domingo, 27 de junio de 2010

Acontecer Diario


Carmen Lila Romero / Luis Alberto García

Sucesos y Sucedidos

SÍNTESIS PERIODÍSTICA ®

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Domingo 27 de junio de 2010

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SUPLEMENTO “ENFOQUE” DEL REFORMA

Colaborador Invitado / La reforma que necesita el DF

La reforma política del Distrito Federal debe reconocer su papel de capital y dotarla de elementos básicos para su desarrollo

Colaborador Invitado

(27 junio 2010).- Mario Delgado Carrillo

Secretario de Finanzas del Distrito Federal.

La Ciudad de México ha sido y sigue siendo política y económicamente el centro estratégico de nuestro país. En ella se ubican las sedes de los tres Poderes de la Unión, así como la generación más significativa del Producto Interno Bruto del territorio nacional. Se trata del principal polo generador de riqueza económica, cultural y social.

El Distrito Federal, como las demás capitales del mundo, ofrece servicios que no solamente benefician a sus residentes, sino también a los ciudadanos del resto del país. Sin embargo, no se ha comprendido el papel estratégico que tiene la Ciudad de México para el presente y el futuro del país. Lejos de ello, en los últimos años la Federación ha dejado de apoyar su desarrollo.

Una capital segura, limpia, con una economía dinámica, inmuebles históricos conservados y con servicios públicos aceptables es un activo para la nación entera; a este fenómeno se denomina capitalidad. Es por eso que en muchos países las ciudades capitales reciben transferencias especiales para compensar dichos gastos. Berlín, Berna y Bruselas, por citar algunos ejemplos, reciben compensaciones federales para pagar servicios específicos como el transporte público, para el mantenimiento de espacios o para desarrollar actividades culturales.

Una muestra de los costos inherentes a ser ciudad capital es el hecho de que buena parte de los inmuebles del gobierno federal y de las representaciones internacionales aquí domiciliadas no pagan el impuesto predial. Para dimensionar el problema, la Ciudad de México es sede de más de 80 embajadas, alrededor de 150 inmuebles federales, las sedes nacionales de los partidos políticos y el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, que en su mayoría están exentos del referido impuesto. En países como Canadá y Bélgica las instituciones nacionales tampoco pagan este impuesto, pero a cambio existe un fondo compensatorio.

Son diversos los costos asociados a ser la capital del país. Otro buen ejemplo es el costo en que se incurre cuando se utiliza la fuerza policiaca local para cuidar embajadas, atender manifestaciones ciudadanas derivadas de conflictos atribuibles a dependencias federales o vigilar eventos cívicos de gran envergadura.

Aunado a lo anterior, hemos perdido de vista que la Ciudad de México es el principal activo que tenemos para participar en la competencia económica global entre ciudades. Es indispensable potenciar su desarrollo. Para decirlo con claridad, el crecimiento de la economía del Distrito Federal debe entenderse como precondición para recuperar el crecimiento económico de toda la nación. Lo anterior implica un esfuerzo fiscal compartido entre las autoridades locales y las de la Federación para no sólo mantener, sino incrementar su nivel de competitividad.

Es urgente detener la tendencia que priva en la actualidad, en donde la ciudad pierde cada vez más recursos. De unos años para acá se han aprobado fórmulas y arreglos en el ámbito federal que han soslayado la importancia y el carácter estratégico del Distrito Federal. El criterio poblacional se ha impuesto en la distribución de recursos, al tiempo que se han minimizado otros fenómenos como el de la conurbación.

Baste decir que por cada peso que aporta en este momento el Distrito Federal al pacto fiscal, recibe de vuelta 10 centavos; esto nos refleja con claridad el trato inequitativo del que es objeto la capital del país. Además, hace dos décadas obtenía alrededor del 20 por ciento de la recaudación federal participable, hoy en día, poco menos del 12 por ciento.

La caída sistemática de los ingresos federales que recibe el Distrito Federal no es benéfica para el país en su conjunto y afecta de manera importante sobretodo a las entidades vecinas, cuya economía se encuentra estrechamente vinculada con la capital. Esta situación no es sostenible, incluso para una entidad capaz de generar la mitad de sus ingresos; en poco tiempo puede derivar en un grave deterioro de los servicios y de la competitividad de la principal urbe, no sólo del país, sino del continente.

En este escenario urge avanzar en dos frentes; por un lado, darle a las autoridades de la Ciudad de México facultades plenas como sucede en el resto del país y, por el otro, reconocer el concepto de capitalidad. La reforma necesaria es la que tenga como fin último la comprensión del carácter estratégico de la capital para el futuro del país. En pocas palabras, es la hora de darle al Distrito Federal las condiciones plenas para potenciar su desarrollo.

La reforma política del Distrito Federal debe reconocer el concepto de la capitalidad, además de devolverle a la ciudad los elementos básicos para su desarrollo. La Ciudad de México exige derechos políticos iguales al del resto de las entidades federativas y plenos derechos económicos como capital de la República.

Twitter: @mario_delgadodf

Condenan uso electoral del gasto social

Lectores. Los ciberlectores de Enfoque

(27 junio 2010).- Reacciones al reportaje Programas sociales, arma electoral.

EXPERTOS

"Si en México hay deficiencias importantes en la protección de los programas sociales federales, en el ámbito local los problemas son mucho más severos. La manera caótica en la que se han generado procesos de transición democrática ha fortalecido a los gobernadores, que cuentan con mayores márgenes de maniobra no sólo en términos políticos sino económicos".

Enrique Valencia

Coordinador del Observatorio Social del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades.

"Desde 2005 documentamos que las prácticas más discrecionales en el uso de los recursos destinados a programas sociales se llevaban a cabo en el ámbito local, pero realmente no imaginábamos el desastre y el cinismo que presenciamos por parte de los gobiernos estatales de todos los partidos".

Clara Jusidman

Presidenta fundadora de Incide Social.

"¿Por qué hay ausencia de responsabilidades? Si bien a partir de la reforma de 2007 la Constitución establece en su artículo 134 que esos recursos deberán ser empleados con imparcialidad, lo cierto es que a la hora de hacer el Cofipe se establece qué puede ser sancionable, pero a los legisladores se les olvidó poner las sanciones".

Alfredo Figueroa

Consejero del IFE.

LECTORES

A este manejo impropio de los recursos agréguenle que el PRI está preparado con grupos paramilitares para el robo y quema de urnas, en caso de que la compra de votos no les funcione. Actúan con una total impunidad.

Miguel Ángel

Siendo tan ladrones los mexicanos no llegaremos al primer mundo nunca. Ya basta de robar y robar, pues lo que están haciendo es ¡robo!

Petra Perezs

SONDEO DE LA SEMANA

¿Quién abusa más del gasto social?

(53 respuestas)

Gobernadores del PRI

47%

Todos por igual

26%

Felipe Calderón y el PAN

23%

PRD y sus gobiernos

4%



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Oaxaca: camino al Tribunal

Reportaje Elecciones 2010. La cerrada contienda entre Gabino Cué y Eviel Pérez Magaña se está plagando de irregularidades y denuncias

Lourdes Morales Canales

(27 junio 2010).- A una semana de que se realice la elección en el sureño estado de Oaxaca, los partidos políticos que contienden para la gubernatura, las 42 diputaciones locales y las 152 presidencias municipales ya acumulan expedientes y despliegan un ejército de abogados para una elección que antes de iniciarse la jornada, ya ha sido impugnada ante instancias locales y federales.

Hasta el momento, la coalición Unidos por la Paz y el Progreso -integrada por el PAN, PRD, Convergencia y PT- ha tramitado 28 quejas ante el Consejo General del Instituto Estatal Electoral contra diversos actores políticos del Partido Revolucionario Institucional y del Partido Verde Ecologista, como el gobernador Ulises Ruiz, su esposa Lourdes Salinas y el ex dirigente local del tricolor Jorge Franco, por la violación a la normatividad electoral. También ha presentado tres recursos de apelación ante el Tribunal Estatal Electoral, y 15 juicios de revisión constitucional ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF). De igual forma, ha presentado dos denuncias penales en contra del gobernador ante la Fiscalía Especial para la Atención de los Delitos Electorales (FEPADE) de la PGR por su abierta intervención en el proceso electoral como coordinador informal de la campaña electoral del candidato priista, Eviel Pérez Magaña.

Por su parte, la Coalición por la Transformación de Oaxaca -integrada por el PRI y el PVEM- ha interpuesto 28 quejas ante el órgano electoral local, dos ante el Instituto Federal Electoral en contra del gobierno federal y ha presentado cinco denuncias penales ante la FEPADE en contra de Felipe Calderón Hinojosa, funcionarios de la Secretaría de Desarrollo Social, la primera dama, Margarita Zavala, y el secretario del Trabajo, Javier Lozano Alarcón. A diferencia de la coalición opositora, la alianza PRI-PVEM no ha presentado ningún caso ante el TEPJF.

A este variado menú de justicia electoral, se suman las descalificaciones mediáticas y los cuestionamientos sobre la falta de autonomía, transparencia e imparcialidad con la que los órganos electorales estatales han resuelto sobre casos específicos.

En primer lugar, destaca la intentona del IEE de no actualizar la lista nominal de electores y no insacular a los ciudadanos que fungirían como funcionarios de casilla. Infringiendo la ley, se pretendía insacular a los mismos ciudadanos del proceso electoral federal 2009 y, en su defecto, a los del proceso electoral local del 2007.

Ante esta irregularidad, la coalición opositora a través de Convergencia interpuso recursos locales y federales que concluyeron con la sentencia del TEPJF y la obligación de insacular a los ciudadanos y actualizar la lista electoral como manda la ley. "Con esta resolución se rompió un acuerdo político que durante 14 años funcionó en Oaxaca y que permitía que se insacularan a los mismos ciudadanos del proceso electoral anterior", explica Víctor Hugo Alejo Torres, representante de Convergencia ante el órgano electoral.

En segundo lugar, se impugnó la designación de consejeros en los 25 distritos electorales porque varios no habían sido renovados en los últimos 6 años y porque no se cumplía con el procedimiento. Una vez más se interpuso un recurso, el cual fue acatado por el órgano electoral, pero sólo a medias, ya que a pesar de que el TEPJF ordenó al Consejo General la reposición del procedimiento de selección de candidatos a presidentes, secretarios, consejeros electorales propietarios y suplentes de los 25 consejos distritales electorales, los designados fueron nuevamente los mismos consejeros impugnados.

Licitaciones irregulares

En tercer lugar, destacan los controvertidos casos de las licitaciones y adjudicaciones a cargo de la Junta General Ejecutiva que, a través del Comité de Adquisiciones, concluyeron con la firma de contratos por 82 millones 843 mil pesos. Efectivamente, los contratos asignados a cuatro empresas para la elaboración de material electoral, impresión de boletas electorales, actas y documentación electoral, servicio de monitoreo general en las estaciones de radio y televisión, además del Programa de Resultados Preliminares (PREP), fueron impugnados ante el TEPJF por la falta de certeza, información y transparencia en el proceso de "licitación", que resultó ser una adjudicación directa.

Las empresas son: a) Verificación y Monitoreo, a la que se le asignó un contrato por 13 millones 918 mil pesos; b) Diseño, Reconstrucción y Comunicación, con un contrato de 39 millones 810 mil pesos para la elaboración de mamparas y urnas; c) Litho Formas, cuyo representante legal firmó contrato por 12 millones 875 mil pesos y d) Grupo Prosi, contrato por 16 millones 240 mil pesos para el manejo del PREP.

Las presiones mediáticas y jurídicas de la coalición opositora (recurso SUP-JRC-121/2010) obligaron a Othoniel Pérez Montor, director general del órgano electoral, a dar un informe sobre el procedimiento de licitación; sin embargo, en éste no se brindan antecedentes de las empresas contratadas, no se habla de las bases de la licitación ni se tienen copias de los contratos firmados. Lo que es más, al momento en el cual se rindió el informe (10 de mayo del 2010) el órgano electoral ya había entregado el 50 por ciento de anticipo a las empresas ganadoras.

Esto llevó a que, una vez más, la coalición opositora en voz solitaria de Convergencia interpusiera un recurso en contra del informe para obtener el expediente técnico de las empresas ganadoras. Según consta en el expediente del juicio de revisión constitucional SUP-JRC-124/2010, el 10 de abril del 2010 la Junta General Ejecutiva del Instituto Electoral se negó a dar las bases de la licitación y ante el recurso de apelación RA/08/2010 interpuesto ante el tribunal electoral de Oaxaca, el órgano se declaró "incompetente" para conocer y resolver el medio de impugnación interpuesto. Por ello el recurso SUP-JRC-121/2010 dictó sentencia y dio origen al raquítico informe del director, el cual fue impugnado. Debido al tiempo que faltaba para la realización de la elección, Convergencia acudió directamente al TEPJF (vía per saltum) para así garantizar una resolución a tiempo. Sin embargo, y a pesar de los antecedentes en este proceso, el TEPJF decidió que debían de agotarse las instancias locales regresando el caso al órgano local. Al recibirlo, el órgano local declaró el caso infundado y sobreseído (desistido).

Esto se decretó aun cuando en las "licitaciones" sólo las empresas ganadoras se inscribieron al concurso. No se tomaron en cuenta anomalías que siembran de opacidad el proceso electoral, como lo es el caso de Verificación y Monitoreo, empresa que ha sido sancionada anteriormente por inconsistencias en su trabajo. A pesar de esto, el tribunal local expone: "si bien en cada procedimiento fue sólo una empresa la que reunió los requisitos previstos en las bases, ello no implica que tuvieran que declarase desiertas tales licitaciones, tampoco el órgano podía subsanar tales requisitos para así contar con diferentes ofertas y poder seleccionar la más conveniente en cuanto al precio, calidad, financiamiento y oportunidad".

Con esta sentencia, y buscando garantías, Convergencia regresó al TEPJF (SUP-JRC-182/2010) pero esta vez por supuesta falta de pruebas y por supuestas lagunas jurídicas en la legislación oaxaqueña, el órgano electoral fue validando uno a uno los argumentos del tribunal estatal, confirmando así la sentencia del órgano local y cerrando la puerta definitivamente a cualquier posibilidad de transparentar el proceso de licitaciones. Para Alejo Torres, promovente del juicio, "el Tribunal simplemente no quiso entrarle al fondo del asunto".

Presión desde el centro

Todos estos hechos aunados a la difusión pública de la grabación ilegal de la conversación entre el gobernador Ulises Ruiz y el presidente del Instituto Electoral, José Luis Echeverría Morales, ensombrecen más el proceso. A dos semanas de las elecciones, llegaron a Oaxaca el senador perredista Graco Ramírez y el diputado panista Javier Corral, que fueron acreditados ante el órgano electoral local. Estos personajes vinieron a sustituir a Dagoberto Carreño del PAN y Antonio Álvarez Martínez del PRD, quienes durante el escándalo por las licitaciones no secundaron la postura de Convergencia. La llegada de los enviados de las dirigencias nacionales del PRD y el PAN implicó, además, un último intento por empujar el primer debate entre candidatos a gobernador y la solicitud de renuncia del consejero presidente.

El representante del PRI ante el IEE, Elías Cortés, califica estos casos como "ruidos en la prensa". Tranquilo y sonriente, asegura: "podrán presentar todas las denuncias en contra de quienes consideren infringieron la ley, pero si no acreditan ni la intervención del gobierno del estado ni la participación ilícita de los funcionarios, ni la infracción a la ley, simple y sencillamente ésos son lucimientos personales".

Para Cortés, quien ocupa la segunda posición en las plurinominales de la coalición PRI-PVEM, los tribunales ya decidieron sobre las licitaciones, por lo que es cosa juzgada.

Sin embargo, los cuestionamientos sobre la autonomía de los órganos electorales continúan y son apenas un ingrediente más de la complejidad de un proceso electoral que, en lugar de decidirse en las urnas y a través del voto ciudadano, se encamina a los tribunales para decidirse bajo la ley del mejor expediente.

Un proceso peculiar

Por primera vez en 24 años, en Oaxaca se elegirán gobernador, diputados y presidentes municipales durante la misma jornada electoral (salvo en los 418 municipios de usos y costumbres que suelen elegir sus autoridades municipales en otras fechas).

Esta particularidad, ordenada por la reforma constitucional del 2008 que obligó a los estados a homologar sus calendarios locales en un solo domingo electoral al año, revierte la medida que los regímenes priistas habían adoptado para, según ellos, garantizar gobernabilidad.

Todavía en 2007, con dos fechas electorales distintas, el PRI logró ganar los 11 distritos electorales locales y la mayoría de los municipios, con niveles de abstencionismo de más del 65 por ciento.

A diferencia de los procesos electorales federales, en Oaxaca persisten algunas peculiaridades: se limita la observación electoral, se prohíbe la figura de visitantes extranjeros, se pusieron candados al recuento voto por voto -al exigir que haya menos del 1 por ciento de diferencia entre partidos para abrir las urnas- y se roba una hora a los electores para emitir su sufragio, al ordenar el cierre de casillas a las cinco de la tarde en lugar de a las seis.

Lourdes Morales.

La historia del 2004

Hace seis años, las elecciones de gobernador fueron impugnadas por la intervención de José Murat en el proceso.

Agosto 1o. Compiten por la gubernatura los candidatos Ulises Ruiz (PRI-PT-PVEM), Gabino Cué (PRD-PAN-Convergencia), y Héctor Sánchez (Partido Unidad Popular).

Agosto 8. El Instituto Estatal Electoral declara gobernador al priista Ulises Ruiz con el 47.2% de los votos emitidos.

La coalición opositora inicia la lucha postelectoral e impugna ante el Tribunal Estatal Electoral entre 800 y 900 casillas por diversas irregularidades, buscando revertir el resultado.

Septiembre 2. La coalición presenta dos recursos de revisión ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, pidiendo la anulación de los comicios por "fraude genérico". Se acusa al entonces gobernador, José Murat, de intervenir abiertamente en el proceso electoral y beneficiar con recursos públicos al priista Ulises Ruiz.

Octubre 3. En pleno conflicto postelectoral, Oaxaca vuelve a las urnas para elegir 152 presidentes municipales. Nuevas denuncias de fraude, conflictos y violencia especialmente en la región del Istmo.

Noviembre 17. El TEPJF desecha el recurso de la coalición y ratifica el triunfo de Ulises Ruiz.

Diciembre 1o. Ulises Ruiz toma posesión como gobernador de Oaxaca.

La cuna olvidada de Ulises Ruiz

Reportaje Elecciones 2010. El municipio donde nació el actual gobernador es un retrato del Oaxaca actual: retraso, marginación, falta de empleo, obras inconclusas, expulsión de habitantes, conflictos ejidales, nepotismo, abusos y manipulación política

Karla Garduño Morán

(27 junio 2010).- Como otros mil 430 pobladores del municipio de Chalcatongo de Hidalgo, Ramos Nicolás decidió apoyar a Ulises Ruiz en el 2004 para que llegara a la gubernatura de Oaxaca. Pensaba que por ser paisano del pueblo Ruiz podría traerles beneficios, pero seis años después está decepcionado.

Con su esposa y cinco hijos, Nicolás volvió a Chalcatongo en el 2001, luego de pasar 20 años en el Distrito Federal sin conseguir un nivel de vida digno. En su pueblo natal decidió invertir para montar una pastelería y un restaurante de mariscos que abre sólo en temporada alta; pero en lugar de prosperar, hoy se queja de que cada vez trabaja más y gana menos.

"No digo que nos hagamos ricos, pero por lo menos que nos mantengamos bien", apunta Nicolás, quien no ha podido terminar de fincar su casa porque en su terreno hay dos postes de alta tensión que nadie le sabe decir cuándo podrían mover.

Con Ulises Ruiz en la gubernatura y su prima Guadalupe en la presidencia municipal desde hace tres años, Chalcatongo ha dado más pasos para atrás que para adelante: desde hace dos años no hay agua corriente, la plaza principal es intransitable porque está en plena reconstrucción -apenas seis años después de su última intervención-, la presencia de oficinas ministeriales y de tránsito ha incrementado la delincuencia y los conflictos ejidales que tienen desde 100 años la comunidad de Reforma y el municipio de Santo Domingo Ixcatlán, se han intensificado.

"Ulises nunca se ha preocupado por nosotros. El PRI dice que Chalcatongo es grande, pero es grande gracias a la gente que salió fuera a aprender cosas, a sufrir, a que lo traten mal en Estados Unidos, en distintas partes de la República Mexicana; pero aquí nunca ha venido el gobierno a decir 'yo te voy a proporcionar esto para que tú trabajes'", afirma Nicolás.

En su campaña para presidenta, Guadalupe Ruiz prometió pavimentar el centro, mejorar el sistema de agua potable, construir un nuevo mercado y apoyar la construcción del gran proyecto de Ulises en Chalcatongo: el campus de la Universidad Tecnológica de la Mixteca, a unos kilómetros del centro; pero antes de cumplir sus promesas pidió licencia para contender como suplente a la diputación local en la elección del próximo 4 de julio.

Los trabajos en la red de agua potable han sido fallidos y en lugar de llegar más lejos, los habitantes del centro que ya contaban con el líquido en su casa ahora no lo tienen. Se construyó el nuevo mercado luego de un año y con las aportaciones de los locatarios, pero muchos comerciantes no se quieren meter ahí porque no hay agua y las ventas son escasas. En la plaza principal se derrumbó el kiosco hace menos de un año y se trabaja a marchas forzadas en un nuevo diseño del espacio, a pesar de que apenas en 2004 se había remozado. También en el campus de la universidad, que tendría que haber estado listo el año pasado, los trabajadores intentan terminar a tiempo para que el gobernador pueda inaugurarlo, pero parece difícil que esté completo antes de diciembre.

De las calles del centro nada más se pavimentó una y se está terminando la que lleva a la secundaria técnica, pero lo que sí quedó listo fue la ampliación de la presidencia municipal, donde se albergan algunas oficinas nuevas como el Ministerio Público y la Dirección de Tránsito.

"Debido a Tránsito ya no viene mucha gente que, por ejemplo, andan sin licencia. Hay unos tipos que ni son de aquí y que nomás andan señalando cuáles carros andan chuecos para que los agarre Tránsito. Un particular compró una grúa y se apropió del negocio de llevarse los coches", lamenta Nicolás.

Pero la decepción que se han llevado con los Ruiz no significa que en Chalcatongo lleve ventaja el candidato de la coalición PAN-PRD-PT-Convergencia, Filemón López Ruiz, un profesor del municipio de San Juan Mixtepec -comunidad ubicada a más de tres horas de Chalcatongo- y al cual poca gente conoce.

En cambio, las mantas de Yahir Hernández Quiroz, el candidato del tricolor, cuelgan por todos lados: carros, casas, tiendas y hasta cubetas tienen calcomanías con el nombre del abanderado priista, acompañando al de Eviel, el aspirante a la gubernatura.

Nada está escrito en Chalcatongo, donde en los últimos 15 años el PRD disputa el poder al PRI. En 1996 Roberto Jiménez se convirtió en el primer alcalde perredista y fue hasta el 2002 que volvió al tricolor de la mano Ysidoro Jiménez, el cual cedió el poder al partido del sol azteca nuevamente en 2005, con Abel Nicolás.

El PRI volvió con la actual alcaldesa, que llevó el apellido Ruiz de nuevo a la presidencia municipal luego de 30 años de ausencia. Pero hay un factor común une a los últimos cuatro alcaldes: todos han sido profesores.

"Yo pienso que hay que tirarle a otra cosa. Chalcatongo ya no está tan mediocre para estar con maestros, tienen un nivel muy limitado", afirma Nicolás.

La herencia de los Ruiz

La fama de Ulises Ruiz en Chalcatongo, sea buena o mala, compite con la de otros personajes de su familia.

Al gobernador se le conoce por el cargo que ocupa, pero su presencia en el pueblo ha sido escasa. Nadie sabe exactamente cuándo, pero antes de que cumpliera cinco años, Ulises ya había partido con su padre Cutberto y su madre Juventina Ortiz a vivir a Juchitán, en la región del Istmo oaxaqueño. Allá cursó la educación básica y luego se fue a la Ciudad de México, donde arrancó su carrera política.

En cambio, todos en Chalcatongo saben quién fue Odilón Ruiz, su abuelo, quien falleció en 1967. Más conocido como Tatalón, fue el cacique del pueblo durante varias décadas. Cuando no ocupaba la presidencia designaba a su sucesor y ejercía tal influencia sobre los pobladores que lejos de odiarlo se sometían a sus designios, según cuentan algunos ancianos originarios de Chalcatongo.

Para continuar su "herencia", Héctor, Romeo y Flavio, primos hermanos del gobernador, formaron su grupo tropical bajo el nombre de Los Kasikes y con el cual han tenido un considerable éxito entre la comunidad latina de Estados Unidos.

En diciembre del 2009 falleció Aarón Ruiz Daza y una multitud -incluido su sobrino Ulises- asistió a su funeral; se trataba del líder transportista de la región mixteca que también fue presidente municipal de 1972 a 1974.

Así, poco a poco, los Ruiz se han ido de Chalcatongo. Una de las fincas de la familia, en pleno centro del pueblo, se conserva como un símbolo de esa presencia: en perfecto estado y de manera imponente, la "Casa Ruiz Daza" se encuentra en pie pero abandonada, y luce en su fachada una manta enorme de Eviel Pérez Magaña. Sin embargo, Ruiz sigue siendo uno de los apellidos más comunes en el pueblo, compitiendo de cerca con Nicolás y Cortés.

Los hijos pródigos

En Chalcatongo, como en casi todos los pueblos de la mixteca, es común ver pequeñas empresas transportistas que hacen viajes directos a ciudades del norte como Mexicali, Tijuana, Los Mochis o Culiacán, aunque la mayoría de los migrantes de esta región están en la Ciudad de México.

Según las estadísticas del Instituto Oaxaqueño de Atención al Migrante, el distrito de Tlaxiaco, al que pertenece Chalcatongo, es el que tiene el mayor nivel de migración en la mixteca (23 por ciento de la población), la zona con más migrantes de Oaxaca.

De los 74 mil 406 habitantes del distrito que en el 2005 estaban fuera de sus pueblos, 22 mil 545 se fueron a la Ciudad de México, 17 mil 336 a Estados Unidos y el resto a otras ciudades de la República Mexicana o del mismo Oaxaca.

Las cifras podrían variar mucho tras el censo de este año y por lo que se puede ver en lugares como Chalcatongo, donde muchas familias están regresando, a veces con recursos para abrir un comercio o para unirse a otros parientes a trabajar la tierra.

Victoria Jiménez y su familia -esposo y dos hijos- son de los recién llegados. Apenas hace siete meses vivían en Tlaxiaco, a hora y media de Chalcatongo, pero con su sueldo de profesor a su marido ya no le alcanzaba para sostener a la familia y no podían acceder a los programas sociales porque su casa era de concreto.

Decidieron volver al pueblo, donde los padres de él tienen terrenos en la comunidad de Abasolo y ahí trabajan en el campo: cultivan maíz para su propio consumo y crían guajolotes, borregos, gallinas y puercos que matan para ir a vender carnitas al tianguis del jueves en el centro del pueblo.

Victoria cuenta que, como ellos, en la primaria de Abasolo, a donde acude su hijo de 7 años, hay unas 40 familias recién llegadas de diferentes ciudades, quienes optaron por la vida del campo aunque en la escuela sus hijos no tengan clases todos los días debido a las ausencias constantes de los maestros que van a apoyar el movimiento magisterial en la capital del estado.

También Efraín Quiroz y su esposa volvieron desde hace seis años. Pusieron una tienda de ropa en el centro y también trabajan la tierra, pero sus hijos se quedaron en el Distrito Federal con sus nietos, porque mudarse a Chalcatongo implicaba sacrificar en la calidad de la educación.

Oaxaca es una de las entidades con mayor índice de analfabetismo (6.5 por ciento de la población), sólo por encima de Chiapas y Guerrero, y en Chalcatongo el 21.7 de la población no sabe leer ni escribir, según datos del 2005. Existen 20 primarias en el municipio, pero sólo cinco secundarias y una sola opción de bachillerato.

A pesar de que el gobierno del estado invirtió unos 100 millones de pesos en la construcción de la universidad y de que Ulises Ruiz ha hecho varias giras de trabajo para supervisar las obras, los habitantes de Chalcatongo todavía no saben si estarán en posibilidades de acceder a ella.

El pueblo es el campo

En Chalcatongo no hay empleos. En 2005, según las cifras del conteo del INEGI, 91.98 por ciento de los habitantes no eran derechohabientes y las cosas no han cambiado desde entonces: no hay ninguna clínica del Seguro Social, los que tienen negocios los atienden ellos mismos o sus familiares y la gran mayoría vive de la tierra: cultivan maíz y crían algunos animales que son moneda de cambio en el tianguis de los jueves, donde todavía se practica el trueque.

No hay que caminar más de cuatro cuadras alrededor del centro del pueblo para llegar a los pequeños lotes con sembradíos y algunas aves de corral. El que puede tiene un par de bueyes para arrastrar el arado y ganado para producir lácteos o carne que le dan mayores posibilidades de comerciar.

Los datos del 2001 de la Sagarpa -los más recientes disponibles- señalan que de 15 mil 200 ejidatarios en el municipio, 12 mil 200 tienen parcelas individuales; sin embargo, los apoyos que reciben son escasos. Para la temporada primavera-verano 2010 de Procampo, hay 773 beneficiados en Chalcatongo por un total de 2 millones de pesos mensuales que benefician mil 569 hectáreas, de las 6 mil 320 dedicadas a la agricultura en el municipio.

Daniel Quiroz y su esposa Silvia Cortés son de esos beneficiarios. Tienen apenas una hectárea por la que les dan mil 300 pesos al mes, lo cual alcanza para fertilizante y otras necesidades. No tienen otra forma de obtener dinero en efectivo; sólo se dedican a cultivar la tierra que les prestan unos parientes, por lo cual el año que entra ya no podrán recibir el apoyo de Procampo y deberán recurrir a la venta de sus aves de corral para obtener el dinero que implica la educación de sus dos niños, quienes acuden a la primaria en el centro de Chalcatongo.

Este año, además, las heladas que cayeron el mes pasado afectaron su milpa y trabajan horas extras en el campo, quitando hierbas para que las plantas que no se quemaron puedan crecer sin problemas.

La cosecha de casi toda la población es para el autoconsumo. La guardan en tapancos de madera durante todo el año, preparan el nixtamal para hacer tortillas y otros productos de maíz y a veces lo intercambian con quienes cultivan frutas o avena.

No hay otra forma de vivir en el pueblo. Incluso quienes tienen comercios deben trabajar en el campo para completar sus ingresos, porque el 79 por ciento de las familias obtiene menos de dos salarios mínimos (unos 110 pesos diarios), lo cual no hace a la población de Chalcatongo una gran consumidora.

Los niños de la Secundaria Técnica Número 55, por ejemplo, gastan en la tienda de "doña Sabina" un promedio de cinco pesos. Asomados por la reja que divide el terreno de la escuela de la finca de la señora, le piden las frituras y las bebidas más baratas y se la piensan para ponerle 50 centavos de salsa.

Por eso y porque nunca falta el adolescente que intenta confundirla para llevarse más de lo que pagó, a Sabina Nicolás, de 77 años, no le alcanza para vivir con lo que le deja la tienda que atiende desde hace 15 años.

Cuando empiezan las clases y el flujo de compradores se detiene, la señora entra a ratos a su casa de láminas y trabaja en su milpa, donde le ayudan su hija, su yerno y algunos peones a los que les paga con la cosecha. Con eso, sin embargo, han logrado sostener los estudios de sus dos nietos.

El problema inacabable

Chalcatongo de Hidalgo tiene 18 comunidades, algunas tan cercanas que se confunden y otras tan alejadas que sus problemas hacen poco eco en el centro del municipio.

Reforma se encuentra a menos de dos horas al sur del centro de Chalcatongo y colinda con el municipio de Santo Domingo Ixcatlán, con el cual mantiene una disputa desde hace cerca de un siglo por mil 356 hectáreas con importantes recursos naturales y que ningún gobernador ha podido llevar a buen término.

Desde hace años, pobladores de uno y otro municipio han protagonizado actos de violencia en los que también intervienen hombres armados contratados, a pesar de que el 3 de agosto de 1998 el Tribunal Unitario Agrario de Huajuapan de León resolvió a favor de Ixcatlán.

El lunes 21 de junio -apenas dos semanas antes de los comicios- la tensión creció. Según versiones de Celso Medina, presidente del Comisariado de Bienes Comunales de Santo Domingo Ixcatlán, pobladores de Reforma entraron al paraje de La Paz e hirieron a un poblador.

Pero según Rigoberto Cortés, habitante de Reforma, fueron los de Ixcatlán quienes desde el fin de semana avanzaron con sus armas sobre las tierras de Chalcatongo atemorizando a la población.

A las 21:00 horas de ese mismo lunes, unos 50 habitantes de Reforma ya estaban en las puertas de la presidencia municipal de Chalcatongo exigiendo el apoyo de la policía en la comunidad.

Hombres y mujeres clamaban que el gobierno municipal hiciera caso del conflicto. "Nomás van a pedirnos nuestro voto, nos dan un abrazo y luego no nos hacen caso", grito una señora mientras el agente estatal de investigación, Jaime Martínez, intentaba llamar a las autoridades de Oaxaca para pedir la ayuda requerida.

A pesar de que se llevaron a Martínez a la comunidad como garantía, la presencia policial no llegó y tras la negociación con las autoridades lo dejaron ir más tarde.

En su segundo informe de gobierno, en 2006, Ulises Ruiz presumía que el problema entre ambas poblaciones estaba próximo a solucionarse, pero ni los habitantes de Ixcatlán, ni los de Chalcatongo, consideran que el gobierno estatal haya hecho algo por ellos.

A principios de junio Ruiz regresó a Chalcatongo, pero no para resolver este conflicto, inaugurar la universidad, entregar las calles pavimentadas que prometió o poner en marcha los proyectos productivos que reclaman sus paisanos. No. Regresó para encargarle a los priistas el apoyo a su candidato. "Quiero un chingo de votos para Eviel, ahí te lo encargo", dijo, según un video difundido el pasado 18 de junio.

Chalcatongo

Municipio de Chalcatongo de Hidalgo

· Comunidades: 18

· Población: 7,483 habitantes

· Analfabetas: 21.7%

· Sin instrucción escolar: 14.5%

· De lengua indígena: 43.14%

· Sin servicios de salud: 91.98%

· Hospitales: 1

· Unidades de salud: 9

· Primarias: 20

· Secundarias: 5

· Bachilleratos: 1

· Aportaciones federales: $10,638,201

· Aportaciones estatales: $5,263,885

El peso de Oaxaca

Oaxaca es el décimo estado más importante del país en cuanto al número de votos generados en las últimas elecciones federales (2009). En los comicios del 4 de julio próximo, es la quinta entidad con más votantes.

LISTA NOMINAL

2,501,639

ABSTENCIÓN

1,466,759

PRI

452,834

PAN

169,176

PRD

164,401

PVEM

55,995

PT

49,227

Nulos

46,759

Convergencia

45,384

PSD

22,108

Panal

15,754

NR

9,747

Salvemos México

3,495


NR= Candidatos No Registrados.

Fuente: IFE, resultados de las elecciones federales del 2009.





Bastión priista

Tradicionalmente, el PRI ha dominado esta entidad, salvo las elecciones presidenciales del 2006, cuando el PRD se convirtió en la primera fuerza política. Hoy, el dominio es tricolor.

PRI / Otros

Diputados federales de mayoría

11 / 11

Diputados federales de representación proporcional*

3 / 7

Senadores**

1 / 3

Diputados locales de mayoría relativa

25 / 25

Diputados locales de representación proporcional***

0 / 17

Presidentes municipales

88 / 152



Notas:

* Al haber ganado todos los distritos electorales a nivel federal, el PRI sólo tuvo derecho a tres de los diputados de representación proporcional.

** Elecciones efectuadas en el 2006.

*** Al haber ganado todos los distritos en las últimas elecciones locales (2007), el PRI obtuvo la mayoría absoluta en el Congreso local y no le fueron asignados diputados de representación proporcional.





Trayectoria electoral

Resultados en las últimas tres elecciones de gobernador efectuadas en Oaxaca.

PRI

PRD

PAN

PAN-PRD-Convergencia

1992

70.4%

9.4%

5.2%

1998

48.8%

37.4%

10.4%

2004

49.6%

44.6%



* Sólo se presentan las principales fuerzas.


TEPJF: presumir la culpabilidad

Análisis Elecciones 2010. En vez de aplicar la presunción de inocencia, en el caso Greg se optó por una suerte de presunción de culpabilidad. La sentencia sienta un riesgoso precedente. Con su sentencia sobre el caso Quintana Roo, el TEPJF ha sentado un riesgoso precedente, que no se limita al ámbito federal, sino que se extiende a los estados

Eduardo R. Huchim

(27 junio 2010).- El próximo domingo 4 de julio habrá en Quintana Roo elecciones para renovar gobernador y es previsible que el PRI obtenga un holgado triunfo, después de que la PGR eliminó al principal adversario del candidato priista Roberto Borge Angulo, al detener a Gregorio Greg Sánchez Martínez, postulado por la coalición integrada por el PRD, PT y Convergencia y a quien el juez Carlos Elorza Amores (Nayarit) le dictó auto de formal prisión y le suspendió sus derechos político-electorales.

En consecuencia, las autoridades electorales de esa entidad cancelaron el registro del candidato, lo cual fue impugnado por éste y la coalición que lo postulaba ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), que el pasado 11 de junio confirmó la anulación.

Al resolver de esa manera, el TEPJF dejó de tutelar los derechos políticos del ciudadano, se apartó del principio constitucional de presunción de inocencia y de tratados internacionales y abrió la puerta para que el encarcelamiento de un candidato, justificado o no, sea motivo suficiente para anular a ese aspirante. Sentó de ese modo un peligroso precedente.

Lo que debía estudiar y resolver el TEPJF -importa precisarlo-, no era si Sánchez es culpable o no de las acusaciones sobre vínculos con el narcotráfico que le formuló la PGR, sino si a un candidato a cargo de elección popular se le pueden suspender sus derechos político-electorales, cuando se dan las circunstancias del caso Quintana Roo.

Contradicción constitucional

Conviene tener presente lo que dicen dos artículos constitucionales de contenido contradictorio: el 20 establece en la fracción primera de su apartado B, que los acusados tienen derecho "a que se presuma su inocencia mientras no se declare su responsabilidad mediante sentencia emitida por el juez de la causa"; el 38 establece en su fracción II que los derechos o prerrogativas de los ciudadanos se suspenden "por estar sujeto a un proceso criminal por delito que merezca pena corporal, a contar desde la fecha del auto de formal prisión".

Tomar por definitivo un auto provisional que puede ser recurrido y con base en él decidir la suspensión de derechos políticos es un acto que riñe ostensiblemente con la presunción de inocencia. ¿Debe aceptarse literalmente la disposición del 38 constitucional, cuando resulta evidente que su permanencia se deriva de una omisión del Congreso al no armonizar debidamente la Constitución? Es claro que no debe hacerse tal cosa, y así lo interpretó el TEPJF cuando resolvió el caso de Martín Orozco Sandoval, candidato del PAN a la gubernatura de Aguascalientes, y ordenó a las autoridades locales otorgarle el registro que le habían negado.

En esa sentencia (engrose de Alejandro Luna Ramos, voto particular de Flavio Galván Rivera), el tribunal razonó que "... un auto de formal prisión, dictado por una autoridad judicial de primera instancia, es recurrible y por lo tanto no causa estado hasta en tanto la impugnación respectiva no sea resuelta por el tribunal ulterior o, en su caso, fenezca el término legalmente previsto para tal efecto, sin que se produzca impugnación alguna". Y añade: "el carácter provisional del auto de término constitucional se sustenta esencialmente en el principio de presunción de inocencia, base del proceso penal por disposición constitucional, según el cual, es indispensable el agotamiento de un proceso penal y la existencia de una sentencia condenatoria, definitiva e inatacable, para desvirtuar dicha presunción".

Siguiendo ese criterio, estaría claro que Greg Sánchez debió conservar sus derechos políticos y, por tanto, su candidatura, pues lo protege la presunción de inocencia, ya que no ha sido sentenciado, sino sólo sujeto a un proceso penal. Sin embargo, los casos son distintos, y una diferencia esencial es que Martín Orozco estaba en libertad aunque pesaba sobre él un auto de formal prisión y Greg Sánchez no lo está, aparte de que éste afronta cargos por delitos graves y Orozco no.

En estricto sentido, esto no debería importar, ya que la Constitución no hace distingos (no establece que la presunción de inocencia es sólo para quienes gocen de libertad), pero el TEPJF sí lo hizo en la sentencia del caso Aguascalientes, pues sostuvo que en el artículo 20 constitucional "se reconoce en forma expresa el derecho fundamental de toda persona imputada a que se presuma su inocencia mientras no se declare su responsabilidad mediante sentencia emitida por el juez de la causa; lo cual implica, que mientras no sea condenado con una sentencia ejecutoria, por la cual se le prive de la libertad, ni se encuentre privado de su libertad personal, física o deambulatoria, al promovente no podrá negársele su derecho a participar como candidato". (Pese a lo erróneo, este señalamiento permite afirmar que, contra lo que pudiera parecer, no hay contradicción entre los argumentos sobre Aguascalientes y Quintana Roo).

Tres antecedentes

El caso de Greg no es igual al de Aguascalientes ni a ninguno otro reciente. Como señaló la presidenta del Tribunal, María del Carmen Alanís Figueroa, ponente del caso Quintana Roo, hay tres antecedentes de relieve sobre los derechos políticos:

a) José Gregorio Pedraza Longi, quien estando sujeto a proceso penal gozaba de libertad bajo caución. El TEPJF determinó que no existía un mandato que lo privara de la libertad y le impidiera materialmente ejercer los derechos constitucionales y, por tanto, no había razones para suspenderle su derecho a votar.

b) Un diputado electo a la actual legislatura del Congreso de la Unión, Julio César Godoy Toscano, se inconformó ante el TEPJF por la negativa de la Cámara de Diputados de tomarle la protesta por existir una orden de aprehensión y estar suspendido de sus derechos políticos por mandato judicial. El TEPJF confirmó la resolución de la Cámara porque Godoy estaba prófugo.

c) Martín Orozco Sandoval impugnó la negativa del Instituto Electoral de Aguascalientes para registrarlo como candidato a gobernador, debido a que afrontaba un auto de formal prisión por delitos no graves. El TEPJF ordenó el registro porque, si bien estaba sujeto a proceso penal, también gozaba de libertad caucional.

En otras palabras, el elemento determinante para confirmar la nulidad del registro de Greg Sánchez fue su reclusión en la cárcel. El TEPJF razonó que al no tener el beneficio de la libertad caucional, existía un impedimento insalvable de carácter jurídico y material para que Sánchez pudiera ser candidato y realizar una campaña.

Debilidades del expediente

La resolución del Tribunal es frágil y discutible por al menos las siguientes razones:

1. Presunción de inocencia inaplicada, pese a estar expresamente contenida en el artículo 20 constitucional y en diversos tratados internacionales.

2. El TEPJF resolvió conforme a una implícita e inconstitucional "presunción de culpabilidad". Tan en así que razonó que "en el supuesto de que (Greg Sánchez) obtuviera el triunfo, no le sería posible asumir su cargo". Es decir, el TEPJF presume implícitamente que el acusado es culpable, soslayando que el auto de formal prisión está recurrido y no es definitivo. Además, en el mismo terreno de hechos futuros de incierta realización, vale preguntar ¿y si el imputado es absuelto, cómo podría reparársele el daño que supone haberle arrebatado una candidatura?

3. Pena anticipada. Al acusado se le impuso una pena sin que su culpabilidad estuviera probada. En palabras del magistrado Manuel González Oropeza, el único que votó en contra de la resolución, "la suspensión de derechos políticos es una pena que se impone a un ciudadano que ya fue condenado por la comisión de un delito, no puede ser una medida cautelar o preventiva. Al ser una pena, debe estar prevista en la ley como tal, precisando los delitos que ameritan dicha pena y, en obvio de razones, la duración máxima por la que el juez competente puede imponerla". Es decir, es probable que Greg Sánchez sea culpable de uno o más delitos, pero tal cosa no está probada aún, pese a lo cual ya se le está castigando al suspendérsele sus derechos.

El precedente y el riesgo

Con su sentencia sobre el caso Quintana Roo, el TEPJF ha sentado un riesgoso precedente y, naturalmente, estoy pensando en el ilegal uso político de la PGR que se ha hecho evidente, por ejemplo, en Jalisco en 2006 y en Michoacán en 2009.

Pero el riesgo no se limita al ámbito federal, sino se extiende a los estados, donde es bien conocido el malsano incremento del poder de los gobernadores como resultado de la alternancia partidaria en la Presidencia de la República. Ante el poder sin controles de los ejecutivos estatales, ¿está muy lejana la detención arbitraria de candidatos a quienes se les quiera impedir llegar al poder a toda costa? Sin duda, no sería difícil lograr que se les dicte el "auto de formal prisión" que prevé el artículo 38 constitucional y, conforme al precedente de Quintana Roo, el TEPJF convalidaría la suspensión de los derechos políticos del aspirante detenido.

Se dirá que queda la vía del amparo, y es cierto, pero mientras éste se resuelve, la campaña puede terminar y esto causar un daño irreparable, lo mismo que el desprestigio que implica la aprehensión de un candidato.

Es claro que el descuidado Congreso de la Unión, que no armonizó las disposiciones constitucionales comentadas, debe legislar lo antes posible, pero por ahora es lamentable que el TEPJF haya resuelto el caso Quintana Roo con una visión estrecha que restringe en vez de expandir los derechos ciudadanos. Sin duda, los criterios establecidos en este caso satisfarán a juristas de criterio atrasado, pero el desarrollo de la democracia mexicana no necesita estrecheces sino miradas anchurosas de la ley, el derecho y la justicia. ¿Está el TEPJF a la altura de esa necesidad? Hasta ahora, la mayoría de los actuales magistrados han dado demasiadas pruebas de lo contrario.

El autor es periodista, escritor y ex consejero del IEDF. omnia08@gmail.com

Caso 'Greg' y sus antecedentes

Diferencias en cuatro casos recientes relacionados con la suspensión de derechos por estar sujeto a proceso penal.

Tipo de delito que se le imputa: GRAVE

Gregorio Greg Sánchez

Preso, sin derecho a libertad caucional

Juez penal dictó auto de formal prisión a Gregorio Sánchez por su presunta participación en:

· Delincuencia organizada.

· Delitos contra la salud.

· Operaciones con recursos de procedencia ilícita.

Tipo de delito que se le imputa: NO GRAVE

Martín Orozco

Libertad bajo caución

Tipo de delito que se le imputa: GRAVE

Julio César Godoy

Prófugo de la justicia

Tipo de delito que se le imputa: NO GRAVE

José G. Pedraza

Libertad bajo caución

Gregorio Greg Sánchez

Martín Orozco

Julio César Godoy

José G. Pedraza

Derecho político-electoral que reclamó ante el Tribunal

A hacer campaña, acceder y desempeñar el cargo

A ser votado

A tomar posesión

A Votar

Posibilidad de ejercerlo

No

No



Fuente: TEPJF.


La cultura política

(27 junio 2010).- Téngalo presente

Igualdad y desarrollo en México. Seminario organizado por la Cepal y la UNAM. Juan Pardinas, Diego Valadés, Marta Lamas, José del Val, entre otros. Lunes 28 y martes 29, 9:15 horas. Coordinación de Humanidades de la UNAM. Circuito Mario de la Cueva s/n. CU. Programa: http://bit.ly/bWyYta. Informes: 5263 9709.

Libros

Buenas intenciones, malos resultados. Política social, informalidad y crecimiento económico de Santiago Levy. Océano. Primera edición en español. Análisis de los efectos que tienen los programas de seguridad y protección social, en particular Progresa-Oportunidades, sobre la economía mexicana.

¿Cuál libertad? Diccionario mínimo contra los falsos liberales coordinado por Michelangelo Bovero. Océano. Un grupo de especialistas reflexiona sobre los usos y abusos del concepto de libertad, como respuesta a las corrientes culturales y políticas autodenominadas liberales.

El petróleo de México de Antonio Gershenson. Debate. Investigación sobre la industria petrolera, nacional e internacional, que aborda las políticas económicas que han impactado al sector energético.

Esclavas del poder de Lydia Cacho Ribeiro. Debate. Investigación periodística con testimonios de mujeres y niñas sobrevivientes de las redes mundiales de trata de personas, cuya protección y encubrimiento corren a cargo de servidores públicos. Mapa global que incluye a Estados Unidos, España, Inglaterra, Kyrgyzstan, Turkmenistán, India, Camboya, Tailandia y Japón.

Globalización y gobernanza: las transformaciones del Estado y sus implicaciones para el derecho público (contribución para una interpretación del caso de la Guardería ABC) de José María Serna de la Garza. UNAM. Análisis jurídico de la capacidad del Estado de brindar seguridad social. Versión electrónica en: http://bit.ly/9EyQ1p.

Impacto de la reforma penal en la jurisprudencia coordinado por Javier Dondé Matute. Inacipe. Análisis de la reforma penal realizada en junio del 2008 y la consecuente interpretación que hizo la Suprema Corte de Justicia de la Nación de los nuevos conceptos jurídicos y la redefinición de algunos ya existentes, como arraigo, intervención de comunicaciones, delincuencia organizada, prisión preventiva, entre otros.

La mafia que se adueñó de México... y el 2012 de Andrés Manuel López Obrador. Grijalbo. Texto que busca esclarecer las causas de la situación económica de México, cuya tesis afirma que 30 personajes se apoderaron de las instituciones públicas, los bienes y las riquezas del país. El grupo mencionado está conformado por 16 hombres de negocios, 11 políticos y 3 tecnócratas.

La primera familia: extorsión, venganza, muerte y el nacimiento de la mafia americana de Mike Dash. Debate. Ensayo sobre la primera familia del crimen organizado americano, nutrido de archivos desclasificados y entrevistas con los últimos supervivientes de la familia Morello-Terranova.

Las fuentes de legitimidad de la jurisdicción de Luigi Ferrajoli. Inacipe. Conferencia que cuestiona si el consenso popular es la única fuente de legitimidad de las decisiones públicas y cuáles son los límites de los parlamentos.

Un asesinato político de Tomás Tenorio Galindo. Grijalbo. Prólogo de Miguel Ángel Granados Chapa. Investigación sobre el homicidio de Armando Chavarría Barrera, líder del Congreso de Guerrero, quien recibió 10 balazos al salir de su casa el 20 de agosto de 2009.

Presentaciones

Libertad de expresión y derecho a la información de Fernando García Cordero. Ubijus. Héctor Fix Zamudio, Sergio García Ramírez, Cynthia Cárdenas, Miguel Ángel Mancera Espinoza. Auditorio Franco Sodi de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal. Jueves 1o. de julio, 18:00 horas. Niños Héroes 106, Doctores. Informes: 5345 5917 y 5919.

Revistas

AZ. No. 34. El órgano de difusión del SNTE dedica su número a la violencia y acoso en las escuelas. Escriben Milagros Figueroa Campos, Vanessa Maya Alvarado y Daniel Tapia Quintana, entre otros.

Universidades. No. 45. Juan Ramón de la Fuente y Eva Egron-Polak escriben sobre la necesidad de un cambio sistémico e institucional para construir la sociedad global del conocimiento. Jaqueline Peschard Mariscal aborda el derecho de acceso a la información y la universidad pública. Textos de Alma Herrera M. y Edith Soriano de Castro.

Si desea difundir alguna actividad de cultura política comuníquese al 5628 7245; correo: enfoque@reforma.com




REVISTA PROCESO 1756

Sinaloa: comicios con olor a narco
Jorge Carrasco Araizaga y J. Jesús Esquivel

El PRI y su disidencia vestida de oposición se disputan el gobierno de Sinaloa, que nunca ha estado fuera de la órbita tricolor. La ecuación es compleja en la entidad: un aspirante que despide un fuerte olor a narco es repudiado por sus viejos padrinos políticos; el otro, sin abandonar su militancia, obliga a varios grupos a rearmarse detrás de él a toda prisa. Pero hay más: Jesús Vizcarra Calderón, el priista, y Mario López Valdez, el opositor, no sólo contienden por el derecho a despachar desde Culiacán: se convertirán, se dice, en un experimento que definirá quién dentro del PRI tiene fuerza suficiente para buscar el camino a Los Pinos. Por lo demás, las huellas de una especie de narcoelección son muy similares a las de otros estados donde también habrá comicios.

CULIACÁN, SIN.- En las elecciones del domingo 4 de julio en Sinaloa el PRI competirá contra sí mismo. Con un candidato que lleva a cuestas la sombra del narcotráfico y un disidente que ahondó las divisiones en el Revolucionario Institucional de cara a la candidatura presidencial de 2012, ese partido se juega casi todo en un estado que siempre ha sido suyo.

Las elecciones para gobernador, 40 diputados locales y 18 alcaldías serán un laboratorio de los aspirantes a la candidatura presidencial priista, especialmente del gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto, pero también de la líder del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Elba Esther Gordillo.

Lo que hasta hace algunos meses se perfilaba como un triunfo más del PRI ante la debilidad del Partido Acción Nacional (PAN) y ante la presencia testimonial del PRD, el PT y Convergencia, terminará definiéndose por la capacidad de operación de las maquinarias partidistas y gubernamentales.

A una semana de la elección, hay un virtual empate entre el priista Jesús Vizcarra Calderón, candidato de la alianza Para Ayudar a la Gente –PRI, Nueva Alianza y Partido Verde– y el aún priista Mario López Valdez, Malova, candidato de la coalición opositora El Cambio es Ahora en Sinaloa, integrada por PAN, PRD y Convergencia.

Hasta el viernes 25, se difundía que López Valdez aventajaba con una diferencia de entre dos y ocho puntos porcentuales a Vizcarra. Pero había 18% de indecisos, esos que terminan por decidir una elección.

Una eventual derrota de Vizcarra dejaría al PRI fuera del control gubernamental, pues el candidato de ese partido al gobierno de la capital, Melesio Cuén Ojeda, es propuesta del elbista Nueva Alianza, que tiene reservados algunos de los primeros lugares en las listas plurinominales para el Congreso local.

Por si fuera poco, el segundo municipio del estado, Mazatlán, está asegurado por el PAN, cuyo aspirante Alejandro Higuera buscaba ser candidato a gobernador.

El panorama no es nada sencillo para el PRI. Vizcarra sólo tiene ventaja en el centro del estado, aunque Culiacán concentra más de la tercera parte de los votos. En el norte, de donde es originario Malova, tiene ventaja la coalición opositora. En el sur el PAN se ha hecho de una votación mayoritaria desde hace algunos años. No en balde Vizcarra arrancó su campaña en Mazatlán, en el sur.

El laberinto

La elección se complicó para el PRI desde que a finales del año pasado el exgobernador Juan S. Millán se opuso a la candidatura de su antiguo ahijado político, Jesús Vizcarra, y promovió a otra de sus hechuras, el senador con licencia Mario López Valdez, a quien hizo presidente municipal de Ahome entre 2001 y 2004.

En 2006, López Valdez fue compañero de fórmula del senador y excandidato presidencial del PRI, Francisco Labastida Ochoa. Dueño de la cadena ferretera Malova, el ahora candidato opositor quedó registrado con ese acrónimo con el aval del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, a pesar de tratarse de una marca comercial.

Las disputas entre las coaliciones por el uso del acrónimo derivaron en la quema de 7 millones de boletas impresas con restricciones en el uso de la marca comercial y en las que ya se habían gastado 2 millones 300 mil pesos.

En franco rompimiento con su sucesor, el gobernador Jesús Aguilar Padilla, Millán desató la confrontación en el partido al rechazar públicamente a Vizcarra, a quien llama traidor.

Juan Guerra Ochoa, representante del PRD en la coalición opositora y exdiputado federal, dice que Millán “no aceptaba la candidatura de Vizcarra más que querer la de Malova. Lo considera un traidor. Hay mucha gente en el PRI que cree que Aguilar Padilla debe preocuparse porque Vizcarra es tan ambicioso que no tarda en deshacerse de él. En su círculo cercano manejan que va para presidente. Ya se sueña allá”.

Durante su gobierno, de 1989 a 2004, Millán promovió a Vizcarra como empresario y político. Dueño del Grupo Viz, dedicado a la comercialización de carne y ganado pero cuyo desarrollo se le adjudica al supuesto lavado de dinero, Vizcarra fue, gracias a Millán, presidente del Consejo Nacional Agropecuario entre 2000 y 2002.

Millán intentó llevarlo hasta la presidencia del Consejo Coordinador Empresarial, pero cuando estaba en campaña, el entonces corresponsal de Proceso y columnista de El Noroeste, Ismael Bojórquez, reveló las relaciones de Vizcarra con el narcotraficante José Inés Calderón Quintero, su primo en cuarto grado asesinado en 1998.

Millán lo rescató del escándalo y en 2003, con el apoyo del entonces presidente Fox y su secretario de Agricultura y actual diputado federal, Javier Usabiaga, lo llevó al Congreso como diputado federal. Ahí fue presidente de la Comisión de Recursos Hidráulicos.

Vizcarra y Aguilar Padilla rompieron con Millán. En 2005, ya en el gobierno de su compadre y socio en el Grupo Viz, el ahora candidato a gobernador fue secretario de Desarrollo Económico. En 2008 pasó a la alcaldía de Culiacán, de donde salió para competir por el gobierno del estado.

El diputado federal panista por Sinaloa Manuel Clouthier Carrillo asegura que, en lugar de guardarle lealtad a Millán, Vizcarra se alió con Aguilar Padilla: “Buscó las relaciones con el futuro y Millán le representaba las relaciones con el pasado. Vizcarra y Aguilar Padilla sacaron a Millán de la jugada”.

La división en el PRI ya le costó la cárcel y el exilio a Luis Pérez, director de Gobierno de Millán y subsecretario de Gobierno de Aguilar Padilla. Durante nueve años tuvo en sus manos información política de inteligencia del gobierno del estado. A él se le atribuye la filtración de la fotografía de Vizcarra con los narcotraficantes Ismael El Mayo Zambada y su primo José Inés Calderón, tomada en los años ochenta.

En marzo pasado la PGR arraigó a Pérez acusado de lavado de dinero. La justicia federal lo liberó, pero el exfuncionario se fue del país, asegura Alejandro Higuera, candidato del PAN a la alcaldía de Mazatlán.

Los compadres

El mayor lastre de Vizcarra son sus alegadas relaciones con el narcotráfico (Proceso 1744). Primero con su primo y luego con El Mayo Zambada, con quien se le achaca una relación de compadrazgo que no se ha atrevido a negar. Ni siquiera en los debates con su opositor y menos ante los insistentes señalamientos del PAN en el Congreso, que en las sesiones recientes ha colocado letreros con la pregunta: “¿Y el compadre apá?”.

Aunque esa relación ha afectado su campaña, lo único que hizo Vizcarra fue sacar del estado a uno de sus hijos, el que presume ser ahijado del narcotraficante, uno de los jefes del cártel de Sinaloa.

“Todos sabemos que Jesús Vizcarra es compadre del Mayo. Sabemos que su hijo mayor es el ahijado. Tiene todavía una hija más grande. El mismo chamaco es el que lo dice y presume al padrino cada vez que se emborracha. Ya hubo necesidad de sacarlo del estado. Lo tienen en Guadalajara”, dice Manuel Clouthier en entrevista en Culiacán (Véase recuadro).

Desde su precampaña, Vizcarra ha sufrido otros golpes relacionados con la delincuencia organizada. El 22 de diciembre del año pasado fue asesinado el secretario de Turismo del estado, Antonio El Güero Ibarra, a quien la prensa local señala como lavador de dinero de José Inés Calderón y El Mayo Zambada.

La baja más reciente fue apenas el pasado lunes 14, cuando mataron a Enrique El Gallo Mendívil Flores, presidente de la Unión Ganadera Regional de Sinaloa y de la Federación de Propietarios Rurales de Sinaloa, y quien, además, figuraba en la lista de candidatos a regidores de la alcaldía de Culiacán por la coalición en la que participa el PRI.

Señalado también como pieza de El Mayo Zambada, El Gallo Mendívil, de 60 años, ya había sido regidor en la capital sinaloense durante la gestión municipal de Aarón Irízar López, ahora diputado federal del PRI y antecesor de Vizcarra en la presidencia municipal de Culiacán.

En el velorio de Mendívil estuvieron Aguilar Padilla, Vizcarra, la secretaria de Seguridad Pública del estado, Josefina García Ruiz, y los hermanos Cárdenas Fonseca, operadores políticos de Elba Esther Gordillo en Sinaloa, que además de candidatos a diputados plurinominales por el Panal están haciendo campaña por Jesús Vizcarra.

Ibarra y Mendívil eran no sólo operadores de Vizcarra, sino compadres del gobernador, en una muestra de lo que Clouthier califica de la “camarilla mafiosa” que gobierna Sinaloa, sin que el gobierno de Felipe Calderón haya querido actuar en su contra en su llamada “guerra” al narcotráfico. Aunque, a unos días de las elecciones, en la prensa opositora a Vizcarra, se promueve la idea de que puede ocurrir “un michoacanazo” en el entorno del candidato.

Pieza fundamental en la campaña de Vizcarra es el diputado federal Óscar Lara Aréchiga, quien durante 10 años fue el secretario de Administración y Finanzas con Millán y Aguilar Padilla, y que según Clouthier “le dio la dimensión de cuello blanco a la camarilla”.

En el caso de Peña Nieto, el diputado federal asegura que no sólo es aval de Vizcarra, sino que ha estado operando a través de su grupo Fuerza Mexiquense, que ya tuvo una presencia importante en el proceso federal pasado en Sinaloa, principalmente en Guasave, al norte, que registró una votación de 56%, muy por encima del 35% de los distritos urbanos de Mazatlán, Culiacán y Los Mochis.

Precisa que los contactos de Peña Nieto con Vizcarra son Eustaquio y José Ignacio de Nicolás, miembros del consejo del Grupo Homex, que se ha dedicado a la construcción de casas en el Estado de México.

Sobre la candidatura de Vizcarra pesa el mal desempeño de Aguilar Padilla. Las encuestas son unánimes en el rechazo a la gestión del gobernador, quien es visto más como socio y empleado de Vizcarra que como el jefe político de la entidad. Aunque la propia oposición le reconoce como trabajador y eficiente, que “da resultados”, como dice una de sus frases electorales, coincide también en sus rasgos autoritarios.

La decisión panista

Alejandro Higuera, candidato del PAN por tercera ocasión a la presidencia municipal de Mazatlán, era un fuerte aspirante al gobiero, uno de los candidatos naturales. Es el que más posiciones políticas ha ganado en las urnas: dos veces la diputación local, una vez la federal y dos veces el ayuntamiento de Mazatlán. Va por la tercera. Supera incluso a Millán, quien dos veces ha ganado como senador, una como diputado federal y una como gobernador.

Pero en las encuestas del PAN, Higuera estaba detrás del excandidato de ese partido al gobierno del estado y actual secretario de Desarrollo Social de Calderón, Heriberto Félix Guerra, quien hace seis años perdió por una diferencia de 1% contra Aguilar Padilla y que en esta ocasión no intentó contender.

Entrevistado el pasado miércoles en el puerto, en el sur de Sinaloa, Higuera asegura: “Aún se me enchina la piel de pensar que tuve que ceder la candidatura” a Malova, quien como priista fue un golpeador del PAN. “Yo vengo del viejo PAN. No soy neopanista. Hace más de 20 años que competí y gané para el partido. Por eso fue un trago muy duro para mí”.

Explica que fue el presidente del partido, César Nava, quien le pidió que renunciara. “Fue un trago muy duro. Me citaron con Nava y me hicieron ver que las encuestas me daban muy bien el sur. No tuve la capacidad económica para montarme en un aparato en todo el estado para crecer. Había un regionalismo muy claro. El norte con un peso enorme de Malova. El centro con Vizcarra y el sur por mí”.

Nava le pidió que buscara la alcaldía de Mazatlán por tercera vez. “No fue fácil para mí porque ya una vez, siendo el único diputado federal de mayoría por Sinaloa en la elección intermedia de Fox, en la que el PAN sufrió un colapso, yo traía el proyecto de ser senador. Pero a los 11 meses el partido me pidió que viniera a buscar la alcaldía. Y bueno, le hice caso. Esta vez lo hago de nuevo, porque creo que vale la pena”.

Integrante de un grupo de panistas que se opusieron públicamente a llevar a un candidato “porrista”, dice que López Valdez llegó a la candidatura del PAN con sus operadores del PRI y aun con algunos de Elba Esther Gordillo. “La maestra está jugando en varias pistas”, dice, y recuerda que la jefa del SNTE es cercana a Juan Millán, promotor del priista disidente.

Si en Culiacán Gordillo está con sus candidatos del Panal y apoya a Vizcarra, en el sur del estado, en el municipio de San Ignacio, limítrofe con Mazatlán, apoya como candidato de la alianza El Cambio es Ahora en Sinaloa al exdiputado federal priista Bernardo Vega Carlos”, de la sección XXVII del SNTE y quien fue encargado de los servicios de educación en el sur de Sinaloa antes de ser candidato.

Asegura que López Valdez “tiene muchos amigos senadores que lo están apoyando”. Ejemplifica con Francisco Labastida y la suplente del candidato en el Senado, Margarita Villaescusa Rojo. “Aquí se dice que todos sus hijos andan conmigo en la campaña”. Y se ufana: “Aquí –señala el logo de la alianza opositora en su camisa– falta el medio PRI que se vino con López Valdez”.

Añade: “Dicen las malas lenguas que (el senador Manlio Fabio) Beltrones tiene simpatías por López Valdez. Toda la familia de Labastida está en la campaña con él. Labastida no va a ningún evento, pero su corazón ahí está. Sé que su hijo el restaurantero y Rocío, una de sus hijas, están trabajando arduamente” por la coalición opositora. l

“Se hacen pendejos...”
Jorge Carrasco Araizaga

CULIACÁN, SIN.- El diputado federal Manuel Clouthier Carrillo vio frustrada su aspiración de ser candidato del PAN al gobierno de Sinaloa por sus diferencias con el presidente Felipe Calderón, a quien acusa de tener un “complejo napoleónico”, de cobrar facturas a los panistas disidentes y de querer el control del PAN “al no poder gobernar el país”.

Severo crítico de Calderón por permitir “la consolidación de la narcopolítica en Sinaloa”, Clouthier Carrillo cuenta en entrevista cómo el presidente de Acción Nacional y diputado, César Nava, bloqueó la definición de la candidatura del partido para gobernador en su estado.

“Desde octubre del año pasado empecé a buscar a César Nava. Cada vez que lo veía en la Cámara de Diputados le pedía una cita. Lo buscaba para tratar el tema Sinaloa y no mi candidatura”, asegura.

El exsecretario particular de Calderón en la Presidencia de la República lo recibió, dice, hasta la tercera semana de diciembre. Dos meses después. “Ya se había pasado el tiempo para que el PAN incrementara su presencia sin restricciones, pues en ese momento aún no se iniciaba el proceso electoral.

“A Mario (López Valdez, candidato del PAN en la alianza El Cambio es por Sinaloa) le resuelven la última semana de marzo. Yo sostenía que primero había que trazar un proyecto y después que lo encabezara el que fuera necesario, porque así se fincó la candidatura presidencial de 1988.”

En ésta, su padre, Manuel de Jesús Clouthier, Maquío, fue el abanderado panista.

Director del periódico El Noroeste hasta el año pasado, cuando asumió la diputación federal, Clouthier Carrillo considera la actitud de Nava como “parte de la venganza, no parte de la pendejez”.

La confrontación con Nava no es nueva. El 18 de febrero pasado, el presidente del PAN “desautorizó” y censuró las declaraciones hechas por el legislador en una entrevista con Proceso (edición 1737), en la que aseguró que “la guerra” de Calderón al narcotráfico no había llegado a Sinaloa.

Ante el efecto que tuvo en la opinión pública la acusación, ese mismo día el secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, le envió una carta al diputado para desacreditar sus señalamientos; al mismo tiempo, en la bancada del PAN se promovía su destitución.

Acerca de su candidatura, Clouthier Carrillo dice: “Me había preparado para la posibilidad de ser candidato. Sostuve, y lo sigo sosteniendo, que quien aspire a gobernar Sinaloa tiene que hacer o una alianza con el crimen organizado o una alianza con el gobierno federal. Yo no fui capaz de hacer una alianza con el gobierno federal.

“Quiero pensar que Mario sí. No lo sé. Si no la hizo significa que es muy pendejo. Por eso yo no le entré. Porque no fui capaz de hacer una alianza con el gobierno federal. Porque, para mi gran sorpresa, éste no estuvo dispuesto a entrarle a esa alianza.

“Yo no tuve esa capacidad. No sé si en el fondo sea una posición de no entrarle a Sinaloa o sea una posición contra mí. Porque también están medio enfermitos allá. Son algo revanchistas. No sé qué será. El punto central es que si Mario tomó esa decisión aquí, que además se vio promovida desde la presidencia del PAN, a mí me hace suponer que trae el aval.”

Cobro de facturas

Acerca de Mario López Valdez, asegura: “Creo que deben tener un compromiso. No creo que estén dispuestos a aventar a alguien por delante para luego dejarlo solo, porque sería tanto como no tener madre”.

Insiste en su señalamiento sobre la omisión de Calderón en Sinaloa y su candidatura frustrada: “Éste ha sido un gobierno casi monotemático. El combate al narcotráfico ha sido su discurso y su bandera. Y cuando vas, los ves de frente y les dices: ‘señores, vamos a entrarle’, se hicieron pendejos. Se hicieron pendejos como si no lo fueran. Cuando en Proceso dije que no han actuado en Sinaloa, lo hice con conocimiento de causa”.

Asegura que “muy pronto vamos a saber si López Valdez tiene o no el apoyo federal, si están dispuestos o no a generar acciones para Sinaloa. ¿Qué tenemos que esperar los sinaloenses en el último año de Calderón?”, pregunta.

Desestima que Felipe Calderón vaya a actuar en Sinaloa si Jesús Vizcarra, el candidato del PRI, gana las elecciones: “Tiene que actuar ahora. Pero este grupito del presidente ¡ah!, son muy hombrecitos para gritarle a un panista disidente y cobrarle las facturas. Pero a un priista corrupto no se atreven a tocarlo ni con el pétalo de una rosa.

“No seas panista disidente porque te hacen sentir el rigor. En alguna medida, a mí me cobraron la factura. ¿Muy hombrecitos, no? Te hablan golpeado y te advierten. Pero no seas un priista corrupto porque no se atreven a nada”, insiste.

Con el PRD, dice, también son muy hombrecitos. “Hay que matarlo, hay que satanizarlo, hay que estarlo jodiendo todo el día. A los panistas disidentes hay que cobrarles la factura. ¿Tú crees que a (Gerardo) Buganza (aspirante frustrado a la candidatura del PAN al gobierno de Veracruz) no le cobraron la factura?

“Puedo decir el montón de facturas que ha estado cobrando un señor que no se ha atrevido a gobernar el país y está cobrando facturas en el PAN. Estoy sorprendido de ver lo que ha estado haciendo con Acción Nacional. Ha sido peor que en los peores, por llamarles así, ‘mejores tiempos’ del viejo régimen, en relación con el partido.

“Hay que ver su propio grupito. Está rodeado de Gutierritos. Le tienen miedo. No admite opiniones contrarias, disidentes, ni opiniones siquiera. Tiene puros ‘yes, men’ (sí, señor). Y así no se puede construir. Para mí eso es por complejo. Complejo de chaparro. Complejo de chapo. Complejo napoleónico.

“Al no poder gobernar el país, quiere gobernar el PAN y lo malgobierna. Quiere el control, aunque sea del partido”, afirma.

A los aspirantes a la candidatura presidencial del PAN para el 2012, les dice: “Todos los que aspiran tienen que hacerse una pregunta. ¿No será el proyecto de Calderón entregarle al PRI? Quienes aspiren tienen que preguntarse si quieren ser el (Francisco) Labastida del PAN. Habrá gente que le guste”.

Abunda en sus cuestionamientos a Calderón: “Yo le reclamo que no esté entrando a Sinaloa. Es inconcebible. La última vez que vino al estado fue a la sierra, por la construcción de la carretera Durango-Mazatlán. Vino a hablar de puentes este amigo, como si los puentes fuera lo que más nos interesara a los sinaloenses. Como si el problema de este país fueran los puentes y no la necesidad de cambio de rumbo y de dirección para gobernar”.

Ahora sumado a la campaña de López Valdez, “porque estoy convencido de que hay que romper el círculo” del poder que el PRI ha tenido en el estado por más de 80 años, Clouthier Carrillo insiste: “No concibo, no entiendo por qué a Sinaloa no le han entrado”.

Comenta que después de los señalamientos que hizo en Proceso, el secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, vino a Sinaloa y se reunió con el gobernador Jesús Aguilar Padilla.

“Después de esa visita media extraña, dije: no pudo venir más que a tres cosas. La primera, a comer camarones, lo cual es posible porque suele provocar giras de carácter culinario.

“La segunda, a coordinarse. Él había contestado a mis declaraciones en Proceso diciendo que se coordina muy bien para combatir el crimen organizado con el grupo de la camarilla mafiosa, dice el diputado federal en referencia al grupo político que gobierna el estado.

“Y una tercera razón es que haya venido a junta de consejo, a ver los intereses del proyecto turístico en que participa uno de sus hermanos, quien es director de Fonatur. Con la representación del gobierno federal el hermano del secretario de Gobernación le compró unos terrenos al exgobernador Antonio Toledo Corro.”

Clouthier Carrillo dice que Antonio Toledo Corro también está relacionado con el narcotráfico.

Gómez Mont estuvo asimismo en Culiacán el 13 de mayo pasado, día en que fuerzas federales detuvieron a Griselda López Pérez, exesposa de Joaquín El Chapo Guzmán, jefe del cartel de Sinaloa, y la trasladaron a la sede de la PGR en la Ciudad de México para soltarla de inmediato después de una llamada recibida desde Los Pinos (Proceso 1750).

“El mismo día que llegaba Gómez Mont hubo un despliegue militar desde las seis de la mañana. Nosotros como culichis (culiacanenses) nos reíamos de las payasadas que estaban haciendo para ir a agarrar a la pobre señora. Ahí no están las broncas. Están en Palacio de Gobierno. Ahí debieron entrar los militares y llevarse a la mitad”, señala. l

Campañas amedrentadas
Patricia Dávila

Flagelados por la violencia creciente y las imparables ejecuciones del narco y ante una oferta política precaria de los candidatos a gobernar Chihuahua, los ciudadanos de este estado fronterizo están listos para emitir su sufragio en unos comicios que serán desangelados, según admiten las propias autoridades electorales. Ejemplo funesto de cómo los capos de la droga y sus secuaces se han apropiado de gran parte del territorio nacional es precisamente Chihuahua, donde son ellos los que dictan las pautas.

CHIHUAHUA, CHIH.- La muerte y el narco marcaron las campañas electorales en el estado. Su sombra desdibujó a partidos políticos y candidatos, incluido César Duarte, el abanderado del PRI a la gubernatura.

Impotentes, al inicio del proceso electoral que culmina el próximo domingo 4 de julio, el Instituto Estatal Electoral (IEE) y el gobierno estatal recomendaron a los partidos abstenerse de realizar campaña en municipios como Guadalupe Distrito Bravos y Praxedis G. Guerrero debido a la violencia sin tregua de los cárteles de Juárez y de Sinaloa.

Duarte y seis de sus correligionarios, aspirantes a diputados, tuvieron que realizar sus actos proselitistas escoltados por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública de la entidad. No era para menos: el 19 de mayo asesinaron al tío de Francisco Salcido, candidato del PRI a diputado por el distrito 11; el 22 de ese mismo mes un brigadista de la campaña de Duarte también cayó; poco después un vehículo de su comitiva fue baleado accidentalmente por un soldado.

Y 10 días antes de que cerrara su campaña, Jaime Galván, uno de los empresarios chihuahuenses que lo financiaba, fue detenido en Estados Unidos acusado de lavado de dinero.

Desde antes del arranque formal de las campañas y de que los candidatos César Duarte del PRI, y su contrincante del PAN, Carlos Borruel Baquera, solicitaron protección por la violencia desatada por los cárteles. Meses después, ya en pleno proceso electoral, al detectar que 15% de los ciudadanos empadronados (2 millones 612 mil electores) optaron por cruzar la frontera para proteger a sus familias y que otro tanto perdiera su credencial o no actualizó sus datos, las autoridades electorales decidieron instrumentar una estrategia de seguridad.

El 9 de enero, el IEE, presidido por Fernando Herrera Martínez, giró un oficio al gobierno del estado en el que solicitó apoyo logístico para los candidatos. Al final sólo la aceptó el candidato Duarte.

Entre las medidas, se mencionaba que el personal siempre portara uniforme y los vehículos tuvieran sus rótulos de identificación, pero sobre todo que empleados o colaboradores de los candidatos no realizaran trabajo de campo después de las seis de la tarde. Además, con excepción de Juárez, Delicias, Parral, Casas Grandes y Chihuahua, a las demás asambleas municipales electorales se les pidió concluir labores a más tardar a las siete de la tarde.

Herrera Martínez comenta que el domingo 4 de julio se disputarán la gubernatura, 22 diputaciones locales y la renovación de 67 alcaldías. Para ello se instalarán 5 mil casillas en todo el estado en las que participarán 35 mil 28 ciudadanos capacitados ex profeso por las autoridades electorales locales.

Los pronósticos de participación pesimistas, sobre todo si se considera que en 2007 sólo votó 37.5% del electorado, 7.5% menos que en 2004, cuando José Reyes Baeza ganó la gubernatura.

–¿Por qué la petición de vigilancia? ¿Fueron amenazados?

–Debido al clima de inseguridad que vive el estado, algunos candidatos consideraron pertinente pedir la seguridad…

–¿El IEE giró una observación a los candidatos sobre las zonas conflictivas para que se abstuvieran de realizar campaña en esos lugares?

–Siempre hemos tomado el problema de seguridad muy en serio, vivimos con temor. Todos los días hay hechos de sangre (por eso) tomamos medidas preventivas, por eso la recomendación a los candidatos.

Las promesas

Al iniciar su campaña, el priista César Duarte hizo varios compromisos: transformar el marco judicial del estado para atacar las estructuras de la delincuencia organizada, recuperar la tranquilidad de los chihuahuenses. Y remató: “Daré mi vida por rescatar Ciudad Juárez”.

El panista Carlos Borruel no se quedó atrás: “Yo pondré a los delincuentes de rodillas”, se ufanó.

Los meses siguientes, ambos candidatos se tomaron muy en serio la recomendación del IEE para que se abstuvieran de realizar campaña en los municipios dominados por el narco. Además, en sus alocuciones omitieron hablar es ese asunto, hasta que, presionados por la prensa local que los acuso de “sacarle la vuelta” al Valle, visitaron dos de los municipios más violentos.

Duarte acudió a las oficinas de la Unión Regional Ganadera, ubicada en el kilómetro 59 de la carretera Ciudad Juárez-Porvenir para hablar ante los habitantes de los dos municipios. Borruel realizó dos actos: uno en Praxedis G. Guerrero, donde habló de apoyos en infraestructura, pero omitió el de la violencia generada por el narco, y otro en Guadalupe Distrito Bravos.

En la plaza de Guadalupe, el panista declaró: “A pesar de que hubo quienes me recomendaron no visitar esta población, la decisión de estar en Guadalupe es firme… Esta lucha no es sólo de los panistas; es de todos… Está en juego el destino de sus hijos, el destino de los jóvenes que quieren vivir en paz”.

Uno de los discursos más fuertes fue el de Borruel el martes 22, frente a 450 maestros: “El tema de la inseguridad no sólo se resuelve con policías; en las escuelas (también) se generan delincuentes. Por eso, propongo un esquema de escuelas de tiempo completo para que los niños anden menos tiempo en las calles. En el estado hay 350 mil niños y jóvenes sin escuela y en Juárez 12 mil. Creo que debemos de atacar la inseguridad con educación, no sólo construyendo cárceles y comprando armamento”.

Al día siguiente le tocó a Duarte. En Juárez se reunió con el sector de la CTM, y al viejo estilo caciquil los agremiados le rindieron pleitesía. Por la tarde, tuvo un encuentro con los integrantes del Poder Judicial del estado, en el que el juez VI en materia penal presentó una ponencia sobre la Ley de extinción de dominio, creada para afectar la economía del crimen organizado y las amenazas de que son víctimas los magistrados por parte de los cárteles:

“Todos los integrantes del Poder Judicial estamos dispuestos a aplicarla, sólo que requerimos capacitación que nos lleve a la creación inmediata de un tribunal especializado, con el fin de evitar la incertidumbre causada por la entrada en vigor de la ley…”

En el mismo evento, Patricia Martínez, juez IV de lo Familiar, expuso que la gran mayoría de los delincuentes provienen de familias desintegradas.

Y mientras a los 6 mil ejecutados de marzo de 2008 a la fecha en Juárez cada día se suma más sangre de personas que mueren a causa de la guerra entre los cárteles de la droga, las medidas para garantizar la seguridad ciudadana para el domingo 4 de julio son escasas.

Los candidatos del PRD pidieron permiso a su partido para realizar campaña en los municipios de Práxedes G. Guerrero, Guadalupe y Ascensión, pero desde la ciudad de El Paso, Texas. Sus directivos tuvieron que reemplazarlos.

“Aquí, el poder fáctico lo representan los grupos de narcotraficantes. Ellos han sembrado el terror con tanto asesinato y amenazas de muerte. Y en los casos de la sierra, también han impuesto la agenda y el discurso de los candidatos. Les prohibieron tocar el tema de la inseguridad y el narcotráfico. Por ello optaron por no postular candidatos en municipios como Urique y Uruachi”, asegura Miguel Vargas Loya, presidente del Comité Directivo Estatal perredista.

El lunes 21, el IEE conformó una comisión permanente en materia de seguridad. Desde ese día sus integrantes sesionan diariamente. El presidente del instituto, Fernando Herrera Martínez, solicitó a las corporaciones policiacas que el dispositivo de seguridad del 4 de julio sea estrictamente preventivo.

El día de la jornada electoral, las policías municipales tendrán a sus agentes debidamente uniformados, todos a bordo de sus patrullas. La instrucción es hacer recorridos sólo por las calles primarias de la ciudad.

Si alguna otra corporación estatal o federal tiene que salir de ese entorno por motivos ajenos al proceso, deberán circular por avenidas primarias para que permitan que la gente salga a votar. Además, deberán hacer sus rondines lejos de las casillas.

Por lo que respecta al Ejército, las tropas estarán acuarteladas y saldrán a las calles sólo si algún problema de carácter social rebasa a las otras corporaciones. l

Durango: candidaturas a contracorriente
Patricia Dávila

DURANGO, DGO.- Aquí están de regreso los viejos esquemas priistas, de cuando los comicios eran controlados por los gobernadores: el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC) de Durango impide que, pese a la violencia del narco, se brinde seguridad a los candidatos y prohíbe a los medios difundir información perjudicial para el aspirante priista al gobierno, Jorge Herrera Caldera.

El PRI llegó “lesionado” a la contienda por la salida de José Rosas Aispuro Torres, priista con 25 años de militancia que el pasado 30 de diciembre abandonó las filas tricolores pues se negó a apoyar al candidato del gobernador Ismael Hernández Deras.

Éste insistió en promover a Herrera Caldera a pesar de que se violó la fracción 9 del artículo 166 de los estatutos del PRI: “Para los cargos de gobernador (…) se requerirá acreditar la calidad de cuadro dirigente y haber tenido un puesto de elección popular a través del partido, así como 10 años de militancia partidaria”. Hace cinco años Herrera se inició como secretario de Finanzas del actual gobierno, pero no en el PRI.

La salida de Aispuro y su adhesión a la coalición Durango nos Une –PAN, PRD y Convergencia– obligó a Hernández Deras a buscar ayuda de los exgobernadores duranguenses.

Todos exigieron, a cambio, candidaturas a diputado para sus primogénitos: por el primer distrito va Rodolfo Guerrero Mier, hijo del exgobernador Ángel Sergio Guerrero Mier; por el segundo distrito está José Ramírez Guzmán, hijo de José Ramírez Gamero; por el octavo va Maximiliano Silerio Díaz, hijo de Maximiliano Silerio Esparza.

Durango nos Une cuenta además con el apoyo del Partido del Trabajo, cuyo candidato, Gabino Martínez Guzmán, declinó el jueves 24 en favor de Aispuro. En mayo también se sumó una fracción de militantes del Partido Duranguense, así como la dirigencia del Partido Verde y familiares de los exgobernadores Silerio Esparza y Guerrero Mier.

Recuento de agresiones

La violencia y las amenazas contra algunos candidatos no han escaseado. Juan Carlos Gutiérrez Fragoso, dirigente estatal del PAN, hace un recuento:

En el municipio de Vicente Guerrero, Yolanda Sifuentes de Ochoa renunció el 28 de abril a su candidatura por la coalición después de que intentaron levantar a su hijo.

En Otáez, familiares de Jaime Estrada, candidato a presidente municipal por la coalición, fueron secuestrados durante su campaña.

A raíz de esa ola de violencia, el 18 de marzo Durango nos Une presentó ante el IEPC un acuerdo para garantizar la celebración de elecciones pacíficas. El instituto no dio respuesta durante casi tres meses. La coalición recurrió entonces a un juicio ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de Durango, que ordenó al instituto que se manifestara. El 31 de mayo el IEPC dijo que no era necesario tomar medidas extraordinarias de seguridad en el estado.

Un día después, en el municipio de Vicente Guerrero al coordinador de la campaña del candidato de la coalición a presidente municipal le quemaron tres vehículos. Al propio aspirante, Orlando Calzada, lo amenazaron por teléfono: le dijeron que los matarían a él y a su familia si no declinaba. Calzada sigue siendo candidato, pero su familia se vio obligada a emigrar.

En Pueblo Nuevo, Pedro Hernández Díaz, candidato a presidente municipal por la coalición, fue asaltado a mano armada.

A Armando García Mesa, candidato a alcalde de Poanas, le secuestraron a algunos familiares. Fueron liberados después del pago de un rescate.

Manuel Piedra, candidato a presidente municipal por Coneto de Comonfort, ha sido amenazado vía telefónica: le advierten que si sigue con la candidatura “sufrirá un daño”. Piedra denunció ante la Procuraduría General de Justicia del Estado y pidió seguridad. Tardaron 15 días en responderle afirmativamente, pero nunca la enviaron.

Ante las constantes amenazas de muerte que recibía Alfonso Peña, candidato a diputado por el octavo distrito, solicitó protección al IEPC. El secretario general de Gobierno, José Oliverio Reza Cuéllar, vía oficio con fecha 26 de mayo enviado al IEPC, señala al presidente del Instituto, Raymundo Hernández: “No es posible atender la solicitud de referencia con los alcances que solicita…”.

El 23 de mayo, un tío de Ever Mejorado, candidato priista a la alcaldía de Santiago Papasquiaro, fue encontrado muerto. Había sido levantado el 28 de abril.

No todas las renuncias y amenazas son producto de la incursión de Los Zetas en esta región, tradicionalmente controlada por el cártel de Sinaloa: la mayor desbandada de candidatos se dio por presiones del gobierno estatal a través de su Secretaría de Educación.

A partir del 28 de mayo, cuando ya habían pasado 50 días de campaña y a solo seis de que concluyera el plazo oficial para realizar sustituciones ante el IEPC, a 40 maestros, candidatos en varios municipios, la Secretaría de Educación les retuvo sus pagos hasta en tanto entregaran su renuncia, con acuse de recibo, en el Instituto Electoral.

El resultado: 20 aspirantes de la coalición reunciaron y otros 20 se sostienen pero sin recibir su cheque quincenal. Diez de ellos son profesores indígenas encabezados por Antonio Aguilar, candidato a alcalde por El Mezquital.

Las boletas

Para la impresión de las boletas electorales, no hubo licitación. El contrato se adjudicó de manera directa a la empresa Litoformas, la cual ha sido señalada en otros procesos electorales por estar implicada en irregularidades.

El jueves 17 los representantes de los partidos de Durango nos Une más los del PT, PRI y PVEM acudieron a la imprenta, en la Ciudad de México; se les impidió revisar el proceso de asignación de rutas de distribución de la documentación electoral.

“Estaba todo armado para impedir que al llegar a Durango los partidos pudieran realizar un muestreo de las boletas. Por si fuera poco, en el trayecto a Durango, en San Luis Potosí, se perdió uno de los dos camiones que las transportaban. Los vehículos no fueron custodiados por la Policía Federal ni el Ejército, sino por ministeriales. Una vez en Durango los dejaron estacionados en la calle frente a una bodega del IEPC sin resguardo de ningún tipo; al día siguiente los sellos de seguridad estaban violados”, explica José Ramón Enríquez, presidente de Convergencia en el estado.

Hay más: el IEPC se integró en 2009 y tanto su consejero presidente, Raymundo Hernández, como los consejeros y el secretario ejecutivo son designados a través del despacho de Hugo Rosales Badillo, presidente de la Comisión de Procesos internos del PRI y asesor externo del gobernador Hernández Deras.

La consejera Lourdes Vargas Rodríguez es prima del gobernador. La jefa del Departamento Jurídico, Kimberly Cepeda, y el director del Registro Electoral, Guillermo de la Rosa, son familiares de la esposa de Rosales Badillo. La cónyuge del procurador estatal, Cynthia Paloma Dávila, trabaja en el área de Capacitación Electoral. Y Raymundo Hernández colaboró como abogado en el despacho de Rosales Badillo.

El debate ríspido

Otra irregularidad se originó tras el único debate sostenido entre los candidatos al gobierno del estado, el jueves 10. Ahí Herrera Caldera insultó al presidente estatal panista Juan Carlos Gutiérrez Fragoso: “Yo quisiera que tuviera un pelo de la inteligencia que tiene su papá, don Juan Gutiérrez, pero ya veo que no tiene pelo y lo que tiene lo tiene por atrás”.

Al día siguiente, Aispuro fue entrevistado en una radiodifusora local a la que declaró: “Ayer Herrera demostró cuál es su objetivo: llegar al poder para seguir amasando dinero, para seguir apoyando sólo a unos cuantos. Seguir siendo cómplice de la delincuencia. Ellos son cómplices de la delincuencia. Es una cosa muy grave. Tengo informes de que los rescates obtenidos de los secuestros que están haciendo (…) se los llevan a la campaña de Jorge Herrera Caldera”.

Por esas declaraciones, el 13 de junio el PRI interpuso un procedimiento sancionador contra Durango nos Une y especialmente contra José Rosas Aispuro, Claudia Hernández Espino, diputada local panista, y Jesús Ortega Martínez, dirigente nacional de PRD, a quienes acusa de “emitir declaraciones perversas”.

Además, el 14 de junio el IEPC giró un oficio a todos los medios locales en el que les ordena que “se abstengan de difundir, publicar, distribuir, circular o expresar manifestaciones dirigidas a denigrar, calumniar, vilipendiar, infamar, injuriar o atacar la honra y reputación de los candidatos del Partido Revolucionario Institucional”.

En este ambiente el próximo 4 de julio se elegirá a un gobernador, 39 alcaldes, 17 diputados de mayoría relativa y 13 de representación proporcional, con un total de 875 candidatos en el estado. l

Crónica desde una isla de terror...
Gerardo Albarrán de Alba

Si Tamaulipas tiene dueño es, además del cártel del Golfo, el gobernador Eugenio Hernández. ¿Y qué es Tamaulipas hoy sino la humillante, dolorosa necesidad ciudadana de agachar la cabeza u ocultarla, so pena de sucumbir entre la violencia del crimen organizado y la autarquía implacable del mandatario priista? Estado-espejismo donde la vida ya no se vive, donde la insólita comodidad de la autoridad estatal sólo es equiparable a la inaudita libertad e impunidad con que actúan los narcotraficantes en el estado, Tamaulipas se apresta a la escenificación de una farsa electoral, favorecido el PRI por su mejor aliado: el miedo que impone la narcoviolencia.

VALLE HERMOSO, TAMPS.- El silencio es más hondo que una tumba. Cualquiera sabe lo que pasa, pero nadie dice nada. Pueblos enteros tomados durante días por el cártel del Golfo o por Los Zetas; casas y negocios quemados y saqueados; ataques relámpago a instalaciones policiacas o casas de seguridad; combates que duran toda la noche y matanzas a plena luz del día que no dejan otra huella que muros y vehículos acribillados, sangre en las aceras, porque las víctimas más tardan en morir que en desaparecer sus cadáveres; amenazas por doquier contra quienes no se conforman a la primera; secuestros, asaltos y cobro de cuotas a quien se deje, y todos se dejan para llegar a mañana como se pueda. La vida controlada en las comunidades disputadas mediante retenes y volantas en las calles y avenidas principales, lo mismo si rondan el medio millón de habitantes, como Reynosa y Matamoros, que si no llegan a 5 mil, como Burgos.

Que no, que aquí no pasa nada, son hechos aislados, corean el gobernador y la mayoría de los presidentes municipales, al costo de sembrar sospechas sobre ellos mismos. La gente ejerce el derecho de réplica en internet. Los llamados de auxilio se acumulan, se prodigan los reproches. La impunidad indigna. Los testimonios saben a congoja. Es el desamparo.

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El convoy de más de 100 camionetas rotuladas CDG (Cártel del Golfo) y X M3 (Metro 3) llegó temprano a Valle Hermoso el miércoles 24 de febrero. El pueblo estuvo ocupado durante tres días de enfrentamientos a toda hora. Nomás chillaban los coches por las corretizas que pegaban. Nadie nos auxilió, ni el Ejército vino por más que lo llamaron. Hubo como 60 muertos. La historia se repitió el 6 de junio. Se fueron derecho a la preventiva y otros a la ministerial. Fue una matazón. Se llevaron a varios policías. Las entradas y salidas fueron bloqueadas, luego de varios días de rumores y tensión.

La violencia en el estado arreció a partir del primer asalto a Valle Hermoso, el mismo día en que una juez en Houston, Texas, sentenció a Osiel Cárdenas a un cuarto de siglo de prisión. Al día siguiente, en Ciudad Victoria se vaciaron las escuelas y las calles por los rumores de balaceras. El 11 de marzo lanzaron granadas y acribillaron las oficinas de la Policía Ministerial del Estado y de la Policía Preventiva. Hace apenas tres semanas, el 11 de junio, militares mataron a dos personas frente a la casa del procurador de Justicia, aunque la primera versión que se esparció por las calles es que el crimen ocurrió dentro.

Ni el gobierno se salva. Son varios los alcaldes abofeteados por los narcos, los altos funcionarios estatales despojados de sus aparatosos vehículos, los empleados federales impedidos de cumplir sus tareas. Ellos cobran la luz, el predial, el agua; se convirtieron en proveedores de servicios públicos. El gobierno del estado y los municipios sólo administran el desastre y trabajan con lo que les dejan, mientras se cuidan la espalda. ¿Ya notaron que el gobernador mandó pintar todas las unidades? Ahora son blancas, con logos grandes del gobierno del estado en el techo, para que no los confundan. Sólo así pueden salir a carretera seguros sin que los tiroteen desde los helicópteros de La Maña.

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La cotidianidad se mide en los calibres empleados y las granadas detonadas, el número de bajas, las horas de terror. Ser testigo da para meses de episodios que se adaptan al interlocutor en turno, siempre en el círculo más cercano, porque entre desconocidos no se pasa de una charla incidental. Con la prensa amordazada, policías coludidas o sometidas, y autoridades políticas indolentes o en plena fuga, el rumor alcanza la categoría de leyenda urbana. Si algo llega a salvar la censura, las versiones oficiales minimizan todo y los periódicos y noticiarios locales se avienen.

Nadie sabe cuándo le va a tocar, pero todos entienden que será un día de estos, mientras llevan a los hijos a la escuela o hacen las compras de la semana o se aventuran por caminos y veredas para cualquier diligencia ineludible. El imaginario se debate entre las ganas de creer que se puede seguir como si nada y el rezo interno porque no sea hoy, porque no sea a mí ni a los míos.

Desfigurada la normalidad, el miedo llena los vacíos y apela al sentido común como manual de sobrevivencia. Ver y callar, o mejor no ver para no tener que decir nada. La violencia no deja espacio para el autoengaño; la cantidad de historias es abrumadora: Nuevo Laredo, Nueva Ciudad Guerrero, Mier, Camargo, Comales, Díaz Ordaz, Reynosa, Río Bravo, Matamoros, Ciudad Valle Hermoso, San Fernando, Soto la Marina, Mante, González, Altamira, Ciudad Madero, Tampico y la capital, Ciudad Victoria, registran más de medio centenar de choques y masacres en los últimos seis meses. Son los que se notan. Aquí la muerte no toma asueto.

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Imposible mimetizarse en cualquiera de estos pueblos, donde todos se conocen. Nadie que sea un extraño lo puede disimular, y menos aquí, entre paredes tres veces descascaradas a balazos y el asesinato del que muy probablemente habría sido el siguiente alcalde de Valle Hermoso, una tras otra entre febrero y junio. El visitante despierta a su paso una mezcla de curiosidad y sentido de alerta entre los lugareños que lo estudian de soslayo.

Las personas comunes no resisten alusión a la tragedia, menos una pregunta directa. Desvían la mirada y bajan la voz para cambiar de tema. Con suerte, después de un rato de nimiedades, la desconfianza en el forastero se agrieta y las historias fluyen como catarsis, pero sin nombres; fechas y lugares, apenas aproximados. Nada que identifique a las víctimas ni a quien ha dejado de ser prudente en un momento de desahogo.

En Ciudad Victoria, funcionarios públicos, políticos, académicos, periodistas o personajes notables se cuidan de cualquier postura comprometedora y recurren a los eufemismos: los enfrentamientos, los atentados, los secuestros, los asesinatos, la barbarie toda se llama evento; los narcos y sus sicarios son La Gente, La Maña, Las Comadres de Gloria, Los de la Letra. Para el Ejército son simples agresores.

La prensa es una parodia de sí misma. Primeras planas llenas de gacetillas, interiores rellenados con boletines. La página policiaca se atiene a los accidentes de tránsito; en otras condiciones, nadie sabría lo mal que se maneja en Tamaulipas. Radio y televisión son inocuas. Si ya la corrupción era consustancial al periodismo local, la guerra de los cárteles dividió lealtades. Algunos pagaron el precio: ocho reporteros fueron secuestrados el 8 de marzo; cinco de ellos aún no aparecen. Ahora todos están bajo la misma amenaza: plata o plomo. ¿Servir a unos o a otros? Mejor nadar de muertito, bendita sea la grilla local que permite reportear otras cosas. La Gente tiene sus voceros, reporteros que trabajan para ellos. Te llaman a la redacción; te dicen esto sí, esto no. Los narcos son los verdaderos editores de los periódicos, los jefes de información de los noticieros. A veces no nos tienen que hablar, ya sabemos de qué o de quiénes no tenemos que publicar nada. Hay listas, pero no alcanza. El problema es que no sabes realmente con quién estás hablando, sobre quién estás escribiendo. Vives con miedo a equivocarte.

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Los narcos presumen que son los buenos, lo malo es que no se sabe cuáles. La guerra entre El cártel del Golfo y Los Zetas no se limita al control de las plazas, va por las conciencias de quienes preferirían subordinárseles a cambio de recuperar un poco de paz. Emiten boletines de prensa para limpiar su imagen y denostar a sus enemigos; ejercen la censura previa en los medios y tiran línea a conveniencia; distribuyen volantes casa por casa y esparcen rumores en las redes sociales. La propaganda arraiga percepciones.

Una mujer arrastra la tristeza por la carretera. ¿Qué hace por aquí solita? ¿No sabe que es peligroso?, le preguntan los narcos desde su camioneta rotulada CDG o Z-40, da lo mismo. Llorosa, explica que le acaban de robar su auto y la abandonaron ahí. Súbase, le dicen. El carro era viejo, pero era todo lo que tenía. Es maestra, gana una miseria. Se conduelen. Le abren una maleta repleta de dólares. Métale la mano, agarre lo que quiera, la invitan. Tome más, todo lo que pueda, y cuente lo que aquí pasó. La historia tiene media docena de versiones, según la facción a la que favorece. En una, son dos mujeres jóvenes a las que ayudan a recuperar su troca y matan a los rateros. En todas, los narcos hacen justicia a los pobres.

Hasta la extorsión tiene una cara benevolente. Los narcos controlan toda la economía informal de las plazas que dominan intermitentemente, ora unos, ora los otros. Igual antes tenían que pagar mordidas al policía, al inspector. La Maña hizo una simplificación administrativa: Desde hoy sólo me pagan a mí, y yo me encargo de lo demás. Ningún funcionario vuelve a molestarlos.

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Las costumbres se han perdido en Tamaulipas. Los paseos se limitan; las reuniones, mejor en casa. Se come en restaurantes por negocios. Se maneja con el radio apagado para escuchar a tiempo cualquier balacera. Se viste diferente: ni botas ni cinturón de hebilla ancha ni sombrero. Nada que asemeje al estereotipo del narco. Las camionetas y deportivos nuevos y más caros se quedan en las cocheras y se adquieren carritos modestos para el uso diario.

Los negocios cierran temprano, incluso en ciudades donde la violencia aún no es endémica. Si el bullicio del centro de la capital del estado se apaga a las nueve de la noche, en los pueblos la puesta de sol marca el toque de queda. La gente se guarda en su casa a veces más temprano. Algunas comunidades de la frontera chica no se han vaciado sólo porque se quedaron los que no pueden irse del otro lado del Río Bravo o a ninguna otra parte.

Trasladarse de un punto a otro del estado es un volado que nadie quiere perder. En los retenes militares las preguntas de rutina son pocas: ¿De dónde viene? De Victoria ¿A dónde va? A Valle Hermoso ¿Es de Tamaulipas? Sí, señor. ¿A qué se dedica? Soy profesor. Las respuestas y el tono adecuados reciben un lacónico “Pásele”. Viajar en un sedán polvoso ayuda.

Los bloqueos de los narcos son más rudos. No paran a todos, nomás a los que les parecen raros. Placa de otro estado equivale a semáforo rojo. Moverse en una suburban o una cuatro por cuatro es invocar la desgracia. Más vale convencerlos de que no representas ninguna amenaza, aunque cada vez es más difícil. La guerra tiene nuevos actores. La respuesta de Los Zetas a la alianza entre el cártel del Golfo, el cártel de Sinaloa y La Familia michoacana ha sido reclutar maras salvatruchas. Los refuerzos vienen de Honduras o El Salvador. Son jóvenes, todos tatuados. Se va a poner peor. La sociedad está a dos fuegos y lucha por su vida sin armas. Pero hay quienes están pasando a otra fase y construyen pequeños ejércitos privados. Quienes tienen con qué, ya lo están haciendo. Conozco a un empresario de Tampico que contrató a una docena de mercenarios israelíes. Estamos a un tris de que esta guerra delimitada entre cárteles se convierta en una guerra civil, todos contra todos. l

Votar entre zetas
Gerardo Albarrán de Alba y Gabriela Hernández

CIUDAD VICTORIA, TAMPS.- Confiado en una singular combinación de ingeniería electoral, mercadotecnia y viejas prácticas de cooptación, el PRI se considera inmune al costo político de la violencia que ha ejercido el narco a lo largo del sexenio de Eugenio Hernández Flores. Si las encuestas están en lo cierto va a ganar las elecciones por tres a uno. Enfrente sólo tiene a un candidato del PAN abandonado por su partido y a un PRD desdibujado; el resto de los partidos se conforma con participar. Sin embargo, en esta entidad la verdadera lucha por el poder es con el narcotráfico.

Paralelo al proceso constitucional, el cártel del Golfo y Los Zetas libran una guerra abierta por el control del estado que desplaza a las autoridades y arrincona a la población. Los propios partidos políticos han resentido las amenazas de los operadores del narco, que han forzado a varios candidatos a renunciar a sus postulaciones. Uno de ellos, el panista Manuel Guajardo, fue asesinado el 13 de mayo, en vísperas de que registrara su candidatura para alcalde de Valle Hermoso. En el atentado murieron también su hijo de 21 años y un empleado.

Al margen del conflicto, el PRI es el único partido que registró candidatos a todos los puestos en disputa este 4 de julio, cuando se elegirán gobernador, 36 diputados (22 de mayoría, 14 de representación proporcional) y 43 presidentes municipales en planillas que incluyen a 55 síndicos y 265 regidores. “Quiero el tráiler completo”, se ufana el presidente del Comité Directivo Estatal priista, Ricardo Gamundi Rosas.

El candidato panista a la gubernatura, el senador con licencia José Julián Sacramento, no cree en pronósticos. Él ganó su escaño en 2006 con 11 puntos de ventaja, pese a ir 18 abajo en los sondeos. “Vamos por la mitad de los municipios”, y para la gubernatura “voy a quedar cabeza con cabeza” con el contrincante priista, Rodolfo Torre Cantú, exsecretario local de Salud.

Aparte de Sacramento, el candidato del PRI no tiene de quién preocuparse: PRD, PT y Convergencia van cada uno por su lado, desarticulada la coalición de 2006 que captó un buen número de votos en el estado. Los petistas postularon a Armando Vera García y Convergencia a Alfonso de León Perales, que no pintan.

Sacramento no ha contado con su partido más allá de la formalidad. Hasta el cierre de edición, el presidente nacional del PAN, César Nava, sólo había pisado el estado para asistir al funeral de Manuel Guajardo; de sus compañeros del Senado sólo ha recibido la visita de Santiago Creel. “Me dejaron solo”, lamenta. En contraste, la abrumadora campaña del priista Torre Cantú tiene el apoyo abierto del PRI nacional y de los senadores Manlio Fabio Beltrones y el gobernador mexiquense Enrique Peña Nieto.

Ni siquiera las veladas acusaciones de corrupción por los innumerables negocios que les atribuyen al gobernador Hernández Flores y sus allegados durante el sexenio parecen influir en la intención de los votantes.

Toda posibilidad de protesta es desarticulada gracias a la obsesión del gobernador por controlarlo todo y someter a todos, partidos y sociedad, y por supuesto al Instituto Electoral de Tamaulipas (Ietam), en el que habría impuesto al presidente Jorge Luis Navarro Cantú, consejero desde 2006, cuyo único objetivo declarado es alcanzar la votación “más copiosa” en la historia del estado.

Hernández Flores metió las manos en las dirigencias de algunos partidos y palomeó candidatos, como en el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), presidido por su amigo René Castillo de la Cruz, al que también hizo candidato a diputado local, según observadores que piden reservar sus nombres. PRI y verdes forman la coalición Todos Tamaulipas, junto con el Partido Nueva Alianza.

El gobernador también intervino en las disputas internas en el PRD. Un grupo de perredistas ofreció la candidatura a Lino Korrodi, quien habría tenido algunos acercamientos con el dirigente nacional Jesús Ortega; pero se frustró. De acuerdo con el expresidente local del PRD, Rafael Rodríguez Segura, la Secretaría General de Gobierno pagó esquiroles para espantar al examigo de Fox. Al final, el candidato de la izquierda es el empresario panista Julio Almanza Armas, otro buen amigo del gobernador.

En el extremo, panistas como el exdiputado federal Luis Alonso Mejía achacan al gobernador Hernández Flores y sus operadores políticos haber influido en la candidatura de Sacramento para cerrarle el paso al otro precandidato del PAN, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, diputado local y exalcalde de Reynosa.

“Se ve que el presidente del Ietam está trabajando para ellos; el candidato del PRD trae lana del gobierno del estado, no de su partido; igual pasa con los demás partidos”, se queja el panista Sacramento.

“El problema del PAN es que tiene una fisura interna muy fuerte por el poder. Y no tiene base, por eso nos pide prestados candidatos”, replica el dirigente estatal del PRI Ricardo Gamundi Rosas, en alusión a los priistas postulados por el PAN para alcaldes de Tampico y Altamira.

La oposición asegura que el gobierno de Hernández Flores y su partido han pactado con el narco. Por eso son los únicos en campaña en todo el estado.

“No es cierto y te lo digo a los ojos”, responde el principal operador político del gobernador, quien rechaza el mote de “mapache mayor” y se acredita como ingeniero electoral.

Narcoelección

A sólo 47 kilómetros de Matamoros y a 35 de la frontera con Roma, Texas, Valle Hermoso se ha convertido en “dormidero” de narcos y hasta hay quien dice que ahí vivía Heriberto Lazcano Lazcano, El Lazca, líder de Los Zetas que tenía bajo su control esta ciudad hasta que fue desplazado por el cártel del Golfo hace poco más de cuatro meses.

El asesinato ahí de Mario Guajardo, de 54 años, marcó un antes y un después de los comicios del próximo domingo y exhibió la penetración del narcotráfico en la vida política del estado, pero el fenómeno no es nuevo: en las elecciones locales de 2007 asesinaron a Juan Antonio Guajardo Anzaldúa, exdiputado federal por el PRD y candidato del PT a la presidencia municipal de Río Bravo, forzaron la renuncia de varios candidatos de oposición y el mismo día de los comicios intimidaron con armas a los votantes frente a las casillas.

Todas las fuentes consultadas por Proceso coinciden en que tanto el cártel del Golfo como Los Zetas pretenden imponer comandantes de las corporaciones policiacas municipales.

“La inseguridad en Tamaulipas es resultado de la complicidad de la mayoría de las policías estatales y municipales con la delincuencia organizada; muchos de los comandantes trabajan para ellos, eso está a la vista de todos”, sostiene José Julián Sacramento. El problema existe en todos los municipios tamaulipecos, comenta.

Los narcos no imprimen boletas ni instalan urnas. Nadie regula sus campañas. La propaganda es sorda. Los contendientes son fantasmas de los que se sabe sólo de boca en boca por los enfrentamientos y masacres que desbordan la censura. Reparten despensas y otorgan favores. Los cobran caro.

En el fuego cruzado mucha gente empieza a tomar partido: unos por el cártel del Golfo, otros por Los Zetas. Ambos intentan mostrarse como el mal menor. Mediante volantes y boletines cada facción pide el apoyo de la ciudadanía para eliminar al contrario. Los dos grupos criminales aseguran que los secuestros, asaltos y asesinatos son responsabilidad de sus enemigos. El discurso es el mismo: cualquiera que gane traerá de nuevo la paz. Los políticos intentan matizar.

El PRI asegura que no compite con los narcos. “A la gente le decimos: el enemigo es el PAN o el PRD. Lo nuestro es político. A la hora de gobernar, la cosa cambia”, concede Gamundi Rosas.

Para Sacramento, el candidato del PRI Rodolfo Torre Cantú “está esposado, no tendrá la libertad de cortar de tajo los vicios de seguridad, la complicidad y la corrupción” que heredaría del gobierno de Hernández Flores. “Yo sí tengo esa libertad porque nunca he pactado ni pactaré con el crimen organizado. Por supuesto que yo sí puedo meterle mano a las corporaciones policiacas de Tamaulipas para su depuración; ellos no”.

El candidato panista a la gubernatura dice que se apoyará en el Ejército, con el que presume una buena relación construida como secretario de la Comisión de Defensa Nacional en la LIX Legislatura, en la que fue diputado, y hasta hace poco como integrante de la Comisión de Defensa y Marina en el Senado. “Yo sí sé cuando vienen operativos, yo sí sé cuando vienen refuerzos de las fuerzas armadas; el gobernador no sabe, porque no hay confianza”.

Sacramento se desespera al evaluar las condiciones en que recibiría el estado en caso de ganar. La violencia e inseguridad lo copan todo y la administración de Felipe Calderón no da visos de poder con el problema.

“Siento que el gobierno federal tiene argumentos de peso para venir por algún funcionario del actual gobierno o del sexenio anterior ligados con la delincuencia organizada y no lo han hecho. Han sido muy complacientes. Yo sé que tienen información y no han actuado. Aquí está en juego no solamente el poder político”.

Repetidamente, el senador con licencia le ha planteado a Calderón la crisis en que vive el estado, pero siempre en reuniones con otros legisladores. “Nunca de manera personal”. No ha tenido respuesta.

“Saben contra quién deben actuar y cuándo, pero siento que no ha habido la voluntad de hacerlo. No sé si por cálculos políticos en otra elección o a cambio de votos priistas en el Congreso, o porque no están contando con Tamaulipas. Qué güeva me daría que fuera esa la razón, pero si fuera por complicidad sería peor… Información hay. No entiendo por qué no hacen nada.” l

A Calderón: ¡saca las manos de Aguascalientes!
Verónica Espinosa

En medio de una virulenta confrontación preelectoral en Aguascalientes –donde a las denuncias judiciales y enconadas descalificaciones se sumó hace poco el estallido de una granada ante instalaciones electorales–, son varias las voces que reclaman al presidente Felipe Calderón: “para tu ‘guerra sucia’, saca las manos del proceso”...

AGUASCALIENTES, Ags.- La contienda por la gubernatura de Aguascalientes, que enfrenta también al gobernador panista del estado, Luis Armando Reynoso Femat, con el presidente panista Felipe Calderón Hinojosa, pasó ya de la virulenta confrontación mediática y las denuncias judiciales y electorales a la violencia con explosivos:

El pasado martes 22, varios desconocidos lanzaron una granada que estalló ante una bodega rentada por el Instituto Electoral Estatal (IEE) para guardar material que se distribuirá durante la jornada de votación, el próximo 4 de julio. Se produjeron daños en la fachada del inmueble y en algunos edificios aledaños.

La bodega se ubica muy cerca de la casa de campaña del candidato del PAN, Martín Orozco Sandoval, uno de cuyos escoltas, David Apolinar Palacios, fue detenido esa tarde “por actitud sospechosa”, aunque en seguida se le liberó sin acusación de por medio.

Este hecho –sumado a las demandas que han presentado uno contra otro el candidato de la Alianza PRI-PVEM-Panal, Carlos Lozano de la Torre, y el abanderado del PAN, Martín Orozco Sandoval– enrareció aún más el ambiente.

Hoy, mientras ambos candidatos aseguran que ganarán y defenderán su triunfo con todo, los consejeros del Instituto Electoral Estatal han decidido solicitar la presencia del Ejército en la entidad durante la votación y los días posteriores.

Algunas de las causas de este creciente enconamiento son mencionadas a Proceso por la exdiputada local y candidata del PRD al gobierno estatal de Aguascalientes, Nora Ruvalcaba Gómez:

“Martín Orozco –explica– es el candidato del presidente Calderón, quien desde la Presidencia de la República está operando, mientras el gobernador panista Luis Armando Reynoso Femat tiene su propio proyecto con el priista Lozano. El PAN está concentrando todas sus baterías en Aguascalientes, y creo que es lo que ha hecho que se llegue a este grado de confrontación en el estado, lo cual es un riesgo.”

A su vez, Carlos Lozano enfrenta por segunda ocasión en las urnas a Martín Orozco Sandoval, el panista que le ganó la alcaldía de la capital del estado hace seis años. Pero las circunstancias son muy diferentes ahora, puesto que este conflicto tiene varios frentes:

El gobernador Reynoso Femat mantiene –no obstante su silencio de las últimas semanas y su viaje a Sudáfrica– un operativo que emplea a funcionarios y recursos de su administración en contra del candidato albiazul Martín Orozco, decidido a impedir el triunfo del elegido del presidente Felipe Calderón –mediante la intervención de César Nava–, porque nunca estuvo de acuerdo con su postulación (Proceso 1749).

Así, Orozco Sandoval no sólo compite sin el respaldo del gobernador Reynoso –su compañero de campaña en 2004–, sino con su manifiesta voluntad en contra y acorralado judicialmente por un proceso penal que lo tiene en libertad bajo caución mientras hace campaña, gracias a un dictamen que en su favor emitió el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación y que le permitió continuar en la contienda (Proceso 1750).

Aunque Orozco arrancó su campaña una semana después que sus contendientes –otro de los cuales es el aspirante del Partido del Trabajo, Jesús Rangel de Lira–, él ha ido cerrando la amplia ventaja que le llevaba Lozano, la cual, de acuerdo con el PAN, hoy estaría en sólo seis puntos porcentuales.

En lo que se ha calificado como una “campaña negra” similar a la empleada por Felipe Calderón y sus estrategas en 2006, Orozco lanzó, en el primer debate en el que participó, acusaciones de enriquecimiento indebido en contra del priista Lozano de la Torre, y en sus actividades de estos días no deja de referirse al mismo tema.

Por su parte, los priistas atribuyen ese “estilo” de Orozco a la intervención en la campaña panista de Antonio Solá, quien fue asesor de Felipe Calderón en 2006 y a quien ahora se atribuye estar perfilando la estrategia electoral para Orozco, así como la correspondiente a los panistas Cuauhtémoc Calderón, en Zacatecas, y José Rosas Aispuro, en Durango.

Aunque el PAN niega esta versión, el periódico El Economista publicó el pasado 16 de junio incluso la ubicación del domicilio donde estaría radicando Solá –en el fraccionamiento Pirámides de la capital aguascalentense– para desplegar, desde aquí, la guerra sucia en las tres campañas del panismo.

Dos semanas antes de la elección, las encuestas difundidas por El Universal, La Jornada y Consulta Mitofsky daban una ventaja de cinco a 11 puntos al abanderado de “Aliados por tu Bienestar” (PRI-PVEM-Panal) sobre el candidato del PAN, aunque el número de indecisos rebasaba todavía el 30%.

No obstante, Carlos Lozano prefiere exhibir las encuestas que lo mantienen con al menos 14 puntos de ventaja sobre Orozco.

Y es que aquí no sólo se disputan el gobierno del estado, los 11 municipios y 27 diputaciones (18 de mayoría). El PRI podría ganarle al PAN el tercer estado en el centro del país –el año pasado le arrebató San Luis Potosí y Querétaro–, con lo que Acción Nacional se quedaría con Guanajuato como único bastión en la zona.

La campaña negra

El proceso electoral en Aguascalientes comenzó prácticamente por la vía judicial, con una denuncia que interpusieron regidores del PRI contra Orozco y que, se afirma, fue impulsada por el gobernador Reynoso Femat.

Al respecto, la candidata del PRD, Nora Ruvalcaba, señala a esta reportera que, en principio, de haber sido otro el candidato del PAN y si el gobernador Reynoso hubiese podido imponer a su elegido, el Partido Verde y el Panal estarían aliados con Acción Nacional y no con el PRI.

“Pero como el gobernador quedó derrotado en su afán de imponer a su candidato, entonces los manda para que se alíen con el PRI, donde el mandatario está operando una campaña, utilizando los recursos estatales, y donde su gobierno y los priistas están recurriendo al clientelismo, corporativismo, compra del voto, así como amenazando y sembrando el temor entre la población.”

La izquierda fue polarizada gracias a esta operación de Reynoso Femat, quien, en acuerdo con las dirigencias locales del PT y Convergencia, les impuso a sus candidatos y dejó al PRD ir solo con Ruvalcaba. “Por ejemplo, en el municipio de San José de Gracia, donde Reynoso Femat y el expresidente Vicente Fox tienen a futuro inversiones turísticas, el candidato del gobernador contiende por el PT”, asevera Ruvalcaba.

Combativa desde su curul en el Congreso local, Ruvalcaba también recuerda cómo las fracciones de PT y Convergencia rechazaron las cuentas del exalcalde de la capital y ahora candidato Martín Orozco, “justo cuando Reynoso vio que sería el candidato de Calderón”.

Refiere que las cuentas del gobernador Reynoso correspondientes a 2007 arrojaron en el Congreso 188 observaciones, por las cuales se tendrían que resarcir al erario más de 900 millones de pesos, de diversas áreas de la administración estatal.

En ese mismo lapso, precisa, el gobierno de Martín Orozco tuvo del Órgano de Fiscalización 33 observaciones por 120 millones de pesos. “Pero –sostiene– el Congreso aprobó las del gobierno del estado y no las del municipio, en esta guerra desde entonces dirigida contra Martín Orozco…”.

Ruvalcaba también exhibe al candidato priista Carlos Lozano de la Torre, “porque –afirma– en sus 30 años en el servicio público se ha dedicado a hacer negocios; ahí está pendiente la solicitud de juicio político que no se le quiso admitir en el Congreso de Zacatecas por la venta ilegal de terrenos mediante un fideicomiso por el que cobraba comisiones”, cuando fue secretario de Desarrollo Económico en el sexenio de Ricardo Monreal.

–¿Qué es lo que se juega, entonces, en Aguascalientes? –se le inquiere.

–Creo que son intereses económicos de un grupo y de otro los que están en juego. No entenderíamos de otra manera la actuación de un gobernador panista a favor del candidato del PRI. Los candidatos juegan el papel de peleles, le dan continuidad a un Aguascalientes en el que han crecido la extorsión, el secuestro, el desempleo; de seguir así, puede convertirse en un Tamaulipas o un Chihuahua, donde los gobernantes prácticamente están vinculados al crimen organizado –responde.

Además de las mutuas acusaciones por el tema del presunto enriquecimiento indebido del candidato de la “Alianza por tu Bienestar”, el martes 15, diputados del PRI y la senadora Norma Esparza protestaron ante la delegación de la Secretaría de Desarrollo Social y acusaron al delegado Pedro Vargas de la Mora de operar a favor del PAN la entrega de costales de cemento y cal del programa Ahorro y Subsidio para la Vivienda Tu Casa.

A los ciudadanos beneficiados se les invita a afiliarse al PAN con los líderes de colonias antes de recibir los apoyos, de acuerdo con esta denuncia que los priistas acompañaron con fotografías y videos, y que tuvo eco en la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, donde la bancada del PRI requirió la comparecencia del secretario Humberto Félix Guerra para aclarar tales cargos, que derivaron igualmente en la denuncia AP/PGR/AGS/II/363/2010 en materia electoral.

Interrogada sobre la guerra sucia, la senadora Norma Esparza dice a Proceso que el hecho de que ahora se observe ese fenómeno en el estado es “porque se ve que (los panistas) han perdido”. Y agrega: “Está toda la mano del presidente. Son patadas de ahogado. Calderón debe sacar las manos de este proceso”.

Mientras que el dirigente del PAN, Arturo González, “ha sido agredido, denostado con mentiras, difamaciones…”, el candidato Lozano critica a los delegados federales, “quienes –dice– durante casi cuatro años (por las diferencias entre Calderón y Reynoso Femat) no le han traído un beneficio al estado y ahora tienen una presencia que no habían tenido; estamos esperando que el 4 de julio le metan todo.

“Obviamente –continúa– vamos a defendernos; no somos inocentes y haremos todo lo necesario para ganar muy bien esta elección, frenar esta intervención (...) Estamos luchando contra el presidente Calderón”, subraya.

En tanto que, desde la casa de campaña del PAN, Arturo González desliza una advertencia similar: “En el PAN nos defenderemos con todos los elementos a nuestro alcance. ¡No nos vamos a dejar!”. l

Los que no importan
Toni Arnau

En Coatzacoalcos unos 70 migrantes centroamericanos están con la cabeza gacha, los hombros caídos y la mirada extraviada. Parece que exageran el gesto, pero resulta que el gesto les queda corto. Aquella tristeza colectiva ocurre en un albergue para indocumentados en tránsito. Todos ellos llegaron montados en el gusano de acero, en el tren, como polizones, en su intento de llegar a Estados Unidos. Aún en el sur de México, en el inicio de su viaje, la mayoría se rindió. Querían que los agentes de Migración los recogieran y los deportaran. Durante un año, periodistas del medio digital salvadoreño El Faro y de la organización española de fotografía Ruido Photo viajaron con los migrantes centroamericanos a través de México. Recogieron historias, fotografías y videos de esos seres que a nadie le importan; testimonios de muerte, secuestro y violación. Retrataron los prostíbulos de la trata, el viaje en La Bestia, los montes extraviados, los desiertos del norte y las casas de secuestro. Se toparon con Los Zetas, los policías corruptos, los bajadores, los coyotes y los juntadores. Ahora esos periodistas, quienes convergen en el proyecto En el camino y cuyos trabajos se difundieron por primera vez en este semanario (ediciones 1714, 1716 y 1720), presentan dos libros –uno de fotografías, otro de crónicas del reportero salvadoreño Óscar Martínez: Los migrantes que no importan– y un documental dedicado a las más vulnerables entre los vulnerables: las mujeres que transitan ese camino. Con la autorización de los autores y de la editorial Ruido/Blume/El Faro, Proceso ofrece en exclusiva fragmentos sustanciales de una de las crónicas del libro, las palabras de presentación escritas para este trabajo por Julio Scherer García y algunas de las 124 fotografías del reportaje gráfico. El documental será presentado el próximo 29 de junio a las 18:30 horas en el Centro Cultural de España, ubicado en la calle de Guatemala número 18, en el Centro Histórico de la Ciudad de México, y los libros el día 30 a las 19:00 horas en el mismo lugar.

“La Bestia”
Óscar Martínez / Cronista del proyecto En el camino

Viajar en tren como polizón es indignante. Allá arriba se te ocurren decenas de preguntas absurdas: ¿por qué vamos colgados del techo si los vagones viajan vacíos? ¿Por qué no puede ir más despacio? ¿Nadie nos va a proteger de ese asalto? ¿Qué terrible historia obligó a los que me rodean a montar sobre La Bestia? ¿Y por qué este viaje aterrador, nocturno y veloz termina por engancharte? Éste es el camino por excelencia del centroamericano indocumentado. Éste es su medio de transporte, éstos sus asaltantes y éstas las vías donde las ruedas de acero han amputado piernas, brazos, torsos, cabezas. Migrantes.

El potente pitido suena profundo y prolongado en la oscuridad. La Bestia llega. Un toque. Dos toques. La llamada imperativa del viaje. Los que están dispuestos tienen que seguirla en este momento. Esta noche unas 100 personas lo hacen. Se levantan de su sueño, se sacuden el cansancio acumulado, encajan en sus hombros las mochilas, cargan las botellas de agua y caminan otra vez hacia el inicio de un recorrido de muerte.

Las siluetas del grupo de los fuertes se distinguen entre las sombras que recorren las vías del tren. Son una treintena de contornos masculinos. Perfiles de guerreros. Desde sus manos, como extensiones del cuerpo, se dibujan troncos y varas de hierro de hasta dos metros. No están dispuestos a ceder en caso de que asaltantes del camino hagan su abordaje. Saben que entre ellos mismos, migrantes centroamericanos, pueden ir ya esos piratas de las vías, listos para atacar en la oscuridad selvática del recorrido entre Ixtepec y Medias Aguas, entre los estados de Oaxaca y Veracruz.

Parlamentan en las vías mientras la locomotora ordena en un solo carril los 28 vagones que están a punto de salir. La consigna es unánime: “si es necesario, pelearemos”. La mayoría de los cajones de acero están alineados; sin embargo, aún hay algunos en otra de las líneas férreas. Es momento de incertidumbre. Las cien sombras giran la cabeza de lado a lado, como si intentaran leer los movimientos. Se apresuran a lo largo de la vía y luego vuelven. Es necesario tomar una decisión antes de que las máquinas jalen la carga y los polizones que van hacia el norte tengan que abordarla en marcha.

Este será mi octavo viaje, pero acostumbrarse a este momento me ha resultado imposible. Es un vaivén de siluetas que corren y gritan; de fondo, el sonido metálico de La Bestia lo inunda todo, y no hay mucho tiempo para pensar. En el cerebro, una sensación entre el miedo y la emoción por algo nuevo. Sólo sabes que no quieres perder el tren, que no te quieres equivocar de vagón y acabar en la línea de cajones que no se moverá. Sólo piensas en ti mismo, en esa escalera que has elegido, en treparla, en que nadie se interponga.

En medio de las dos filas el grupo de 30 hombres elige su territorio: la línea de la izquierda. Uno tras otro suben por la escalerilla lateral y se posan en el techo del tren de mercancías. El vagón es suyo. Esos 20 metros serán su nido durante al menos seis horas de viaje. De sus parrillas se aferrarán durante todo el recorrido, para no caer y ser tragados por las ruedas de acero. Ese espacio es el que defenderán. Por eso destierran a un joven moreno, salvadoreño, de unos 17 años. Durante algunas horas del día, en el albergue de Ixtepec, a la orilla de las vías, el muchacho habló con un pandillero deportado que regresaba de Estados Unidos y que, aislado del resto, fumó mariguana gran parte de la tarde. Tienen desconfianza y prefieren no arriesgarse. “Vos no venís con nosotros”, le dice uno de ellos a manera de orden, y el joven, ante la mirada de todo el grupo, decide ir a buscar otro lugar.

En este vagón, con el grupo de salvadoreños, nicaragüenses, guatemaltecos y hondureños que se han juntado en el camino, nos acomodamos el fotógrafo Eduardo Soteras y yo.

Las pocas mujeres que abordan el sólido gusano se acomodan en los balcones que hay entre vagón y vagón. Algunos, los menos, tienen plataforma abajo. El resto, sólo unas vigas metálicas sobre las que los migrantes tendrán que hacer equilibrios. Pero viajar ahí supone no tener que esquivar los cables y ramas que se entrometen en el camino de los que van arriba. También evitan las corrientes de viento que harán tiritar a muchos que se lanzan sin abrigo.

Arriba se acomodan los 30 albañiles, fontaneros, electricistas, agricultores, carpinteros y jardineros convertidos unas horas en guerreros por un viaje que se ha cobrado un número indeterminado de vidas. Nuestro círculo más cercano lo componen unos hermanos con pinta de raperos que tras ser deportados van de regreso hacia el que consideran su país; un ex militar que quiere volver a su vida de albañil en el norte; y también viaja Saúl, el muchacho que se exhibe confiado de su dominio de La Bestia. Sube y baja, amarra su bolsa de plástico a las parrillas y luego se lanza a recoger cartón de las vías para que la fibra de vidrio del techo no le penetre las nalgas como constantes picadas de zancudos. Los cuatro son guatemaltecos.

La locomotora echa a andar. Jala los 28 vagones. El golpe seco empieza desde la cabeza y resuena hasta la cola, en efecto dominó. Tac, tac, tac. Un vagón tras otro es arrastrado por la potente máquina, mientras los migrantes se aferran donde pueden. Muchos han sido mutilados en este primer movimiento cuando, ignorantes de las reglas de La Bestia, han apoyado su pie entre la juntura de los vagones: dos barras ensambladas una dentro de otra, con un sistema de amortiguación para cuando el tren frena o jala. Las muelas les llaman. Ahí, entre el traqueteo del efecto dominó, el tren les ha triturado el pie como martillo a una nuez.

Pero este inconveniente está de sobra compensado por una ventaja invaluable: La Bestia se monta mientras está detenida. En otros puntos, como Lechería, Tenosique, Orizaba o San Luis Potosí, al tren hay que agarrarlo en marcha, porque los famosos garroteros, guardias privados de las compañías ferroviarias, impiden el paso a las estaciones y los migrantes tienen que acechar su transporte más adelante.

En uno de mis viajes, Wilber, un veinteañero hondureño que guiaba a indocumentados por México, me dio un curso básico de cómo treparse al tren cuando ya está en marcha.

–Primero, lo medís. Dejás que las manijas de los vagones te golpeen la mano, para ver qué tan rápido va, porque esto hay que sentirlo, no sólo verlo. Engaña. Si te creés capaz, corrés unos 20 metros para tomarle el ritmo, agarrado de una manija. Cuando ya le tengás el pulso, te dejás ir con los brazos. Te levantás con los puros brazos, para alejar las piernas de las ruedas, y apoyás en las gradas la pierna que tengás del lado del tren, para que tu cuerpo se vaya contra el vagón y no te desbarajuste.

Cuando lo intenté en aquella ocasión estábamos en Las Anonas, un pequeño poblado entre Arriaga e Ixtepec. El tren pasó a unos 15 kilómetros por hora y yo cometí el error básico de los que han sido mutilados en este arranque: olvidé el detalle de la pierna y apoyé en la escalera la contraria. Estaba sostenido del agarradero con el brazo izquierdo y, más abajo, mi pie derecho se posó en la grada, mientras el resto de mi cuerpo quedó maniatado por ese nudo de extremidades. El tren me arrastró varios metros, porque el cuerpo perdió su punto de equilibrio. Por suerte, algunos se bajaron a desentramparme.

Sin embargo, Wilber cree que esos viajeros que quedan mutilados tan pronto en el viaje “tienen suerte”, porque el tren va lento y pueden tomar una decisión.

–Yo vi cómo a uno el tren le pasó encima de la pierna –dijo Wilber tranquilo, como quien cuenta el resultado de un partido de futbol–, porque no pudo agarrarlo cuando ya iba corriendo. Pero como no iba tan rápido, le dio tiempo de verse la pierna cortada y de meter la cabeza abajo de la siguiente rueda. Pues sí, si iba a buscar un trabajo allá arriba es porque no ganaba bien abajo, y ya sin una pierna, ¿qué iba a hacer?

¿Por qué no dejarlos subir mientras la locomotora no arranca? ¿Por qué, si se sabe que de todas formas subirán, obligarlos a abordar el gusano en movimiento? Es una pregunta que ninguno de los jefes de las siete empresas de ferrocarriles contestará. No dan entrevistas, y si se logra hablar con ellos por teléfono, cuelgan cuando se enteran de que se pretende conversar sobre migrantes.

El viaje se inicia. La poca luz de los dos reflectores de las vías de Ixtepec desaparece mientras nos internamos en un paraje de llanos iluminados sólo por el resplandor amarillento y suave de una luna llena grande y misteriosa.

Éste es el transporte de los migrantes de tercera, los que viajan sin coyote y sin dinero para autobuses. Ellos repetirán al menos ocho veces esta dinámica de abordaje en el territorio mexicano. Dormirán en las vías en varios puntos, esperando que aquel pitido no se les escape y les haga pasar una noche, dos o tres a la espera del siguiente. Recorrerán más de 5 mil kilómetros bajo estas condiciones. Ésta es La Bestia, la serpiente, la máquina, el monstruo. El tren. Rodeado de leyendas y de historias de sangre. Algunos, supersticiosos, cuentan que es un invento del diablo. Otros dicen que los chirridos que desparrama al avanzar son voces de niños, mujeres y hombres que perdieron la vida bajo sus ruedas. Acero contra acero. Una vez escuché una frase en uno de estos viajes nocturnos: “Este es primo hermano del río Bravo, porque la misma sangre tienen, sangre centroamericana”. (...)

La mordida de la bestia

Esta tarde, mientras esperábamos la llegada del tren, conversamos con Jaime Arriaga. Es un hondureño humilde. Tiene 37 años y es el clásico campesino que se fue con un sueño muy diferente al del joven migrante que busca un carro, ropa diferente, darse algún lujo y parecerse a su primo que regresó vestido con una camiseta de Los Angeles Lakers. Jaime salió en enero de este año de su humilde aldea en la costa caribeña de Honduras, y en su mente sólo traía una imagen: su humilde casa, en su humilde aldea, rodeada de dos manzanos, de sembradillo de maíz, arroz y frijol.

Era su segundo intento. El primero le permitió pasar dos años en Estados Unidos. Ahorró. Logró construir en su aldea una casa de cemento y teja que le costó 17 mil dólares. Y regresó a Honduras para quedarse porque ya tenía lo que quería: su casa y sus cultivos. Pero seis meses le duró la inversión de dos años: “Un huracán, una tormenta de esas que siempre caen en esa parte de Honduras, me destruyó todo”. Todo: la casa y la milpa.

Y entonces, como la primera vez, Jaime empacó un poco de ropa y algunos dólares, y se despidió de su mujer.

–Ya sabés que la única manera de volver a lograr lo que he perdido es en Estados Unidos.

Pero antes de llegar a Estados Unidos está este camino, que a veces arrebata más de lo que ya se ha perdido. Esta tarde, en el patio de la casa del sacerdote Alejandro Solalinde, en Ixtepec, Jaime hablaba bajo un árbol de mango, sentado en una silla de plástico y con su pie izquierdo apoyado en la tierra. Su otra pierna termina en muñón. Carne blanda que aún cura. El tren le arrancó el pie derecho el 16 de enero.

A Jaime lo venció la desesperación. Quería avanzar y avanzar. Ver florecer su milpa lo antes posible. Pero La Bestia se ensaña con los impacientes. Estaba cansado, había dormido poco y acababa de llegar de Arriaga, tras 11 horas de tren. Con el cansancio cerrándole los ojos, se subió en la máquina que salió hacia Medias Aguas y que sólo arrastraba cajones. Ni un vagón bueno. Una combinación mortal.

Los cajones son literalmente eso, cajas rectangulares de acero, sin balcones entre vagón y vagón, sin parrillas arriba en las que meter los dedos para sostenerse. En medio de cada cajón sólo están las muelas del tren, y una pequeña barra de hierro sobre la que los impacientes se paran y se sostienen como crucificados de la pared del cajón. El suelo discurre abajo, a pocos centímetros de los pies de los que viajan en esas junturas. El recorrido es de seis horas. Seis horas en cruz, aguantando, apretando los dedos. El tren llega a alcanzar los 70 kilómetros por hora. A veces en curva. Y no hablamos de la velocidad de un carro. El tren hace que esa velocidad sea una experiencia diferente. No es un automotor arrastrado por cuatro ruedas. Es un gusano sólido de hasta un kilómetro de largo que se retuerce y contonea mientras avanza y chilla. Una máquina imponente.

En ese trayecto Jaime habló con su primo y otros dos nicaragüenses que lo acompañaban en aquel viacrucis. Hizo algo de ejercicio de brazos para intentar despertarse. Y casi lo logra. “Un minuto cerré los ojos”, recordó. Más bien se le cerraron. El cansancio, tras varios días de camino para rodear casetas de carretera hasta llegar a Arriaga y un tren de 11 horas bajo el inclemente sol chiapaneco hasta llegar a Ixtepec, es mucho cansancio. Mucho sueño. Un viaje donde se descansa poco y mal. No se duerme bien en las noches en el monte durante las paradas en las caminatas. Un ojo está cerrado y el otro medio abierto, escrutando la oscuridad.

Cuando despertó, Jaime se sintió caer, y asegura que en ese momento la vida se ralentizó. Él flotando en el aire. Él dándose cuenta de que iba directo hacia las vías. Él y sus rezos: “Dios mío, guárdame”. Y luego, todo volvió a ser ruido y velocidad. Quedó pegado como esparadrapo al suelo. La Bestia es colosal. Rompe el aire, crea corrientes cuando pasa, y esa corriente hizo que Jaime quedara pegado a los soportes de cemento de las vías, con la cabeza a centímetros de las ruedas de acero.

–Sólo escuchaba: riiin, riiin, riiin, cómo pasaba el tren. Casi me quedo sordo.

Cuando la mayor parte de vagones habían reventado los tímpanos de Jaime, se creó una corriente diferente que lo despegó de los soportes y lo levantó como una pluma que flotó durante unos segundos hasta ser tragada por el efecto de vacío e introducida en las vías. Entonces, el último vagón le pasó por encima a su pierna derecha, y luego la cola de aire de la máquina lo escupió hacia el monte, tal como se lo había tragado.

–Yo sentía que estaba bueno. No sentía dolor.

Es lo normal. La historia se repite en todos los migrantes mutilados con los que he hablado. Al principio no duele. Luego, antes o después, el dolor hace que se te contraigan los músculos del rostro, y un repentino e intenso calor invade tu cuerpo hasta hacerte sentir que la cabeza va a explotar.

Jaime sintió que algo le faltaba cuando intentó pararse. Se dobló y volvió a caer. Estaba mutilado. Su pierna terminaba en huesos estrujados y pellejos que aún sostenían su pie amoratado, casi por caerse. Quiso salir del monte ayudado por unos palos, pero esas hilachas de piel se enredaban con la maleza y lo retenían. Sacó su navaja y se terminó de separar lo que el tren le había mascado. Arrancó un harapo del pantalón que se había molido con su carne y se hizo un torniquete.

Logró caminar una hora siguiendo las vías. “No sentía dolor.” Cuando ya no tenía fuerzas de caminar y se sentía mareado, había logrado llegar hasta un punto donde una callejuela de tierra cortaba las vías. Ahí quedó tirado durante 10 horas. Escuchando y viendo, sin poder moverse. Solo. El tren atraviesa montes, corta llanos, bordea pueblos. Si alguien se cae del tren, sobre todo en tramos rápidos como este entre Ixtepec y Medias Aguas, nadie lo socorrerá. Logrará salir de ahí si lo logra. Así de sencillo. Si no, morirá desangrado y nadie más volverá a saber de él. Ninguna estadística lo incluirá y se considerará un desaparecido sólo si un familiar pregunta por él en el consulado de su país.

A las cuatro de la tarde, Jaime estaba rodeado de zopilotes que esperaban por un pedazo de carne. Fue entonces cuando una pick up se detuvo. Tres hombres bajaron, y uno más, escuchó Jaime, se excusó: “Yo no voy, padezco del corazón y, si lo veo, capaz que me muero primero que él, porque está vivo”.

Lo llevaron al hospital, lo sedaron, lo amputaron hasta la rodilla. Cuando despertó, alucinaba. “Le veía unos cachos en la cabeza a la enfermera, como si fuera el demonio”. El dolor llegó esa noche. Jaime soñó que jugaba futbol, que pateaba una pelota con el pie que ya no tenía. Su cuerpo dormido hizo el movimiento, y se despertó en medio de un intenso dolor, de un calor que le recorría el cuerpo desde el muñón del que aún brotaba sangre. El grito fue tan estruendoso que varias enfermeras se presentaron en el cuarto.

–Que descansen –dijo Jaime a modo de consejo para los que viajan como él, cuando la conversación terminó a la sombra del árbol de mango–. El tren nunca se arruina. Estados Unidos no se va. Es mejor llegar tarde que nunca llegar.

La tensión del viaje

El tren se detiene en La Cementera, una sucursal de la empresa de concreto Cruz Azul incrustada en esta selva. La máquina despega vagones y se cambia de carril para recoger otros que luego alinea en la columna de acero. Es momento de hacer guardia. Los hombres del vagón se levantan y fijan sus ojos en las veredas que circundan el tren.

Los asaltantes del camino se incorporan entre los polizones cuando la máquina hace paradas o los maquinistas, a veces de acuerdo con estos piratas, bajan la velocidad de las locomotoras para que puedan trepar. En este vagón, los hombres levantan sus varas y palos. Los dejan a la vista, para que se sepa que si hay asalto habrá respuesta. Un indígena guatemalteco sujeta la rama que lleva como si fuera un fusil, y apunta a la oscuridad. La silueta engaña.

El grupo divisa una algarabía lejana. En los vagones de atrás se ve movimiento y una lámpara que se enciende y se apaga, cada vez más cerca de nuestro territorio.

La señal clara de que hay asalto en la noche, me dijo una vez un migrante, es cuando la luz de una linterna se mueve sobre los techos. En una ocasión, mientras hacía este mismo recorrido, ocurrió eso: a lo lejos, se veía la circunferencia resplandeciente de la linterna sobre el tren. Avanzaba y desaparecía entre los vagones, seguramente cuando los asaltantes bajaban a los balcones a recoger el dinero. Luego, el circulito luminoso volvía a emerger y a avanzar. Esa vez logramos librarnos gracias al ingenio de un salvadoreño que recomendó al fotógrafo que encendiera todas sus luces, incluido un reflector portátil, de un solo golpe y en dirección hacia los asaltantes. Así fue. El círculo luminoso dejó de avanzar. Se quedó inmóvil unos minutos y luego, en una parte de lenta velocidad, lo vimos saltar del tren y perderse entre los árboles.

Los asaltantes del tren, salvo cuando han ocurrido abordajes específicos para secuestrar mujeres, y se trata del crimen organizado, son delincuentes comunes, habitantes de rancherías cercanas a las vías. Amigos del pueblo, débilmente armados, con un revólver calibre .38 y machetes. Pero también son asaltantes despiadados, sabedores de que si hay oposición, se trata de matar o morir. De lanzar o ser lanzado a las vías.

La guardia se monta rápido. Un guatemalteco vigila la parte trasera del vagón mientras otro compatriota se encarga de la delantera. Saúl, el joven de 19 años que se exhibía confiado de su dominio de La Bestia, se cubre con la capucha de su sudadera. “Para parecer más barrio”, argumenta. Al fondo, en la cola del tren, se divisa el movimiento de lámparas, pero aún es muy pronto para saber de qué se trata.

Saúl enciende un cigarrillo y repite en voz alta la consigna: “¡A la puta, si es un ladrón que se deje venir, aquí lo atendemos!”. Es su quinto intento por regresar al país del que fue deportado hace cerca de mes y medio. Allá pertenecía al Barrio 18, la pandilla más numerosa de Latinoamérica. Hizo algunos asaltos menores por los que cayó preso.

Suma cuatro intentos fallidos, atrapado por la Migra mexicana. Lleva miles de kilómetros sobre La Bestia. Y una consigna: “Hay que tener respeto a este animal. Si has visto lo que yo he visto, hay que tenerle respeto”. Así, joven duro como es, hombre prematuro que huye de su país porque la otra pandilla, la Mara Salvatrucha, tiene dominada la colonia donde vive, Saúl sabe dónde está parado, y sabe que el techo del tren no es mejor que lo que ha vivido.

–Siempre da miedo, siempre.

La escena que nunca se le borrará de la mente es la de una hondureña de unos 18 años con la que viajó en su primer reintento hace unas semanas. Ella cayó en medio del alboroto que se formó cuando todos pensaron que había un operativo de Migración más adelante. Cayó.

–La vi cuando se iba para abajo, con los ojos bien abiertos –recuerda.

Y después sólo alcanzó a escuchar un fino alarido que se extinguió de golpe. A lo lejos, vio rodar algo.

–Como una pelota con pelos, supongo que su cabeza.

El sacerdote Alejandro Solalinde es el artífice de que esos operativos hayan disminuido en el sur mexicano. Protestó ante el Instituto Nacional de Migración. No era posible que se hicieran de noche, en lugares montañosos. Una escena que apabullaría a cualquiera: la noche, el sonido constante del tren que combina el ruido del golpe metálico con unos chillidos finos, tétricos, que a veces parecen el grito lejano de una mujer, y de repente, a los costados, una iluminación cegadora. Decenas de reflectores y gritos: “¡Bajen, bajen, bajen!”. Y el tren deteniéndose, y sombras lanzándose sobre las vías, donde las llantas de acero aún pueden rebanar. No es posible, argumentó Alejandro Solalinde, tienen que encontrar otros métodos, porque muchos quedan mutilados en la estampida. Ciegos que corren, ciegos que saltan, ciegos que empujan.

Desde entonces los operativos en el sur han cesado. Más adelante, luego de rodear la capital mexicana y atravesar un lugar llamado Lechería, ya no son dominios de Alejandro Solalinde, y aquellos sobresaltos nocturnos aún se dan.

Las linternas se acercan. Cuando avancen dos vagones más será posible saber de qué se trata. Saúl enciende otro cigarrillo.

–Hicimos un pacto de que no nos van a asaltar –continúa Saúl–. La .38 tiene seis balas y a un par se pueden llevar, pero después les va a caer toda la raza y les va a aplicar la ley del tren.

La ley de La Bestia que tan bien conoce Saúl y que sólo deja tres opciones: resignarse, matar o morir.

–Fue hace un mes, cuando me agarraron en Reynosa, ya en la frontera. Esa vez, entre Arriaga e Ixtepec, al tren se subieron tres muchachos. Cabal, dos con machete y uno con la .38 de tamborcito. La onda es que esa vez no íbamos de acuerdo los del vagón, pero cuando el de la pistola le pasó por el lado a un hondureño que iba ahí... Cobrando el dinero andaba el de la pistola, y tonto, pues, él se tiene que quedar apuntando en la esquina del vagón, y mandar a uno con machete a recoger... La onda es que el hondureño le agarra la pierna y lo bota, y la gente rapidito se le aventó a los dos del machete…

Y ahí viene, la ley del tren.

–…primero los reventamos a verga. Después, el mismo hondureño le dijo a un su amigo: hey, ayúdame. Y agarraron al de la pistola, uno de los brazos y otro de las piernas, y lo aventaron entre los dos vagones. Partidito en dos lo hizo el tren. Lo mismo le hicieron al otro. Cuando iban por el tercero, un salvadoreño les dijo que mejor lo dejaran, para que fuera a contar que la raza no se iba a dejar. Lo tiraron a un lado del tren, pero había como un barranco ahí. Yo creo que igual se murió también.

¿Cuántos cadáveres se habrán fundido con la tierra que rodea las vías? Bien dijo una vez Alejandro Solalinde que estos terrenos son un cementerio anónimo. (...)

El olvido del sur
Julio Scherer García

Este libro acerca de la migración centroamericana en México de paso para los Estados Unidos no requiere de introducción alguna. Los hechos que narra tienen la contundencia inexcusable de la barbarie.

En la frontera de México con Guatemala se vive la cotidiana liquidación de la persona, igual que en un campo de concentración. La sodomía, el asesinato, la tortura, la amenaza sistemática, la separación de hombres y mujeres que se aman, la explotación de los niños, el desprecio por los bebés, que “ya tienen edad para morir”.

Aún antes de que terminara la primera mitad del siglo pasado, México había vuelto la espalda al sur del continente. Volcados nuestros gobiernos a los Estados Unidos, vieron en la pujanza del país vecino su propio porvenir. Olvidaron el dato esencial en esta entrega de nuestra economía y nuestra política al Tío Sam: los Estados Unidos viven la democracia al interior de la nación y el imperialismo hacia el exterior. Son explotadores de la riqueza ajena. Y ahí sucumbimos nosotros, cegados por un sol blanco.

Declaraciones van y vienen y en todas ellas el gobierno de Felipe Calderón, como todos los anteriores desde Miguel Alemán, claman por un trato justo a nuestros compatriotas. Hace tiempo padecimos el trato indigno a nuestros braceros, fuerza de trabajo barato en los campos estadunidenses. Ahora ya ni eso. Asistimos a los asesinatos de los guardias fronterizos de los Estados Unidos. Caen los mexicanos, a veces en racimos, y los sobrevivientes de este éxodo que va de regreso nos cuentan sus desgracias con todos los matices del rojo sangre y el ocre tragedia, dolor.

Experiencias tan contrastadas, el olvido del sur y la fijación paranoica en el norte, debieran obligarnos a mirar nuestra política exterior de otra manera y dar un paso, un vistazo limpio a un problema que hace trizas el evangelio laico de los derechos humanos. l

El infatigable Monsiváis: hospital...
Jenaro Villamil

Acerca de Carlos Monsiváis, todo ha sido dicho… pero en su caso, el todo es insuficiente. Figura central de la cultura mexicana en la segunda mitad del siglo XX, Monsiváis rasguñó con su omnipresencia, su talento y su inteligencia el siglo XXI. Colaborador de Proceso desde la fundación de nuestro semanario, Monsiváis marcó a muchos mexicanos ilusos que hacia los sesenta o setenta creyeron en la transformación social de nuestro país… y que, como él, acabaron dándose cuenta de que la realidad engaña y que lo visible cambia para disfrazar el deterioro esencial. En estas páginas ofrecemos textos, imágenes, momentos, fotografías, añoranzas del Monsiváis que ya se fue pero que nunca se irá...

Entre los festejos del Centenario de la Independencia organizados por Porfirio Díaz en el ocaso de su régimen y fenómenos de espectáculos como Shakira y la nueva tradición de la música popular, Carlos Monsiváis escribió los borradores de dos ensayos de largo aliento que iba a trabajar, antes de que su ingreso a terapia intensiva, en Médica Sur, interrumpiera su incansable labor intelectual. En su cuarto de hospital, entre el 26 y 27 de marzo, escribió estas líneas que reflejan su madurez ensayística y su curiosidad en torno a todo lo que fuera un fenómeno social, político y cultural de México.

Las Esencias Viajeras

(Porfirio) Díaz es el caudillo carismático (el término no existía, pero el conjuro del nombre y la figura sí), que se hizo necesaria para unificar. Así, no sólo los enterados de la Ilustración y la Reforma liberal tendrían derechos, sino todos carecerían de derechos ajenos a su poder económico y social. Díaz fue el encargado de abrir el espacio de la Gente Decente y de ofrecer al vulgo o, acudo a un término de la época, al infelizaje.

El Romancero se hace en el apoyo ya tambaleante del régimen. Es ya tiempo de elogiar a la gran Historia, pero ya terminó, porque Díaz es su continuidad y su negación.

El heroísmo sólo tomó sentido en el pasado; lo de ahora es la construcción, heroica si se quiere, del Progreso. Y es necesario que los romances o poemas elogien no sólo al Caudillo, sino a los seres anónimos “que ofrendaron su vida en el altar de la Patria” . El Pípila es uno de ellos, pero hay muchos campesinos, artesanos, comerciantes, boticarios, soldados municipales, estudiantes de seminarios que adoptan la religión cívica.

Ante la pretensión de aristocracia, la evocación del recuerdo del pasado realmente existente. Este es el gran mérito del Romancero. Alaba la Independencia como un todo y ve en el martirio el único elemento trágico que, la moraleja no es suya, evoluciona en la felicidad de la dictadura de Díaz...

México no es una ciudad burguesa; es, sí, una ciudad con zonas burguesas y una clase media en diversos grados de movilización, pero en lo básico México es una ciudad plebeya por el impulso de la demografía y por la imposibilidad de regentear a las masas. Pueden ser difíciles o escasamente levantiscas, pero nunca están ausentes, y el peso de su presencia cancela las pretensiones de la Ciudad de los Palacios…

Espectáculos

Lo de Reír Llorando

De 1960 para acá. Se confina o desaparece el teatro frívolo y las carpas. ¿Quiénes las necesitan luego de la televisión? Siempre en Domingo, coordinado por Raúl Velasco, es un gran teatro frívolo a la semana, lo que se complementa con las giras.

El bolero terminó en los sesenta y la canción ranchera parece llegar a su fin con la muerte de José Alfredo Jiménez y Tomás Méndez, y el arrinconamiento de Cuco Sánchez, aunque persistan las cantantes: Lola Beltrán, Lucha Villa, Amalia Mendoza La Tariácuri, Chavela Vargas. Casos aparte: Antonio Aguilar y Vicente Fernández.

La Nueva Tradición

La resurrección del bolero y la canción ranchera.

Las modas juveniles que marcan las generaciones, envejecen junto a las canciones: el grupo Timbiriche, un ejemplo. Televisa produce cantantes que generan un público que se moderniza a su paso. Un ejemplo de ahora: Thalía, Paulina Rubio, Alejandro Fernández, lejanos, sin embargo, del éxito de la colombiana Shakira.

La moda internacional: Sinatra, Los Beatles, Los Stones, Michael Jackson, Madona, Lady Gaga.

El góspel no cuaja.

La onda Grupera. Los Tigres del Norte.

Mambo. Cha, cha, chá. La relación con Cuba.

La industria del disco.

Cambia la idea del espectáculo porque la TV lo rige todo.

Internet.- Bajar canciones. El intérprete es el primer intermediario de una cadena que deposita la canción en la zona de la moda que es intercambio social.

Creación de las famas a plazo fijo. l

La tía María
Jenaro Villamil

Sobreviviente de una dinastía de cinco hermanos que emprendió el éxodo urbano de La Lagunilla hacia la colonia Portales, de fe protestante, de origen humilde y de memoria prodigiosa, María Monsiváis Biadas, a sus 87 años, es el afecto más antiguo y enraizado del escritor Carlos Monsiváis, a quien vio nacer cuando ella tenía 15 años y medio y de quien se despidió en medio de aplausos y miles de condolencias en los funerales del Museo de la Ciudad de México y en el Palacio de Bellas Artes, el 19 y 20 de junio.

Cientos de personas se acercaron a la tía Mary a darle sus condolencias, pero ella recuerda en especial a “una señora del pueblo” que pasó a orarle al féretro y gritó: “Felipe Calderón, a ti no te queremos, queremos a Monsi”.

–¿Le hubiera gustado a Carlos que asistiera el presidente Calderón a su funeral?

–No. El decía siempre: “Soy del pueblo, al pueblo pertenezco” –subraya la tía, entrevistada en su habitación de la colonia Portales, en la misma casa donde convivió por más de seis décadas con Carlos Monsiváis.

La tía también recuerda que se le acercó Andrés Manuel López Obrador y le dijo: “No sabe cómo voy a extrañar a Carlos, porque él me corregía los discursos del Zócalo.”

“Me impactó tanta gente en el funeral. Yo estaba hasta confundida. El domingo se me acercó un señor. Se sentó a mi lado. Creía que era Marcelo Ebrard y le comencé a platicar como si fuera él. Luego me dijo que era Lujambio”, rememora la tía Mary, con un dejo de sonrisa pícara.

Antes de la entrevista con Proceso, la tía recibió una carta de condolencias de Cuauhtémoc Cárdenas. Se disculpó por no haber ido al funeral. Estaba fuera del país.

Hermana de Esther Monsiváis, La Máster, como le llamaban sus sobrinos a la madre de Carlos Monsiváis, la tía Mary recuerda que desde su nacimiento el escritor fue el hijo, el sobrino y el nieto consentido en una familia gobernada por su madre “con carácter enérgico, pero de muy buenos sentimientos”:

“Carlos nació junto al templo, en la calle de Rosales. Nosotros vivíamos en la calle de Isabel La Católica. Cuando Carlos tenía tres años, nos cambiamos un tiempo a la colonia Álamos y poco después a San Simón Ticomán, en la colonia Portales”, rememora.

Monsiváis relató así, en la primera página de su autobiografía precoz, aquel éxodo urbano:

“Un carromato polvoso, una familia apiñada que entretiene la odisea cantando himnos, pruebas del cielo bajo la forma de agentes de tránsito y al final Canaán-Portales, la tierra prometida donde los hijos crecerán en paz, sin el espectro del hambre y la intolerancia.”

–¿Usted cuidó a Carlos en su infancia?

–Sí. Yo lo llevé al kínder en la calle Quintana Roo y a jugar en el Parque Hundido. Era un niño muy tranquilo. No sabía leer, pero ya le gustaba agarrar los libros y hojearlos.

–¿Recuerda cuál fue su primer libro?

–Su madre le compró El tesoro de la juventud apenas aprendió a leer. Luego leyó muchos textos religiosos. De adolescente, en el templo, hacían concursos de citas bíblicas. En medio minuto, Carlos encontraba la cita bíblica. Ganaba todos los concursos, hasta que el pastor le pidió a su madre que ya no concursara para que dejara ganar a otros.

–¿Doña Esther también tenía buena memoria?

–Tenía memoria fotográfica. Le recitaba siempre el poema de “Por mi madre, bohemios”, que a él le gustaba mucho.

–¿De qué vivían?

–Ella fue secretaria. Trabajó desde muy joven, ella era el pilar de la casa. Tuvo primero un estanquillo de hilos, velas, camisetas, sobre la calzada de Tlalpan. Y acabó poniendo en la accesoria de esta casa una tienda de regalos.

Gatos y celebridades

–¿Cuándo tuvo Carlos su primer gatito?

–A los 10 años empezó con los animales. Le regalaron un gatito. A su mamá no le gustaba. No dejaba que entrara a la casa. Cuando Carlos regresó de un viaje que hizo a otra ciudad, se molestó mucho cuando se enteró de que su mamá le había regalado el gatito.

“Luego tuvo dos o tres gatos. Se quedaban afuera de la casa. Él le pedía a su madre: ‘Mamá, déjame verlos media hora’. ‘Bueno, media hora solamente’, le respondía. Después que murió su madre, conmigo abusó. Metió una enorme cantidad de gatos a la casa. El tenía 13 gatos. Sólo uno se murió, Mito Genial.”

–Varias personas le regalaban gatitos, ¿no?

–Blanca Guerra le regaló uno. En los setenta, Octavio Paz le regaló otro. Habían discutido y esa fue una señal de reconciliación.

–¿Recuerda usted a todas las personas de la farándula que visitaban a Carlos?

–Bueno, vino a comer aquí Juan Gabriel. Él se llevaba mucho con Elsa Aguirre, con Tongolele, con Ninón Sevilla, con María Victoria.

–También con María Félix.

–A ella sólo la vi de espaldas. Era una mujer muy orgullosa, siempre que llamaba por teléfono daba órdenes: ¡Dígale a Carlos que estoy saliendo de Cuernavaca y voy a Polanco! Nunca decía, por favor ni nada.

–¿Se llevaron mucho?

–Sí. Recuerdo que en un homenaje María Félix dijo frente a Carlos: “Este sabe más de mi vida que yo”.

–¿También lo visitó Carlos Slim?

–Sí. Una vez vino. El pobre no se enteró que uno de los gatitos le había orinado su saco. Y así se fue.

–¿Lo visitó Carlos Salinas?

–Salinas le hablaba mucho a la casa. Recuerdo que durante su campaña lo invitó a una gira. Y mi muchachito le dijo: “No voy porque tú no eres mi candidato”.

El cine y la escuela

–¿Cuándo comenzó el gusto de Carlos por el cine? ¿Lo recuerda?

–Desde los siete años comenzó a ir a un cine cercano aquí que se llamaba el cine Bretaña. Le encantaban todas las películas, sobre todo las mexicanas.

–¿Por qué?

–Haga usted de cuenta que mi madre, su abuelita, era igual que Sara García en Los tres García. Le gustaba mucho esa película.

–¿Dónde estudió la escuela primaria?

–El primer año su madre lo metió al Instituto Franco Español. Recuerdo que él llegó diciendo una mala palabra y su madre le preguntó: “¿Dónde aprendiste eso, m’ijito?”. A mí me dijo que si estaba pagando con sacrificios una escuela privada, no tenía caso enviarlo para que aprendiera malas palabras. Lo cambió a una escuela pública. En un año cursó el primero y segundo año. La maestra le dijo a su mamá: “Su hijo se aprende todo muy rápido”.

–¿Era de puros dieces?

–De 10 y de nueve.

–¿Dónde aprendió el gusto por el idioma inglés?

–El inglés lo aprendió con una maestra particular. Él iba eventualmente. Estuvo ahí durante varios años, pero tuvo un amigo, Luis Prieto, que estuvo con él en Gran Bretaña, con él practicaba mucho el inglés.

–Teniendo una infancia tan religiosa, ¿cuándo dejó de ir, Carlos, al templo?

–A los 18 años. Yo le pregunté: “¿Carlos por qué ya no vas al templo?”. Y me respondía: “Tía, ya sé muy bien lo que enseñan”. Después me enteré que sí iba al templo, pero cuando nadie lo veía.

La tía Mary está cansada. Confiesa que no ha dejado de pensar en él y en sus conversaciones.

“Él platicaba mucho conmigo. Era muy bromista. La última broma que me hizo fue antes de que ingresara al hospital. Dijo: ‘Mi tía está afligida porque no tiene vestido negro para ir a mi funeral’.” l

Su mamá, “educadora de tiempo completo”: Poniatowska
Armando Ponce

La joven escritora Elena Poniatowska conoció antes a la mamá de Carlos Monsiváis que a él. Doña Esther llevaba y cobraba los artículos que el escritor, joven también, entregaba a diarios y revistas.

“Era una maravilla, organizadísima”, cuenta Poniatowska en la sala de su casa, para agregar:

“También decían que su mamá se los escribía. Así hacíamos el chiste de que era su mamá…”

La llegada de su hijo Felipe da un giro a la conversación cuando encuentra una caja de chocolates y los reparte. Está presente además Marisol González Tolentino, quien ha solicitado a la escritora permiso para reproducir en Contraseña, revista de la delegación de Coyoacán, la carta que leyó en el homenaje a Monsiváis. El videoasta entra con dos compañeros de trabajo, viene de Puebla a saludar a Elena, debe regresarse inmediatamente. La escritora le pregunta si recuerda de niño cómo era Monsiváis, y Felipe Haro señala que le llamaba mucho la atención sus lentes grandotes. Cuando se le interroga sobre su trabajo, remite a You-Tube, donde está su video de animación El burro que metió la pata, un cuento de Poniatowska de los setenta, narrado por ella misma.

Regresa la autora de La noche de Tlatelolco:

“Nuestra amistad era áurica. Él era como el confesor, y era a su gusto de él, cuando él quería... él decidía. Los gatos eran como sus secretarios, sus asistentes, pero fíjate que su mamá no hubiera permitido tanto gato.

“Doña Esther le iba a cobrar a Era o a algún otro lugar, o llevaba sus manuscritos y nos veíamos ahí y nos hicimos amigas. Era una campeona de natación, era todo lo deportista que no era Monsi, que huía del agua como los gatos. Era una pedagoga maravillosa y educadora de tiempo completo, porque ella hizo que su hijo leyera. Además Monsi se sabía la Biblia de memoria, porque doña Esther le decía ‘a que no te aprendes otro, a que no te aprendes otro’, y se sabía todo de memoria, todo López Velarde, ‘El brindis del bohemio’, todo, y canciones enteras. Una vez que veníamos de Veracruz todo el camino completo se vino cantando, nos venimos cantando, y él cantaba muy bien.”

–Y usted se hizo amiga de su mamá y al mismo tiempo de él.

–Sí claro, de los dos, pero fíjate que su mamá me decía: “No me cuenta nada, regresa de una conferencia y no me cuenta nada”, y yo le contaba que de tal persona había dicho que era inteligentísima y que había dicho tal o cual chiste, le hacía la crónica de los acontecimientos de la vida de su hijo, bueno, y yo creo que a ella eso le gustaba. Me conmovía mucho que si yo iba a Bellas Artes y daba él una conferencia ahí la veía sentada yo. Iba a las conferencias mías y a las de Carlos, aunque a Carlos no le gustaba mucho que fuera… él era como muy secreto, y cuando acababa de estar, acababa de estar. De repente estaba comiendo con alguien y se paraba y lo dejaba con la palabra en la boca. Es muy bonito ese dicho de “acabé de estar”. Carlos era extremadamente libre, eso refleja mucho su carácter, pero también era de una bondad infinita porque en sus dedicatorias a la gente, lo más largas posibles, no sabes con qué cuidado se las hacía, tenía mucho respeto por su público, sabía tratar muy bien a la gente que se le acercaba, escuchaba con enorme atención.

–Eran los sesenta. ¿Guarda alguna primera impresión sobre él?

–Recuerdo a un muchacho de pelo negro, muy ingenioso, muy inteligente, y a José Emilio Pacheco, alto, flaco, guapo. Y andaban juntos, andaban mucho por la avenida Juárez, por la zona de los periódicos. Octavio Paz estaba en la Secretaría de Relaciones Exteriores frente al “Caballito”, pero el “Caballito” de a deveras, e iban a ver a Paz. Y luego entraron al suplemento de Benítez. Y Benítez siempre decía: “Los que antes fueron mis discípulos ahora son mis maestros”.

–Sergio Pitol apareció en esos tiempos, ¿ya lo conocía?

–Yo conocí a Pitol pero en Polonia, en Varsovia, pero él venía casi cada año de vacaciones a México y siempre decía que le era muy difícil volver a entender el mundo cultural de México, porque cuando el año anterior todos eran muy cuates, al siguiente todos se había peleado. Pero eso sí, siempre fueron unos amigos entrañables y terribles Luis Prieto, Carlos y Pitol, ahí José Emilio ya no iba, hacían barbaridad y media en las fiestas, se reían, eran cómplices.

“Pero él era muy notable porque sacaba conclusiones buenísimas. Él es un gran pensador, en cierta manera es un filósofo, siempre están diciendo “el cronista”, pero es mucho más, no es que anotara lo que estaba sucediendo, es que sacaba conclusiones a futuro de lo que estaba sucediendo, y conclusiones bien profundas, y analizaba a México. Leer a Monsi no es muy fácil, tienes que pensar, pero también lo que dice se te queda grabado como un estilete.

“Sería bueno dejar de decir que es cronista, creaba, era un creador de primera. Tenía ideas muy, muy profundas, Paz lo consideró un interlocutor verdadero, quiso polemizar con Monsiváis, consideró que de todos el que estaba a su altura era Monsiváis. Además decía que había un ‘estilo Monsiváis’ y le festejaba cualquier cosa que él decía, y Monsi tenía una enorme admiración por Paz, y también por José Emilio...”

Sonríe:

“... y por sí mismo.”

La última vez que lo vio fue en el hospital.

–¿Ya no pudo hablar con él?

–Yo hablé mucho, fui la única que habló. Le dije que le echara ganas, que su mamá se enojaría si no salía adelante, que iba a salir adelante, hablé tanto que yo creo que estaba molestando hasta a los otros enfermos.

“Pero ahorita vas a ver que van a salir muchas cosas de Monsiváis, muchos libros. Va a florecer Monsiváis.” l

Por mi madre BOHEMIOS: Lo inolvidable
Carlos Monsivais

Con casi 42 años de vida, Por mi madre, bohemios fue el espacio privilegiado para mostrar la ironía, el compromiso político, el amplio conocimiento de refranes, versos populares y, sobre todo, la pluma filosa de Carlos Monsiváis. Desde marzo de 2006, esta columna fue publicada ininterrumpidamente en Proceso, por invitación de Julio Scherer García. A continuación se presenta una selección de las mejores declaraciones que nos regalaron los visitantes consentidos de Por mi madre, bohemios, realizada por Jenaro Villamil.

Hoy la R. guarda silencio, pero nuestro optimismo aЬn necesita ser recordado y documentado. Las versiones completas estЗn en el nuevo blog www.pormimadrebohemios2.wordpress.com.

SECCIоN “LAS INOLVIDABLES” PARA DOCUMENTAR NUESTRO OPTIMISMO.

-LO тNICO MALO ES QUE LAS ASPIRINAS PARA CURAR EL CATARRO TRAкAN CIANURO.

“En el pasado, a Estados Unidos le daba un catarro y a nosotros pulmonТa. Hoy se puede decir lo inverso: a Estados Unidos le dio pulmonТa y nosotros estamos con un catarro.”

AgustТn Cartens, secretario de Hacienda o el ministro Desenfriol. Nota de Juan Antonio ZЬЦiga, La Jornada, 26 septiembre de 2008.

-CONSTE, ESTA CONFESIоN NO SE HIZO EN UNA IGLESIA BAJO LA PRESIоN.

“Es tan aceptable una campaЦa de miedo como una de alegrТa.”

GermЗn MartТnez, exdirigente del PAN. Citado por зlvaro Delgado, El engaЦo, prОdica y prЗctica del PAN, Ed. Grijalbo.

-јCоMO LLORAN LAS MUJERES? јGRITAN “BU, BU” O SE QUEJAN PORQUE DIOS LAS PREVINO DEL MACHISMO?

“Yo tendrТa ningЬn problema en llorar como mujer lo que no pude defender como hombre. Como hombrecito aceptarО cualquiera que sea la decisiЧn.”

Jorge Hank Rohn, al garantizar el resultado de las elecciones del 5 de agosto de 2007. Nota de CОsar Cepeda, Reforma, 27 julio de 2007.

-ME INVITAS OTRA BALA O TE LA INVITO (LOS DE ADELANTE MUEREN MENOS, LOS DE ATRзS SE INFECTARзN).

“Es menos probable que un mexicano muera de sida que por las balas del narcotrЗfico” (porque las balas sТ usan condЧn, la R.).

Documento de la SecretarТa de Seguridad PЬblica. Nota de HОctor de MauleЧn, El Universal, 18 de enero de 2008.

-UNA BREVE, BREVE, INTRГPIDA, COMPACTA EXPLICACIоN (QUE NO SE RELACIONA CON LA GUARDERкA ABC).

“Ese calentamiento global, como cuando a un bebО se le arropa demasiado, provoca alteraciones de temperatura, provoca alteraciones de clima.”

Felipe CalderЧn Hinojosa, discurso del 22 de enero de 2008.

-QUE ACTITUD TAN CORTГS PARA DECIR “NOS VEMOS A LA SALIDA, PERO NO LLEVEN PUДAL”.

“SeЦores, los estamos esperando, mОtanse con la autoridad y no con los ciudadanos, los estamos esperando, eso es una invitaciЧn que les hacemos.”

Fernando GЧmez Mont, secretario de los retos, al desafiar al cЗrtel de La Familia. Nota de Ariadna GarcТa, Reforma, 22 de julio de 2009.

-UN ALBUR ES UNA BENDICIоN MAL ENTENDIDA.

“A mТ me la persignan.”

OnОsimo Cepeda, obispo de Ecatepec, al comentar las acusaciones de fraude en su contra. La Jornada, 14 de noviembre de 2008.

-DE CUANDO LAS HEREJкAS SE PRODUCкAN тNICAMENTE POR AMOR AL TURISMO.

“Jesucristo es el mЗs grande solterЧn de la historia, pero de casarse hubiera elegido a una tamaulipeca.”

Manuel Cavazos Lerma, exgobernador de Tamaulipas, en discurso de campaЦa. El Universal, 11 noviembre de 1992.

-Sк QUE SE LLEVABAN PESADO EN AQUELLAS ГPOCAS.

“SeЦor presidente (Carlos Salinas de Gortari), que Dios lo guarde muchos aЦos y que los aЦos sean de hule… seЦor.”

Vicente FernЗndez, charro, cantante y reeleccionista. Nota de Elena Gallegos, La Jornada, 4 de octubre de 1992.

-јY QUIГN ES ESE SEДOR? EL DON DE HUMOR (INVOLUNTARIO, AUNQUE NO RIME).

“јQuiОn es ese que anda ahТ? Es el PRI, es el PRI.”

Beatriz Paredes, dirigente nacional del PRI, durante un homenaje a Gabilondo Soler, Cri Cri. Nota de Ana Laura VЗzquez, Reforma, 10 de noviembre de 2008.

-NUNCA LE DEJARON COMPRAR A BUEN PRECIO LOS IDEALES Y LOS PRINCIPIOS. POR ESO LOS RAPTо CON ENTEREZA Y VALENTкA.

“-En su epitafio, cЧmo quisiera que se le recordara: sindicalista, reformadora, reformista, compradora de Hummer?

“-Como una mujer que yace congruente con sus ideas, con sus principios, con su sentir. Como Elba Esther que cumple…

“-De su liderazgo.

“-Yo no soy, como dicen ‘lТder moral’. Yo soy ‘lТder legal’.”

Elba Esther Gordillo, entrevista con Carlos MarТn, Milenio Diario, 20 octubre de 2008.

-SI ES UN CRITERIO GEOPOLкTICO, јDоNDE DEJA A ECUADOR?

“MОxico es el centro del mundo… GeogrЗficamente allТ estЗ.”

Gerardo Ruiz Mateos, secretario de EconomТa. Nota de Julio Reyna Quiroz, La Jornada, 3 de febrero de 2009.

SECCIоN “COOPELA LEYENDO ESTA SECCIоN O CUELLO”

-A LO MEJOR LO QUE QUERкAN DECIRLE ERA ALGO ELOGIOSO: SI COOPERABA LE REGALARкAN UN COLLAR DE PERLAS, SI NO, EL DE SIEMPRE.

“Coopera o cuello, le habrЗn dicho los funcionarios mexicanos.”

Zhenli Ye Gon, empresario chino involucrado en acusaciones por lavado de dinero. Nota de AP, 3 de junio de 2007.

-ASIGNATURA PENDIENTE: LA LECCIоN DEL MAESTRO A LOS DELINCUENTES.

“Pretendo darle una lecciЧn a Zhenli Ye Gon, su defensa estadunidense y a todas aquellas personas que quieran meterse con personas honorables en MОxico… El que nada debe nada teme” (esta frase deberТa revisarse porque en el paТs de la impunidad, lo comЬn es que el que nada teme todo debe, la R.).

Javier Lozano, secretario del Trabajo. Nota de AgustТn MartТnez Xelhuantzi, Milenio, 5 de julio de 2007.

SECCIоN: “COMO LOS GAYS NO SE MULTIPLICAN, SON UN PELIGRO PARA LA DEMOGRAFкA DE MГXICO”.

-AY, JALISCO, NO TE MANCHES (ME SALE DEL ALMA QUEMAR UN CONDоN).

“El sida se da por promiscuidad, no se da por usar condones (ajЗ, del Sic, asТ que, a ver, lОalo de nuevo). Si una persona le es fiel a su pareja, no tiene riesgo de sida, a no ser por transfusiЧn sanguТnea. SО que esto es raro, pero esto es lo que sТ da sida… Repartir condones es mucho muy sencillo, lo podrТamos hacer a travОs de un concesionario, lo podrТamos hacer a travОs de una empresa comercializadora de entrega de mercancТas”.

Emilio GonzЗlez MЗrquez, el GЧber Piadoso de Jalisco, Nota de Francisco de Anda, Reforma, 8 de agosto de 2007.

-TANGA, TANGA MкA, ADMINкCULO QUE BRILLA EN MIS
PUDENDAS.

“Estamos promoviendo una sexualidad en el amor, donde los jЧvenes deciden ‘no al sexo’ hasta el matrimonio, estamos promoviendo la fidelidad conyugal, que los esposos, la esposa, Ьnicamente tengan relaciЧn con los esposos (јQuiОnes son los esposos? A ver si dejan que la esposa haga mОnage con ellos, la R.). Si se cumplen estas dos medidas se va a acabar el aborto, se va a acabar el sida y muchas otras enfermedades de transmisiЧn sexual.”

Jorge Serrano LimЧn, dirigente nacional de Provida y responsable de una estafa de millones de tangas. Nota de Karla Portugal, Reforma, 27 de agosto de 2008.

-PARA MATRIMONIAR NUESTRO OPTIMISMO.

“En el caso de los matrimonios gays, estoy del lado de Dios, que ha enseЦado que tal uniЧn sЧlo se da entre varЧn y hembra. El matrimonio es entre el hombre y la mujer; las otras, las sociedades de convivencia, no son matrimonio.”

Pedro Pablo Elizondo, obispo de CancЬn. Nota de Hugo Martoccia, La Jornada, 2 de febrero de 2010.

SECCIоN “LOS PERIODISTAS SON TEXTOSERVIDORES, LOS LECTORES SON CHISMES SERVICIALES Y LAS DECLARACIONES DE LOS PODEROSOS SON REGALOHABIENTES.

-QUE DEVUELVA LA HONRA O QUE SE VAYA A FREкR ANоNIMOS.

“Aunque ustedes (las internas del penal femenil de Santa Martha) hayan sido condenadas y seЦaladas por la sociedad, fuera de este lugar hay gente peor que destroza la dignidad de las personas, verdaderas prostitutas, verdaderos prostitutos de la comunicaciЧn que deshacen la fama de los demЗs, no mata el cuerpo del otro, pero es una vТbora que mata la fama de los demЗs.”

Cardenal Norberto Rivera, arzobispo de la Ciudad de MОxico. Nota de La Jornada, 20 de diciembre de 2007.

SECCIоN “LA DEMOCRACIA ES EL EJERCICIO MONOPоLICO DE LA AUTORIDAD MORAL”.

-NO COMMENT.

“Mi deber elemental es no aferrarme a cargos ni mucho menos obstruir el paso a personas mЗs jЧvenes, sino aportar experiencias e ideas.”

Comandante Fidel Castro, al contender para reelegirse como presidente del Consejo de Estado de Cuba. El PaТs, 19 de diciembre de 2007.

-PRIMERO LOS INVITA Y LUEGO LOS DESCALIFICA.

“Renuncio a participar en coloquios o mesas redondas porque son como desfiles de modas donde los ponentes tratan de lucirse. Para encontrar soluciones a los problemas sociales se plantean masturbaciones teЧricas. Los ponentes exhiben su anorexia, su delgadez intelectual.”

Subcomandante Marcos, al concluir las mesas redondas convocadas por el EZLN. El PaТs, 17 de diciembre de 2007.

SECCIоN “ATLACOMULCO, TU CIELO / TIENE RIQUEZAS TRANQUILAS / COMO UN ESTADO ENTERITO / CEDIDO A TRES FAMILIAS”.

-SI USTEDES SIGUEN LA LоGICA DEL DECLARANTE, ACABARзN VIVIENDO EN ATLACOMULCO.

“-јExiste o no el Grupo Atlacomulco?

“-Pues no existe como tal (es sЧlo un spot, la R. en pantalla). No existe mЗs que para personajes que han salido de este municipio y de ahТ seguramente que le hayan dado este nombre de Grupo Atlacomulco, pero no existe ni como cofradТa ni como grupo ni organizaciЧn polТtica. Es algo que se ha convertido ya en un mito, en una leyenda incluso de descalificaciЧn.”

Enrique PeЦa Nieto, gobernador del Estado de MОxico, VersiЧn estenogrЗfica de su discurso de aniversario de Isidro Fabela. 29 de junio de 2009.

SECCIоN “SI NO FUERA POR EL DESPOTISMO CLASISTA, NADIE SE ENTERARкA DE LA EXISTENCIA DE LOS POBRES”.

-QUE NO RESPIREN LOS PIOJOSOS PORQUE MANCHAN MIS CUENTAS DE BANCO QUE MANDГ HACER A MANO A UN CASTILLO DE SEVILLA.

“Si defiendo a los ricos, se me vienen encima los piojosos del PRD, lОase LЧpez Obrador y sus secuaces, no todo el PRD, y soy perverso, y si defiendo a los pobres, tambiОn; luego, no me queda mЗs que seguir siendo yo.”

Diego FernЗndez de Cevallos. Nota de DemiЗn Duarte, El Financiero, 19 de junio de 2009.

SECCIоN “EN LO QUE NO HABкAMOS PENSADO ES EN LA NECESIDAD DE QUE MURIERAN DESPUГS DE LA SENTENCIA, Y ADEMзS, DE QUE LA SENTENCIA FUESE CONDENATORIA”.

-LA PENA DE MUERTE TIENE UNA VIRTUD ESENCIAL: LE AGREGA AL ESTADO EL ADJETIVO DE ‘VERDUGO’, DE TAN BONITAS Y COQUETAS RESONANCIAS.

“La discusiЧn en Coahuila no es la pena de muerte, es cЧmo los vamos a matar; si los vamos a fusilar, si los vamos a degollar, si los vamos a ahorcar o algo light, que puede ser la inyecciЧn letal. Pero un desgraciado que hace eso (secuestrar), јtЬ crees que merezca consideraciones?”

Humberto Moreira, gobernador de Coahuila, Nota de Milenio Diario, 3 de diciembre de 2008.

-TODO SE SOLUCIONA CON EXPULSAR DE MГXICO A CIUDAD JUзREZ, CULIACзN Y TIJUANA.

“La violencia es sЧlo una de las variables de la delincuencia y no afecta a todo el paТs, porque casi 60% de los homicidios dolosos se concentran en Ciudad JuЗrez, CuliacЗn y Tijuana”. (MЗs los que se sumen en las prЧximas dos horas, la R.)

Genaro GarcТa Luna, secretario de Seguridad PЬblica. Nota de JesЬs Aranda, Milenio Diario, 17 de febrero de 2009.

-PORQUE EL PRD NO INVESTIGA A NADIE, LE CREE A TODOS, ES INCAPAZ DE SOSPECHAS.

“El PRD no tiene una oficina de asuntos policiacos, y estoy seguro que en el PRD con Almaraz, en el PRI con el exgobernador de Quintana Roo (Mario Villanueva) y en el PAN con el exgobernador de Morelos (Sergio Estrada Cajigal), a todos nos pasa.”

JesЬs Ortega, dirigente del PRD. Nota de Fernando Paniagua, Reforma, 6 de abril de 2009. l

Monsiváis en la memoria
Miguel Ángel Granados Chapa

Detesto el género periodístico que en la pretensión de evocar a un personaje echa por delante la primera persona: “Conocí a Fulano….”, como si ese dato fuera relevante. Detesto ese género pero hoy, excepcionalmente, voy a practicarlo. Y repetiré el ejercicio la próxima semana.

Vi por primera vez a Carlos Monsiváis en la entonces Escuela Nacional de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional en 1960 o 1961. Formaba parte de una breve brigada informativa que acudía a solicitar apoyo a los ferrocarrileros y maestros en huelga. Sobresalía en el grupo, por su estatura, Martín Reyes Vayssade que, a diferencia de Monsiváis, recorrería en su vida estaciones variadas como ser vocero de la firma Ingenieros Civiles Asociados o subsecretario de Cultura en la SEP.

Supe que Monsiváis era Monsiváis porque eran ya conocidas sus colaboraciones en publicaciones de la UNAM y en México en la cultura, el suplemento que dirigía Fernando Benítez en el diario Novedades, que estaba a disposición de los estudiantes en la Biblioteca Central. Lo supe también quizá porque entre los estudiantes de izquierda en esa escuela, que eran los más, Monsiváis era motivo de discordia. Sabría después que la causa era su expulsión o su renuncia al Partido Comunista, en una de tantas purgas con que se depuraba. Algunos lo veían con recelo y otros con simpatía, según su propia posición frente al PC, que estaba aún lejos de su apertura.

En las primeras redacciones que habité –la revista Mañana y el semanario Crucero– se hablaba de Monsiváis con curiosidad, respeto y aun admiración. Compré en 1966 o 67 su Autobiografía precoz, publicada por Emmanuel Carballo en Empresas Editoriales, que también dio a la estampa las breves vidas de Vicente Leñero, Gustavo Sáinz, Juan García Ponce y Raúl Navarrete, que murió pronto. A partir de aquella lectura su presencia me pareció próxima, pero no fue sino hasta 1968 cuando cruzamos algunas frases en la redacción de Excélsior, antes o después de que conversara con el director Julio Scherer sobre la publicación de desplegados de la Asamblea de Intelectuales y Artistas que él promovía.

Poco después, en 1969 o 1970, se incorporó a las páginas editoriales de ese diario. Nos vimos a partir de entonces con regularidad, aunque no tanta como estaba previsto. Tenía su lugar en el espacio principal de la página siete, los sábados, de modo que debía entregar los viernes a la hora del crepúsculo. Rara vez cumplía el horario. Se retrasaba a sabiendas que la entrega tardía no iba a impedir la aceptación de su texto. Era en extremo autocrítico, no inseguro sino exigente consigo mismo. Más de una vez luchamos físicamente por la posesión del original que ya me había entregado y se arrepentía de haberlo hecho porque no le satisfacía. Otras veces parecía mentir, pues anunciaba que estaba ya en el Metro y que en veinte minutos tendríamos su texto. Y podría ser que no llegara, no por irresponsabilidad sino porque en el vagón cavilaba sobre la calidad de su escritura y prefería el silencio que una comunicación a su juicio maltrecha.

Venía a veces, convocado ex profeso o no, al mediodía, y salíamos a comer él, Miguel López Azuara, tan responsable como yo mismo del manejo de las páginas editoriales y en cuya personalidad rivalizaban la inteligencia y la simpatía, y el que escribe. A veces nos acompañaban otros colaboradores de la sección, todos los cuales, aun Ricardo Garibay que poseía un ego robusto, invariablemente daban –dábamos– un lugar eminente a Carlos, que hablaba más que comía dada su parquedad gastronómica. Mientras los comensales hacían lo propio, él se daba vuelo al desplegar sus mordacidades y sarcasmos que no impedían la generación de ideas brillantes en que su mente era pródiga.

Un día Carlos y yo aceptamos cenar en la Fonda del Refugio con Fausto Zapata, encargado de la información en la presidencia de Echeverría. Trataba de modificar o atemperar el criterio con que expresábamos opiniones en nuestros artículos. No lo consiguió ni siquiera cuando, buscando encontrar un flanco débil, convocaba a Carlos, y de paso a otros, a la sala de exhibición que la Presidencia tenía cerca de Los Pinos (en un recinto llamado según creo La Tapatía). Allí vimos películas como el Caso Mattei. Pero ni así mudaba sus pareceres Monsiváis. Años después se quejaría falsamente al lamentar que alguien le hubiera hecho fama de incorruptible, porque nadie se atrevía a corromperlo.

Los años de nuestros encuentros en Excélsior coincidieron con los iniciales del Ateneo de Angangueo, una tertulia periodística organizada por Iván Restrepo, Manuel Buendía y Monsiváis, que se reunía los miércoles en la casa del primero, en la calle de Amatlán, en la ahora atestada colonia Condesa. También allí era eminente su presencia, no obstante que alternaba con personas como el propio Buendía, Francisco Martínez de la Vega, Alejandro Gómez Arias. Acudían, sin necesidad de ser invitadas –o sea que eran miembros de número– Margo Su, que hacía de anfitriona, y Elena Poniatowska. Una vez estuvo presente Ángeles Mastretta, que comenzaba su relación con Héctor Aguilar Camín, convidado a algunas de las reuniones y que nos invitó a la fiesta inaugural de Nexos, en el rancho Los Barandales de la familia Moreno Toscano. En esa revista mensual el sitial reservado a Monsiváis correspondía a su creciente autoridad.

En mayo de 1975 Jean Meyer organizó en la Universidad de Perpignan, su tierra natal, un seminario sobre México, con invitados procedentes del DF y mexicanos radicados en Francia, así como especialistas franceses. Salvo la puesta en escena de Nostalgia de la Muerte, de Villaurrutia, por Marta Verduzco, recuerdo más los viajes con Monsiváis que las ponencias de aquella reunión académica. Marta Isabel, la madre de mis hijos (que obviamente lo son también suyos) y yo nos encontramos en la estación de Austerlitz con Enrique Florescano y Alejandra Moreno (a quienes yo apenas conocía) que gozaban de la compañía de Monsiváis. La disfrutamos todos durante ocho horas, y al cabo de la reunión, el privilegio fue sólo para Marta Isabel y yo. No sé si coincidimos o Monsiváis como hoja al viento, como persona libre que era, encontró interesante nuestro propósito, el hecho es que resolvió viajar, como nosotros teníamos planeado, a Barcelona.

México y España no tenían relaciones diplomáticas entonces, y se requería visa para entrar en el país aún dominado por Franco. Los tres la recabamos en el consulado español en Perpignan y a bordo de un pequeño autobús cruzamos los Pirineos. En la frontera subió a bordo un guardia civil a quien no costó trabajo identificar a los mexicanos sospechosos que intentaban ingresar a España por la puerta de atrás. A Marta Isabel la dejaron en paz pero señalándonos con el dedo (usted… y usted) los guardias nos hicieron bajar a Monsiváis y a mí, únicamente entre todo el pasaje. Revisaron nuestras maletas en busca de bombas quizá o al menos de nitroglicerina para fabricarlas o, de perdida, de propaganda subversiva. En el regazo de Marta Isabel había quedado el programa común de los partidos socialista y comunista franceses (que tendría éxito seis años después, al ser elegido Miterrand), de manera que no tuvimos más problema que el susto que nos hizo padecer la corporación policiaca del franquismo. l

Ruta Zócalo-San Simón
Axel Didriksson

Más allá de la vaciedad fingida con la que se ufanan quienes sirvieron con recurrencia (llegará el momento en el que empiecen a brincar con furia) de materia prima al maestro de la ironía más aguda y ácida que he conocido en mi vida, Carlos Monsiváis tenía un perfecto círculo vital y de seguridad irremplazable para su existencia: la calle San Simón, en la colonia Portales.

En esa calle vivió los años prolíficos de su vida, y en ella lo conocí cuando ocupé un departamento a una cuadra de su casa. Como éramos vecinos, solía pasar por él para llevarlo a las reuniones con académicos y estudiantes durante el movimiento del Consejo Estudiantil Universitario (CEU) de la UNAM en los ochenta, y en todos los trayectos se asumía como un periodista nato porque sólo preguntaba.

Cuando no lo hacía, soltaba irreverentes metáforas o frases dobles de triple sentido. Así nos hicimos amigos, como muchos, con todo y que en las reuniones nunca participaba, a pesar de que anhelábamos que Carlos fuera el referente de conclusión de las largas peroratas; lo que más nos sorprendía es que nunca lo veíamos tomar notas. Sin embargo, su presencia se hacía indispensable porque, así lo sentíamos, al final su voz nos podía hacer visibles, aunque no existiéramos.

Cuando había gente asediándolo en su casa, se metía a mi departamento. Leía lo que encontraba en mi biblioteca y cuando lo creía prudente, se iba. Me lo encontraba también caminando rumbo a Tlalpan, para tomar un taxi o el metro Portales, porque no tenía otro remedio que caminar como hijo natural del barrio del cual se sentía enormemente orgulloso. Cuando por razones familiares tuve que cambiar de residencia, a la primera comunicación telefónica que tuve con él, me dijo seco, sin decir ni bueno, ni hola, así: “traidor del barrio”. Habíamos estado juntos por esos rumbos 11 años.

Desde entonces, Carlos fue el referente asiduo, pero a menudo inalcanzable, para la firma del desplegado o de la carta al lector que creíamos fundamental para la causa, para su presencia requerida en tal o cual mitin, en los eventos académicos o culturales, en las marchas, en los proyectos nacionales o internacionales, en los encuentros en otros lugares, en las tertulias, en las comidas. Llegó a ser como para “iniciados” estar con él en esa casa de San Simón, tan llena de papeles, libros, muñequitos, pelos y olores de gato.

En una ocasión, Carlos me habló de la situación que padecía el maestro Othón Salazar. Era increíble la manera como seguía y tenía presente el estado y la condición de los luchadores sociales de todo el país. Le preocupaba la salud en extremo deteriorada del maestro, por lo que acordamos conjuntar esfuerzos con otros tantos colegas, para ayudarlo a soportar la ingrata condición en la que vivía, sobre todo porque desde el poder se le había quitado su plaza de maestro, y no había afrenta mayor para él. Quienes se la negaron y se la renegaron lo saben perfectamente; la última en hacerlo ocupa hoy la coordinación de su bancada en la Cámara de Diputados.

Hay un libro que estuvimos construyendo desde la Secretaría de Educación del GDF: Historia de los movimientos sociales de la Ciudad de México. Ojalá se edite este mismo año, como tenía pensado él. En las conversaciones que sostuvimos, él delineó este trabajo monumental. Nos propuso comenzar en 1906 con la organización de los anarquistas magonistas en la ciudad, pasando por las misas clandestinas, los acontecimientos populares durante la Revolución, la organización de la derecha nazi, las decenas de demostraciones claves de la época, y darle su merecido lugar a los movimientos ferrocarrilero, de maestros, de electricistas, de estudiantes (68/71), para culminar con el plantón contra el fraude electoral de 2006.

Cien años, el mejor motivo de un centenario popular. El eje de los trabajos, por autor, que están prácticamente culminados, era uno: el zócalo de la Ciudad de México, el corazón de lo que puede hacer o no visible cualquier movimiento nacional. Su publicación será otro motivo para seguir con él, siempre.

Porque para Carlos había, me corrijo, no uno sino dos lugares emblemáticos para sus disquisiciones de vida: San Simón y el Zócalo. Después de su calle, no había otro lugar en el mundo tan expresivo como el Zócalo de la Ciudad de México. De allí hacia fuera, todo era apenas unos cuantos círculos concéntricos. l

Carlos, los animales y la izquierda
Marta Lamas

Carlos Monsiváis pensó, escribió y actuó con una pasión ética a lo largo de toda su vida. Estos días hemos escuchado a diversas personas alabar su congruencia vital, hacerle justicia a su extraordinaria escritura, destacar su talento político, recordar su desbordante interés por cuanto le rodeaba, y reconocer su papel fundamental de aliado principalísimo y crítico de diversos movimientos sociales.

Uno de esos movimientos fue el feminista, al que acompañó desde su segunda ola a principios de los setenta. Carlos fue un aliado clave. No sólo escribió sobre él, también apoyó de forma eficaz las diversas luchas de las feministas. Pero hoy no voy a hablar de feminismo, sino de otra causa, tal vez la más perdida, de Monsiváis: su lucha en contra de la crueldad hacia los animales. Él no toleraba la injusticia de ningún tipo y consideraba que uno de los rostros más aberrantes de la violencia era el despiadado encarnizamiento contra los animales.

Lo obsesionaba una pregunta: ¿cuál debe ser una relación ética y justa con los animales? Me regaló incluso el libro Las vidas de los animales, de J.M. Coetzee, Premio Nobel de Literatura, donde este escritor sudafricano presenta en toda su complejidad un debate absolutamente conmovedor sobre el vegetarianismo ético. Esa era su postura: no se quedaba en un repudio intelectual a la crueldad, sino que la ponía en práctica hasta sus últimas consecuencias. Para él, el acto de mayor barbarie era criar animales para torturarlos públicamente, como en las corridas de toros y en los circos.

Adorador de los gatos, Carlos compadecía a todos los animales vejados, hambrientos o abandonados que encontraba en la calle. En alguna ocasión que fuimos a comer nos sorprendió al pedir un bistec para luego salir y ofrecérselo al perro que estaba en la entrada de la fonda.

Nuestra pasión compartida por los gatos (que se llama elurofilia) adquirió en Carlos dimensiones patológicas. Sus gatos eran sus amos, lo manipulaban, le destrozaban todo, le impedían dormir sin interrupciones, pero su goce elurofílico cancelaba cualquier racionalidad. Esa locura gatuna nos unía y teníamos largas charlas sobre nuestros felinos que, con frecuencia, derivaban al doloroso tema de las emociones de los animales. Él afirmaba: “Los animales tienen sentimientos y sienten dolor, alegría, amor y tristeza, como nosotros”. Y a continuación se preguntaba, y me preguntaba: “¿Qué vamos a hacer para que no los lastimen?”

Me pasaba libros, y revisábamos los argumentos que lo convencían o que lo ponían a pensar. Discutimos mucho sobre Peter Singer. Le gustó que éste bioético cuestionara la premisa de que sólo los miembros de nuestra especie merecen mayor protección que cualquier otro animal. Criticaba, igual que Singer, el postulado judeocristiano que dice que Dios creó al hombre a su imagen y semejanza y le otorgó el dominio sobre todos los animales. Consideraba que tal supuesto religioso tenía poca validez ética y le atraía la propuesta de tratar de establecer los límites de la distinción entre mamíferos humanos y no humanos.

Quería involucrarse más en las asociaciones de lucha por los derechos de los animales, pero no coincidía con la actitud de algunos grupos que abogan sólo por el respeto humanitario hacia los animales, sin interesarse por la desigualdad entre los seres humanos. No aceptaba que la izquierda optara sólo por defender derechos humanos y olvidara los de los animales. No hacía concesiones: hay que comportarnos como seres humanos verdaderamente humanitarios y no violentos en todos los ámbitos de la vida, pues limitarnos sólo a uno favorece la permanencia de la violencia.

Ahora que México enfrenta retos inquietantes y que la partida de Carlos nos deja desoladas a muchísimas personas, me agarro de lo que propuso Elena Poniatowska cuando se preguntó, hablando por todos nosotros: “¿Qué vamos a hacer sin ti, Monsi?” Ella decía, palabras más palabras menos, que lo que debíamos hacer era retomar sus causas y seguir luchando.

En la conferencia que dio en la UACM por sus 70 años, Carlos retomó el poema “1936” de Luis Cernuda y concluyó: “Lo que explica las causas perdidas es la certeza del valor inmanente de las exigencias de justicia y de las batallas para alcanzarla”.

En este momento en que nuestro país necesita más que nunca la lucidez, la radicalidad y el compromiso social de Monsiváis, espero que esta causa suya sea continuada por Chaneca Maldonado y otras valientes defensoras que lo hacen desde hace años, y que son, como dijo Cernuda: “testigos irrefutables de toda la nobleza humana”. Y ojalá que quienes encuentran en Carlos Monsiváis una guía ético-política de cómo dar esas batallas, de cómo ser mejores seres humanos y así sanar a nuestro maltrecho México, sientan la responsabilidad de incorporar esta causa, tan querida por él y lamentablemente tan olvidada por la izquierda. l

Texto leído el lunes 21 de junio en el homenaje del Gobierno del DF a Monsiváis.