: investigador del Colmex. En su nuevo libro el autor ya no se dirige a la clase política; busca una reacción de la sociedad civil para retomar el control de la transición hacia la democracia

Jésica Zermeño

(24 octubre 2010).- Su inquietud comenzó en 2003, en julio, cuando el partido México Posible perdió el registro. Participar en su conformación y vivir el fracaso de la elección sacudió a Sergio Aguayo. Siete años después el académico asegura que su experiencia estuvo lejos de la democracia que soñaba, pues conoció el impacto corruptor que tiene el dinero público en la vida interna de un partido que pretendía ser diferente.

Luego, un mes después, una cena: Vicente Fox invitó a Los Pinos a un grupo plural de intelectuales y él fue uno de los invitados. Esa noche de agosto los integrantes del círculo rojo cuestionaron al primer mandatario como nunca lo habían hecho. Le recriminaron por qué no había estado a la altura de su papel histórico, por qué no había cumplido con su compromiso de castigar a los violadores de derechos humanos, de combatir la corrupción. Recuerda que la velada fue tan desagradable que Marta Sahagún derramó lágrimas. Fue la última cena de ese tipo en el sexenio.

"Esa noche, cuando salí de Los Pinos, me sentía mal conmigo mismo, muy desconcertado. No era sólo tristeza, era desconcierto. Me preguntaba qué carajos pasó, dónde se había desviado la transición. Tenía que explicarme qué había pasado para decidir qué era lo que iba a hacer, porque en el pasado lo tenía claro, defender los derechos humanos, pelear por la democracia, las causas en las que yo me he involucrado en los años que llevaba ya de ser activista, académico y analista para medios de comunicación. En ese momento no sabía hacia dónde iba", asegura el investigador, que realizó estudios de postdoctorado en la Universidad John Hopkins.

Así decidió que comenzaría a escribir el libro que ahora presenta tras siete años de trabajo, Vuelta en U. Guía para entender y reactivar la democracia estancada (Taurus, 2010). Un libro que ofrece una respuesta a aquellos que se preguntan por qué México no ha podido deshacerse del lastre del autoritarismo, por qué la democracia mexicana vive una muerte lenta día a día. Y no sólo da respuestas, también muchos datos.

"Es una luz de información, porque no bastaba con un ensayo en el cual fuera mi palabra, sino que lo que quise fue poner en cifras el drama de una democracia traicionada. Porque la democracia mexicana es una democracia traicionada. La traicionó el PAN y la traicionó el PRD, cada uno a su manera y por sus motivos, por sus visiones cortoplacistas.

"Una vez entendido esto vienen malas y buenas noticias. La mala es que la sociedad quedó fuera de la transición, ésa es la gran conclusión, nos fue mal en relación con partidos, gobernadores, multimillonarios y grandes empresas, en términos comparativos. Pero la buena, y estoy convencido, es que el autoritarismo se modernizó pero al mismo tiempo se descuadró, por lo tanto no está todavía constituido un régimen definitivo. Ningún actor controla las suficientes parcelas de poder nacionales como para tener un regreso al presidencialismo autoritario. Es decir, hay enormes vacíos y enormes oportunidades que pueden ser aprovechados por las fuerzas a favor de una democracia modernizadora. Hay con qué dar una buena pelea".

Las pruebas

Por las páginas de Vuelta en U desfilan los personajes y procesos que, a juicio del autor, configuraron el sistema político mexicano durante el último siglo. En el volumen puede encontrarse una propuesta teórica propia para entender la transición mexicana con cinco variables: los cambios en la estructura económica, el debilitamiento del bloque gobernante, el incremento de la autonomía para las personas y grupos, el peso del exterior para justificar el régimen y el papel de la libertad de información.

Este conjunto de ideas parte de una tesis presentada por el historiador Lorenzo Meyer en los setenta: tras la Revolución Mexicana el Estado no se deshizo de su carácter autoritario, sólo se modernizó.

A estos antecedentes Aguayo agrega un apartado: el análisis de los fraudes electorales acontecidos en México desde 1910. Con ello, intenta describir el modus operandi electoral de la clase política autoritaria hasta hoy.

Primero describe las derrotas de Francisco I. Madero (1910), José Vasconcelos (1929), Juan Andreu Almazán (1940) y Miguel Enríquez Guzmán (1952). Salvo el primero, todos fueron derrotados por candidatos del Partido Revolucionario Institucional -bajo cualquiera de sus nombres- en elecciones cuestionadas. Después, analiza con más detenimiento los procesos electorales de 1988 y 2006, a su parecer también fraudes y momentos fundamentales de la transición.

"Tras explicar los fraudes hubo que derruir varios mitos. Por ejemplo, que los partidos son los protagonistas de la transición. Falso. Son actores importantes pero no fueron los protagonistas, es la sociedad civil, las grandes reformas electorales vienen después de movimientos sociales, como el 68 y la aparición de la guerrilla. Siempre, hasta ahora.

"Luego viene la explicación de qué fue lo que le pasó a Fox. Cuando entendí lo que había pasado con él, su drama, noté que es el drama de la democracia, porque Fox no es resultado de sí mismo, es resultado de un partido que en el 88 empieza a traicionarse, y luego describo la forma como Fox ejerció el poder para entender el 2006. ¿Por qué era importante el 2006? Porque era la prueba de que las elecciones limpias y confiables ya habían llegado para quedarse, pero nos equivocamos", sostiene.

Aguayo también aporta datos de las consecuencias indeseadas de la transición, como la proliferación del crimen organizado, la conversión del presidencialismo en muchos presidencialismos comandados por gobernadores-caciques -junto con la repartición de los recursos acorde con este modelo- y el incremento del poder de las televisoras, entre otras.

Sin embargo, a su juicio no todas las consecuencias han sido negativas para la ciudadanía. Gracias a la indiferencia de los actores de la transición hacia las causas ciudadanas la sociedad se dio cuenta de que tenía que organizarse y defenderse sola, en México y en el extranjero. Es decir, hacer "diplomacia ciudadana". Gracias a esta toma de conciencia, el Estado mexicano ha sido auditado como nunca en materia de derechos humanos a nivel internacional.

"Uno de los errores que cometimos fue transferir a otros la responsabilidad de defendernos, un líder carismático, los partidos, el gobierno. Por supuesto que tienen responsabilidad, pero la primera responsabilidad recae en nosotros, y hablando del exterior la solidaridad es de quien la trabaja, y no nos van a regalar la solidaridad, tenemos que conquistarla.

"¿En qué momentos tuvimos éxito? Cuando nos unimos activistas, académicos y periodistas con la solidaridad internacional. Conseguimos recursos. No quería dejar un libro amargo de denuncia. No sirve de nada lamentarse. Yo podría sentarme a llorar en el parque por todo lo que dejé de hacer. Cuando entendí que estamos en una nueva etapa pensé que hay que empezar a diseñar las metodologías de la transformación".

El futuro

El investigador, quien cumplió ya 47 años de activista (en 1963 comenzó a participar en la política estudiantil de su natal Jalisco), evita enumerar y describir escenarios de qué pasará con la transición en el corto plazo, o si habrá más o menos democracia. Sólo tiene una certeza: "hay que prepararnos para el regreso del PRI y hay que defender lo que hemos logrado en el Distrito Federal". Como hombre de izquierda, ve en la capital del país el proceso de transición más acabado de todo el territorio nacional, pero también reconoce que los movimientos de izquierda están más que nunca alejados de la izquierda partidaria, una izquierda que sólo se ha preocupado por mantenerse en el poder y obtener ganancias.

"Vamos a ver iniciativas inéditas de organización y, por desgracia, uno de los movimientos sociales más fuertes en este momento es el crimen organizado. Tiene una base social real, y no sabemos si la va a movilizar o no. Luego está el movimiento de Andrés Manuel López Obrador, o el antorchismo, o una serie de organizaciones regionales que están porque hay vacíos de poder y quieren aprovechar el resquebrajamiento que hay. Tras la transición fallida todos nos dimos cuenta que el que no se moviliza nadie lo escucha, nadie nos va a defender.

"Es tan seria la inestabilidad generada por la mezquindad y la terquedad de miras de quienes detentan el poder que el sistema está dejando de ser funcional en un buen número de dimensiones. Esas condiciones son propicias para que se den reajustes en varios frentes", asegura.

Pensando en ese futuro, Aguayo escogió un interlocutor distinto para su último libro. En Vuelta en U no se dirige a la clase política, como en sus trabajos anteriores, sino a la sociedad organizada, a aquellos ciudadanos dispuestos a actuar, en mayor o menor escala, para cambiar el futuro del país. En sus palabras, decidió escribirle a los inquietos por la política.

El académico cierra su investigación con una serie de recomendaciones para fortalecer la democracia que pueden ser implementadas por la sociedad activa a la que se dirige, como el monitoreo ciudadano a los partidos políticos, a los organismos públicos de derechos humanos y a los cuerpos de seguridad. Si alguna lección trajo la transición a México es que la democracia no llegará sólo por la vía electoral; lo que le ha faltado son contrapesos sociales, argumenta.

Todo con el fin de que México no fracase eternamente en conseguir la democracia.

"Los dos próximos años son particularmente inestables. Lo que yo estoy planteado es algo diferente, es decirle a los grupos ciudadanos 'aprovechemos la realidad relativamente libre que hay en estos espacios para ver si podemos defendernos mejor. Un relato bien articulado, una propuesta bien hecha, con el concurso del mundo académico y respaldado por algunos medios de comunicación, tiene la posibilidad de crecer muchísimo en estos momentos por el vacío creado ante las tendencias suicidas de la clase política", concluye.

Novedad editorial

Título: Vuelta en U. Guía para entender y reactivar la democracia estancada.

Autor: Sergio Aguayo.

Editorial: Taurus.

Año: 2010.

Número de páginas: 400.

Elecciones vecinales en blanco y negro

Opinión Participación ciudadana. Las elecciones de comités ciudadanos y consejos de los pueblos, que se celebran hoy, pueden ser una oportunidad para revisar la Ley de Participación Ciudadana de la capital

Maite Azuela

(24 octubre 2010).- El día hoy en el Distrito Federal, de las 9:00 a las 17:00 horas, se llevará a cabo el proceso de elección de comités vecinales y consejos de los pueblos. Cada uno de ellos integrado por nueve ciudadanos de las primeras cuatro fórmulas que obtengan el mayor número de votación en su referida colonia o pueblo. La convocatoria del Instituto Electoral del Distrito Federal ha pasado desapercibida y, en consecuencia, podemos esperar que la participación de los votantes sea tan escasa como la de aquellos que, sin apoyar realmente a ningún partido político, decidieron competir.

Aunque uno de los objetivos de la Ley de Participación Ciudadana es materializar mecanismos incluyentes y robustecer la corresponsabilidad de los ciudadanos, parece que estas elecciones lucirán escuálidas por su incipiente difusión. Además de débiles por la falta de claridad en los incentivos y la inevitable intromisión de los partidos políticos.

El poco interés de los ciudadanos para formar parte de las representaciones vecinales puede ser resultado de varios elementos.

En primer lugar, por la poca información que hubo sobre este proceso y sus implicaciones.

En segundo término, la posibilidad que tendrán estos representantes de decidir sobre un porcentaje del presupuesto delegacional (del 1 al 3 por ciento cada año) parece discrecional y está amarrada a la decisión de las asambleas de vecinos, cuya integración es poco clara en la ley. Además, no se determina con qué criterios se destinará qué porcentaje a las propuestas que realicen estos comités.

De acuerdo con los datos del IEDF, se registraron ya en los 40 distritos 8 mil 838 fórmulas integradas equitativamente por mujeres y hombres. Participarán como candidatos un total de 44 mil ciudadanos. Los registros en los distritos van desde 133 fórmulas, como en el segundo, hasta 441, como en el 21.

Sin desestimar la oportunidad que podría generarse con una figura como los comités vecinales, que habían sido fantasmagóricos en anteriores periodos, la probabilidad de su fracaso como herramienta distributiva de poder asusta.

Se destinaron 13 días para la realización de campañas, previendo que los candidatos atendieran las restricciones: no hacer uso de recursos públicos, infraestructura o medios de gobiernos. Desde las elecciones de 1999 se eliminó legalmente la participación de los partidos políticos en las fórmulas de candidatos. La propaganda que se permite a los vecinos para promover sus fórmulas debe ser en blanco y negro, pero no podemos ignorar que estas elecciones vecinales están impregnadas por los colores de los partidos políticos.

La pregunta es si valdría la pena asumir que los partidos políticos tienen intereses irrenunciables en este tipo de contiendas, para imaginar marcos jurídicos que los incorporen y que regulen abiertamente su incidencia, sin eliminar de ningún modo la participación de ciudadanos independientes.

La indignación de muchos de nosotros por el uso de recursos públicos y la invasión de líderes partidistas para armar fórmulas "vecinales" tuvo resonancia en varios medios de comunicación. No obstante, el potencial de estas estructuras de vecinos organizados les reditúa electoralmente. La tentación es más grande que la penitencia.

Durante la campaña circularon exhortos de consejeros electorales locales, legisladores, delegados y presidentes de partidos para que las elecciones no se contaminaran de ofertas clientelares y para que los partidos y servidores públicos permanecieran al margen. Sin embargo, como hemos comprobado, los exhortos no son inhibidores fácticos de las prácticas indebidas. Las conductas indeseables sólo se combaten con repercusiones jurídicas que se hagan realmente efectivas.

No ha resultado así, el Tribunal Electoral del Distrito Federal (TEDF) realizó sus resoluciones atendiendo sólo a la forma e ignorando el fondo. En un caso en contra del catálogo de colonias y pueblos originarios y en 44 contra la convocatoria que emitió el Consejo General del Instituto Electoral del Distrito Federal no revisó siquiera las razones. Desechó todos los casos por haberse promovido de forma extemporánea.

Es necesario que la ley no impida sólo la participación de representantes partidistas a nivel local o federal, sino a nivel delegacional. Y lógicamente requeriríamos tener acceso a la información sobre las estructuras partidistas hasta este nivel. Soñar no cuesta nada.

Otra de las carencias que debilitan este proceso es la desarticulación temporal con otros procesos electorales estatales para comités o consejos vecinales. Aun considerando el avance de contar con sellos locales que den cuerpo a las representaciones directas y a las demandas localizadas, sigue haciendo falta garantizar estos mecanismos participativos desde la Federación. Llevar a cabo elecciones vecinales simultáneas en todos los estados de la República le daría volumen al sonido de estas campañas cuasi silenciosas.

La figura de los comités vecinales es de lo más rescatable y no podemos descartarla de nuestro espectro de representación política. Además de poder definir el uso de una pequeña parte del presupuesto, algunas de las atribuciones que pueden detonar procesos más democráticos en las delegaciones es la facultad que les otorga la ley para: "supervisar el desarrollo, ejecución de obras, servicios o actividades acordadas por la asamblea ciudadana... emitir opinión y supervisar los programas de las Coordinaciones Territoriales de Seguridad Pública y Procuración de Justicia". Ambas atribuciones podrían ser contundentes si se estableciera una sanción a los responsables en atención a la supervisión u opinión emitida por los comités vecinales.

Vale la pena, sin embargo, estar atentos a lo que ocurra en estas elecciones de la Ciudad de México. A veces se requieren fracasos evidentes para reconstruirse. Así que ésta puede ser una oportunidad para revisar no sólo la ley de la capital, sino para imaginar mecanismos de participación ciudadana que a nivel federal garanticen la incorporación de nuevos actores en las decisiones de lo que resulta más inmediatamente público: los pueblos y las colonias.

No olvidemos que tenemos la promesa de una reforma política estructural e incluyente, que si atiende estos síntomas de simulación podría institucionalizar la historia de una participación ciudadana palpable.

La autora es analista política y activista ciudadana.

http://www.maiteazuela.blogspot.com

Twitter: @maiteazuela

Representación ciudadana

Los Comités Ciudadanos y Consejos del Pueblo se crearon con la nueva Ley de Participación Ciudadana del Distrito Federal, aprobada el 27 de mayo del 2010. Sustituyen a los mil 353 Comités Vecinales electos en 1999, que no se habían renovado desde entonces. Se elegirán este domingo.

Qué son:

· Órganos de representación ciudadana de una colonia o de un pueblo tradicional en los que no participan partidos políticos.

Cómo se integran:

· Se registran fórmulas con cinco integrantes.

· No puede haber más de tres hombres o más de tres mujeres en cada fórmula.

· La jornada electiva tiene lugar el 24 de octubre de 9:00 a 17:00 horas.

· La fórmula ganadora tendrá cinco representantes en el comité.

· El segundo lugar, tendrá dos representantes.

· El tercero y cuarto lugar tendrán un representante.

· Son electos por tres años.

Cuántos son:

· 1,775 colonias.

· 40 pueblos.

· 1,744 comités y consejos en los que se registraron fórmulas.

· 8,838 fórmulas registradas en total.

· 44,000 candidatos participan.

· 7,479,410 electores inscritos en la lista nominal del DF.

Qué hacen:

· Integrar, analizar y promover las soluciones a las demandas de los vecinos de la colonia o de la comunidad.

· Elaborar y proponer programas y proyectos de desarrollo comunitario.

· Participar en la elaboración de diagnósticos y propuestas de desarrollo integral para la comunidad, que deberán ser aprobados por la asamblea ciudadana para la elaboración del presupuesto para la demarcación territorial y para el Programa de Desarrollo del Gobierno del Distrito Federal.

· Supervisar el desarrollo, ejecución de obras, servicios o actividades acordadas por la asamblea ciudadana.

· Conocer, evaluar y emitir opinión sobre los programas y servicios públicos prestados por la Administración Pública del Distrito Federal.

· Desarrollar acciones de información, capacitación y educación cívica para promover la participación ciudadana.

· Emitir opinión y supervisar los programas de las Coordinaciones Territoriales de Seguridad Pública y Procuración de Justicia.

· Mantener vinculación estrecha con la autoridad tradicional correspondiente en el pueblo originario (en el caso del Consejo del Pueblo).

Fuente: Instituto Electoral del Distrito Federal.

Recopilación: Karla Garduño.

¿Qué es el Tea Party?

Análisis Estados Unidos. Nacionalistas y conservadores, los miembros del Tea Party emergen como una fuerza a considerar en las elecciones intermedias del próximo 2 de noviembre

Zoé Robledo

(24 octubre 2010).- "Está mejor documentado el nacimiento de Cristo que el de Obama".

Orador del Tea Party en la Convención Nacional en Nashville, 6 de febrero de 2010.

Este movimiento es uno de los referentes del colapso del sistema bipartidista norteamericano. Ante el florecimiento de sentimientos antigobierno y miedo a lo diverso, las facciones más radicales de la derecha aprovecharon la oportunidad para capitalizar el descontento con los partidos tradicionales. El movimiento se encontraba descentralizado, no tenía carácter oficial, ni figuras políticas destacadas; pero sus candidatos empezaron a ganar.

El movimiento se llamaba Know Nothing (No sé nada) y surgió en 1843; en la década siguiente se convirtió en el American Party, y sus miembros se oponían a la migración de católicos irlandeses y alemanes, por considerarlos enemigos de los valores estadounidenses. Los Know Nothing estaban convencidos de que se fraguaba una invasión a Estados Unidos comandada por el Papa Pío IX. Su nombre viene de su código de secrecía; cuando se les preguntaba por sus actividades políticas siempre contestaban lo mismo: I know nothing.

Al igual que el Know Nothing, el movimiento del Tea Party ha irrumpido en la escena política norteamericana inspirado en dos controvertidas tradiciones políticas que han moldeado la democracia de nuestros vecinos: una es la tensión jeffersoniana, la defensa de los derechos del individuo y la virtud de un gobierno pequeño y restringido. La otra es una paranoia al más puro estilo McCarthy.

Se sabe que la inspiración del Tea Party proviene del acto fundacional de Estados Unidos: el Motín del té de Boston de 1773, en el que los colonos lanzaron al mar un cargamento de té, protestando contra la aprobación por Gran Bretaña del Acta del Té, que gravaba la importación de varios productos, incluido el té. Pero alrededor hay muchas otras interrogantes. ¿De qué se trata el movimiento, cuál será su influencia en las elecciones intermedias en las que se renovarán los 435 asientos de la Cámara de Representantes, 36 de los 100 escaños en el Senado y 37 gubernaturas? Y es que sus propios simpatizantes aún no se ponen de acuerdo sobre ¿qué es el Tea Party? A pesar de su nombre, no es un partido político. Nació como un conglomerado de fuerzas conservadoras, un movimiento de base, un agregado de organizaciones locales. Pero hoy es mucho más que eso. Aquí algunas hipótesis que, seguramente, son piezas de un rompecabezas más amplio y complejo.

Una corriente de opinión

La reducción del tamaño y la intervención del gobierno, la reducción de los impuestos y el gasto público y la protección de las libertades individuales; que consideran en riesgo por las "políticas socialistas de Barack Obama" son las banderas que enarbolan los simpatizantes del Tea Party. Saben que la crisis no se generó por el gasto del gobierno, pero no creen que gastar más sea la solución.

Pero, como corriente de opinión, el Tea Party no excluye manifestaciones ultraconservadoras y en sus eventos es común escuchar expresiones de nacionalismo fanático e intolerancia racial. Y ya es conocida la mala combinación de un movimiento que, más que ideas, abandera miedos y pasiones.

Un movimiento anti-Obama

Obama se ha definido como un demócrata fiscalmente responsable, pero también como un agente de cambio. Y el cambio cuesta dinero. Por ello, desde febrero de 2009, cuando se manifestaron contra el paquete de estímulo económico, toda postura, declaración o anuncio de Obama ha estado acompañado de una reacción en contra por parte del Tea Party.

La gran pregunta es si la hostilidad de este movimiento contra Obama es producto de un profundo pesimismo sobre su forma de gobernar o si tiene otro origen oculto, ¿su raza, quizá? En muchas manifestaciones del Tea Party se escuchan aseveraciones que van desde que Obama nació en África, hasta que es un musulmán que practica en secreto su fe. Es claro que el movimiento es poco tolerante a la diversidad racial. Según varias encuestas, el perfil promedio de quienes se identifican como simpatizantes del Tea Party son hombres republicanos, blancos, casados y de más de 45 años. Como recuerda sarcásticamente Santiago O'Donnell: "los negros no estuvieron en el Tea Party de Boston (en 1773) porque estaban en el sur cosechando tabaco y algodón para sus amos... En la Tea Party versión 2010, los negros vendrían a ser los sacos de té que el movimiento quiere tirar por la borda" (Que se vayan todos, Página/12, febrero, 2010).

Se trata del nacimiento de un tercer partido

La posibilidad de que desde el Tea Party se geste una tercera fuerza política preocupa por igual a demócratas y republicanos. Y es que alteraría el arraigado bipartidismo y generaría una inquietante inestabilidad en el sistema político. Por ello, en un principio se pensaba que el Partido Republicano cooptaría los votos del Tea Party a su favor. Pero ahora parece que el movimiento será el que tome al Partido Republicano desde dentro, empujándolo aún más hacia la derecha. Los republicanos no tienen otra opción: de excluir al Tea Party de sus procesos de selección interna, el Partido Republicano se condenaría a enfrentar una tercera opción conservadora, quizá poco competitiva, pero con enorme potencial de restar votos a sus candidatos. El Tea Party sabe de esa fuerza y la ha utilizado para impulsar a sus candidatos por encima de republicanos con mucho prestigio y trayectoria partidista.

Una incubadora de candidatos

El asiento en el Senado que ocupó durante 47 años el demócrata Ted Kennedy es hoy ocupado por un republicano: Scott Brown, un ultraconservador que sería un total desconocido si no hubiera posado, en 1982, desnudo para la revista Cosmopolitan como el "hombre más sexy de Estados Unidos". Brown ganó ese bastión demócrata gracias al apoyo del Tea Party; de otra forma su éxito era completamente inviable.

Con ese músculo probado, el Tea Party impulsó a muchos candidatos, convirtiéndose así en una incubadora de candidatos de procedencias muy diversas pero con un discurso de populismo conservador como factor común. Algunos ejemplos de candidatos apoyados por el Tea Party que han vencido al establishment republicano son los siguientes:

Christine O'Donnell (candidata al Senado por Delaware): es una asesora en mercadotecnia y ex comentarista de la cadena Fox que defiende el derecho a portar armas, la ilegalización del aborto y cree que la masturbación es un pecado. Su candidatura ha sido muy comentada a raíz de que se diera a conocer que, en un programa de televisión de 1999, O'Donnell dijo haber experimentado con la brujería.

Marco Rubio (candidato al Senado por Florida): es el fenómeno político más atractivo de estas elecciones. Con raíces cubanas, humilde, carismático, ya es conocido como el Obama republicano. Ejemplo clásico del sueño americano; estudió con una beca, se casó con una porrista y, muy joven, se convirtió en presidente de la Cámara de Representantes de Florida. Quiso ser candidato al Senado y venció al gobernador de su estado para lograrlo. Es menos radical en su discurso que sus compañeros y se le empieza a mencionar como candidato emergente en la elección presidencial de 2012.

Nikki Haley (candidata a gobernadora de Carolina del Sur): es hija de inmigrantes sijs. Su verdadero nombre es Nimrata Randhawa y su principal atributo fue crear, junto a su madre, una exitosa cadena de tiendas de ropa. Con 38 años es la gran apuesta del Tea Party.

Rand Paul (candidata al Senado por Kentucky): es hijo de Ron Paul, un prominente republicano que en 2008 compitió por la candidatura de su partido. Su discurso es la más pura representación del credo del Tea Party: reducir al gobierno a su mínima expresión, al grado que propone la eliminación del Departamento de Educación.

Susana Martínez (candidata a gobernadora de Nuevo México): es la primera candidata hispana a gobernadora en la historia de Estados Unidos y propone medidas contra la inmigración ilegal.

Carl Paladino (candidato a gobernador de Nueva York): es célebre por su frase "no tienes los cojones para medirte conmigo en un debate", que le propinó al demócrata Andrew Cuomo. Paladino convirtió su "virilidad" en estilo de campaña: Retó a golpes a un periodista y ha atacado ferozmente a los homosexuales.

Michelle Bachmann (congresista que busca la reelección en Minnesota): madre de cinco hijos propios y 23 adoptivos, la congresista Bachmann es conocida como la "súper madre" y es quizá la única que podría desafiar el liderazgo de Sarah Palin al frente del Tea Party. Ultraconservadora, una de sus banderas es frenar la "intromisión" del gobierno en la educación de los hijos.

Una plataforma para Sarah Palin

Luego de meses sin un liderazgo claro, el Tea Party dejó la orfandad: la ex candidata a la vicepresidencia en las elecciones del 2008, Sarah Palin, es ahora la cabeza visible del movimiento. La motivación de esta alianza es clara: Palin podría intentar hacerse de la candidatura a la presidencia por el Partido Republicano en 2010 impulsada por el Tea Party; o en su defecto encabezar una tercera opción. Desde su derrota, Palin se ha convertido en una celebridad política a nivel nacional con presencia constante en medios de comunicación. Por ello, la posibilidad de su candidatura mejoraría las condiciones de negociación del Tea Party en el 2012 y, a ella, la mantiene vigente mientras llega esa fecha. De momento, ya lanzó una amenaza a Obama: "él es el siguiente, porque desde nuestra casa ya se ve el 2012".

Es todo y nada

Quizá el Tea Party es apenas un adelanto, un anticipo de la forma como se empezará a canalizar la participación política en la era de las redes sociales: la organización sin organizaciones. O tal vez, como el movimiento Know Nothing, el Tea Party no sea más que una tendencia pasajera, una moda política que vivirá hasta que surja algo más llamativo, más radical, más excéntrico. O quizá el Tea Party tenga algunos elementos de cada una de estas hipótesis; quizá sea un poco de todo y de ahí el atractivo, la potencia y el riesgo.

El autor es politólogo y analista político.

Twitter: @zoerobledo

La cultura política

(24 octubre 2010).- Téngalo presente

XVIII Foro Nacional de Política Exterior de México. Porfirio Muñoz Ledo, Miguel Ángel González Félix, Rosario Green, entre otros. Lunes 25 y martes 26, 9:00 horas. Auditorio Ricardo Flores Magón de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM. Informes: 5622 9470 ext. 1050. Programa: http://bit.ly/sBhbu.

Conferencias

Las Consecuencias de la Guerra Contra Inmigrantes en los Estados Unidos. Douglas S. Massey. Viernes 29, 12:00 horas. Auditorio Cuajimalpa del CIDE. Carretera México-Toluca 3655, Lomas de Santa Fe. Informes: 5727 9800 ext. 2118.

Congresos

Cultura de la legalidad, informática jurídica y derecho informático. Jueves 28 y viernes 29. Lorenzo Córdova, Francisco Javier Rivas Rodríguez, José Luis Vargas Valdez, entre otros. Jueves 28 y viernes 29, 9:00 horas. Abraham González 48, Juárez. Informes: 5209 8800. Programa: http://bit.ly/aSaVRm.

Convocatorias

Premio a la innovación en transparencia para la mejora de la gestión institucional. Dirigido a instituciones públicas de los tres niveles de gobierno que favorezcan el acceso de la ciudadanía a la información pública. Convocatoria completa: http://bit.ly/9PtLaR.

Premio a la Investigación Jurídica en Materia de Tecnologías de la Información. Invita el INAP a servidores públicos e interesados en general. Convocatoria completa: www.inap.org.mx.

Premio iberoamericano en ciencias sociales. Dirigido a especialistas de instituciones iberoamericanas, cuyos productos de investigación hagan un aporte de calidad a las ciencias sociales. Convocatoria completa: http://bit.ly/aeGFTV.

Foros

México, riesgo país. ¿Entre la gobernabilidad y el Estado fallido? Martes 26 a jueves 28, 10:30 horas. Sala Magna Jesús Silva Herzog, Edificio B de la Facultad de Economía de la UNAM. Circuito Mario de la Cueva s/n. Ciudad Universitaria. Informes: 5622 2125.

Vocación Turística de la Ciudad de México. Tomás Villa, José Luis Luna, Socorro Téllez Reyes, entre otros. Lunes 25 a miércoles 27, 9:00 horas. Plaza de la Constitución 7, primer piso, Auditorio Benito Juárez. Centro Histórico. Informes: 5130 1980 ext. 4505.

Internet

72migrantes.com. Juan Villoro, Alma Guillermoprieto, Elena Poniatowska, Jorge Volpi, Pedro Valtierra, entre otros. Trabajo conjunto de textos y fotografías que busca dar rostro a cada uno de los 72 migrantes asesinados el 23 de agosto de este año en el ejido El Huizachal, en Tamaulipas.

Libros

¿A dónde váis Carlos Monsiváis? Guía del DF de Carlos Monsiváis editado por Débora Holtz, Juan Carlos Mena y Laura Emilia Pacheco. Grijalbo. Recorrido por sitios emblemáticos de la Ciudad de México a través de fragmentos de las crónicas del escritor recientemente fallecido.

Clasemediero. Pobre no más, desarrollado aún no de Luis de la Calle y Luis Rubio. CIDAC. La mayoría de los mexicanos pertenecen a la clase media, ¿cuáles son sus patrones de comportamiento social e individual que repercuten en el consumo y en las preferencias políticas?

Comitán. Su apasionante historia de Juan Carlos Gómez Aranda, Alejandro Covarrubias, Alma Rosa Pérez y Enrique Chávez Esparza. Entre Tejas. Relato en forma de historieta sobre la constitución y características de este poblado chiapaneco, desde su origen maya hasta la actualidad. Contacto: 2099 1747 y jcgomez@gcya.net.

Diccionario del español de México. Colmex. Dos volúmenes editados por El Colegio de México en el marco de la celebración de sus 70 años de vida.

Drogas. Su legalización de Eduardo López Betancourt. Porrúa. El autor inicia su análisis planteando la disyuntiva entre la "moda" de la legalización de ciertos narcóticos y los argumentos jurídicos sólidos que respaldan su postura a favor de la legalización como alternativa al combate a las drogas.

La reinvención de la política de Diego Beas. Planeta. Análisis del cambio en la estructura y prácticas políticas a partir de la incorporación de las nuevas tecnologías de la información.

Los grandes problemas de México. Varios autores. Colmex. Serie editada por El Colegio de México en el marco de sus 70 años de existencia. 16 tomos dedicados al análisis de los principales retos de la realidad mexicana, como educación, medio ambiente, desigualdad social, políticas públicas.

México y el mundo. Historia de sus relaciones exteriores. Varios autores. Colmex. Colección de nueve tomos en los que se analizada la política internacional desde la independencia hasta la actualidad. Escriben Josefina Zoraida Vázquez, Patricia Galeana, Lorenzo Meyer, entre otros.

Nueva historia general de México. Varios autores. Colmex. Reedición actualizada de la obra que apareció por primera vez en 1976, cuyos textos son escritos por Daniel Cosío Villegas, Bernardo García Martínez, José Luis Lorenzo, Ignacio Bernal, Enrique Florescano, Berta Ulloa, Lorenzo Meyer, Carlos Monsiváis, entre otros.

Problemas, decisiones y soluciones. Enfoques de la política pública. Varios autores. CIDE/FCE. Conjunto de ensayos que muestra los enfoques disponibles para estudiar las políticas públicas y su aplicación en las decisiones del Estado.

Mesas redondas

El Consejo de Seguridad Nacional. Manuel Becerra Ramírez, Agustín Carrillo Suárez, Juan Manuel Gómez-Robledo, Juan de Dios Gutiérrez Baylón y Ricardo Méndez Silva. Lunes 25, 12:00 horas. Auditorio Dr. Héctor Fix-Zamudio del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM. Circuito Mario de la Cueva s/n, Ciudad Universitaria. Informes: 5622 7474 ext. 1735.

Movimientos del voto y pronósticos electorales. Alejandro Moreno, Manuel Larroza, Esperanza Palma y Héctor Zamitiz y Marcela Bravo Ahuja. Jueves 28, 11:00 horas. Sala Lucio Mendieta de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales. Informes: 5622 9470 ext. 1050.

¿Seguiremos alimentándonos de nuestros maíces criollos? Propuestas ante los grandes retos. Elena Lazos, Carmen Morales Valderrama, Dulce Espinosa y Antonio Hernández. Jueves 28, 18:00 horas. Casa de Universitaria del Libro de la UAM. Orizaba 24, Roma. Informes: 5207 9390.

Museos

Museo Memoria y Tolerancia. Apertura al público del centro que busca difundir la importancia de la tolerancia, la diversidad y el respeto a los derechos humanos a través de la memoria histórica. Plaza Juárez, frente al Hemiciclo a Juárez. Centro Histórico. Informes: 5130 5555.

Presentaciones

Tabasco. Historia de las instituciones jurídicas de Jesús Piña Gutiérrez. Senado de la República. Martes 26, 10:00 horas. Xicoténcatl 9, Centro Histórico. Informes: 5345 3000 ext. 5237.

Veracruz. Historia de las instituciones jurídicas de Eduardo Andrade y Salvador Valencia Carmona. Senado de la República. Martes 26, 10:00 horas. Xicoténcatl 9, Centro Histórico. Informes: 5345 3000 ext. 5237.

Las elecciones en el siglo XX en México, Las elecciones y el gobierno representativo en México (1810-1910) y 20 años del IFE. Instituto Federal Electoral. Martes 26, 17:00 horas. Auditorio del IFE. Viaducto Tlalpan 100, Arenal Tepepan. Informes: 01 800 433 2000.

La sociedad sin relato de Néstor García Canclini. Katz Ediciones. Carlos Amorales, Eduardo Nivón, Nelly Richard, Osvaldo Sánchez y el autor. Martes 26, 19:00 horas. Galería Metropolitana de la UAM. Medellín 28, Roma. Informes: 5483 4093.

Actuar sobre el futuro: romper la transmisión intergeneracional de la desigualdad coordinado por Isidro Soloaga. Colmex. Rodolfo de la Torre, Enrique Cárdenas, Rolando Cordera y Gonzalo Hernández-Licona. Miércoles 27, 9:30 horas. Sala Alfonso Reyes de El Colegio de México. Camino al Ajusco 20. Magdalena Contreras. Informes: 5202 9694.

Guanajuato. Historia de las instituciones jurídicas de Carlos Armando Preciado de Alba. Senado de la República. Miércoles 27, 10:00 horas. Xicoténcatl 9, Centro Histórico. Informes: 5345 3000 ext. 5237.

A la Sombra del Ángel de Kathryn Blair. Santillana. Viernes 29, 11:30 horas. Sala de Alta Dirección del Tecnológico de Monterrey Campus estado de México. Carretera Lago de Guadalupe Km. 3.5, Atizapán de Zaragoza. Informes: 5864 5555 ext. 2028.

Perspectivas migratorias: Un análisis interdisciplinario de la migración internacional editado por Jorge A. Schiavon Uriegas y Jorge Durand Arp Nisen. Viernes 29, 11:30 horas. Auditorio Cuajimalpa del CIDE. Carretera México-Toluca 3655, Lomas de Santa Fe. Informes: 5727 9800 ext. 2118.

Revistas

Confluencia XXI. No. 11. Publicación del PRI. Análisis de las instituciones y fenómenos resultantes de la Revolución Mexicana. Guadalupe Rivera Marín, Rogelio Hernández, Yolanda Rodríguez, Juan Oropeza Garnica, entre otros.

Cuartoscuro. No. 104. Registro fotográfico de Hugo Brehme durante la Revolución Mexicana. Trabajo del fotoperiodista Alejandro Cossío con el que ganó el premio de la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano.

Zócalo. No. 128. Análisis de la televisión en México a seis décadas de su nacimiento. Privilegios, rezagos, regularización y acciones pendientes. Raúl Trejo Delarbre, Patricia Ortega Ramírez, Gabriel Sosa Plata, entre otros.

Seminarios

Seminario Interinstitucional de Historia Económica. Pablo Martín-Aceña y Carlos Marichal. Lunes 25, 17:00 horas. Salón 2247 de El Colegio de México. Camino Al Ajusco 20, Pedregal De Santa Teresa. Informes: 5449 3000.

Derecho y poesía: justicia y valor. Diego Valadés, Ricardo Valero, Francisco Ibarra, Daniel Márquez, Jaime Labastida, entre otros. Miércoles 27 y jueves 28, 10:00 horas. Auditorio Dr. Héctor Fix-Zamudio del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM. Informes: 5622 7474 ext. 1735.

La interconexión en México. Mony de Swaan y especialistas de Brasil, Chile, Estados Unidos e India. Miércoles 27, 9:30 horas. Sala 3 del Centro de Información Bibliotecario del CIDE. Informes: 5727 9800.

Los derechos humanos ante el siglo XXI: la paradoja de Nüremberg. Jorge Mario Magallón, Jorge Alberto González Galván, Enrique Díaz Aranda, Eduardo Ferrer y Ricardo Méndez. Viernes 29, 10:00 horas. Aula de Seminarios Dr. Guillermo F. Margadant del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM. Informes: 5622 7474 ext. 1735.

Si desea difundir alguna actividad de cultura política, comuníquese al 5628 7245 correo electrónico: enfoque@reforma.com

Los placeres y los días / Del arte y la política

Andrés de Luna

(24 octubre 2010).- El arte y la política a veces terminan por confrontarse. El homus politicus aparece por doquier, está en la clase trabajadora, en los intelectuales o en los creadores. Muchas condenas han merecido los colaboracionistas franceses como Louis Ferdinand Celine o Pierre Drieu La Rochelle; sin olvidar el paso por el nazismo de Heidegger, Mircea Eliade, José Vasconcelos, el Doctor Atl; o el papel, extraño por cierto, de Diego Rivera en su calidad de informante de las actividades de artistas mexicanos ligados al nacionalsocialismo ante la embajada de Estados Unidos. Ahora, en el caso del más reciente premio Nobel de Literatura, el peruano Mario Vargas Llosa, de pronto surgen voces airadas por considerarlo un representante de la derecha.

Cierto es que las posturas políticas del autor de Conversación en la catedral podrían desconcertar. ¿Cómo un hombre de su inteligencia y su talento supondría como necesaria la invasión a Irak por parte de Estados Unidos, Inglaterra y España? Él decía en su célebre reportaje Diario de Irak (2003), que: "la destrucción de la dictadura de Sadam Hussein, una de las crueles, corruptas y vesánicas de la historia moderna, era una razón de por sí suficiente para justificar la intervención. Como se hubiera justificado una acción preventiva de los países democráticos contra Hitler y su régimen antes de que el nazismo precipitara al mundo en el Apocalipsis de la Segunda Guerra Mundial".

Vargas Llosa emplea la retórica del "hombre civilizado"; una estrategia que vacuna el discurso político en aras de las bienaventuranzas de una supuesta voluntad bienhechora. Esto se nota en ese reportaje y en muchos de sus textos sobre el mundo actual. La otra parte de su trabajo, la que en realidad es fuera de serie -por ello es y ha sido desde hace muchos años el mejor escritor de América Latina-, consiste en su extraordinaria capacidad para involucrarse lo mismo en los temas del militarismo que en las dictaduras; la literatura es su elemento y en él se mueve con agudeza sin par. ¿Quién podría cuestionar esas novelas excepcionales que integran la bibliografía del gran prosista peruano? Arte y política establecen contradicciones, a veces insalvables, lo importante es devolver a su cauce lo que vaya por una vía u otra. La derecha a veces juega a la ambigüedad civilizada, nada importa. Lo esencial debe construirse en la consistencia de las obras, y eso lo consigue Vargas Llosa sin más.